El Barça vuelve a coronarse en Wembley
- Pedro, Messi y Villa marcaron para el Barcelona y Rooney para el Manchester
- El Barça gana su cuarta Champions en un año en el que firma el doblete
- Superó su propio nivel de 2009 ante el Manchester con un gran partido
- Envía tu felicitación al Barça, campeón de Liga y Champions 2010-2011
- Así fue el Barcelona 3-1 Manchester] | Datos y estadísticas
M.J. CALEYA
Ficha técnica:
Barcelona: Valdés; Alves (Puyol, m.88), Piqué, Mascherano, Abidal, Sergio, Xavi, Iniesta; Pedro (Afellay, m.92), Messi y Villa (Keita, m.86)
Manchester United: Van der Sar; Fabio (Nani, m.69), Ferdinand, Vidic, Evra; Valencia, Carrick (Scholes, m.76), Giggs, Park; Rooney y Javier 'Chicharito' Hernández.
Goles: 1-0, m.27: Pedro. 1-1, m. 34: Rooney. 2-1, m.54: Messi. 3-1, m.69: Villa.
Árbitro: Víktor Kassai (HUN). Mostró cartulina amarilla a Alves (m.60), Carrick (m.61), Valencia (m.79) y a Valdés (m.86).
Incidencias: Asistieron al encuentro 87.695 espectadores en la final de la Liga de Campeones disputada en el nuevo estadio de Wembley. En el palco de honor estaban presentes, entre otros el Príncipe de Asturias, el viceprimer ministro británico Nick Clegg y el presidente de la Comunidad de Cataluña, Artur Mas. También estaban en un lugar destacado el exentrenador barcelonista Johan Cruyff, así como Franz Beckenbauer y Fabio Capello, seleccionador de Inglaterra.
El FC Barcelona se ha vuelto coronar en Wembley con una victoria contundente por 3-1 ante el Manchester United y demostrando que la cantidad de títulos ganados en las últimos temporadas no son fruto de la casualidad. [Así te hemos contado el Barcelona - Manchester] [Datos y estadísticas del partido] [Así jugaron, uno a uno]
El Barça de Guardiola cierra así un ciclo, que se inició en este mismo escenario hace 19 años, cuando el 'Dream Team' de Cruyff consiguió la primera Champions de su historia pero lo hacen dejando patente que este Barça va a destronar, si es que no ha hecho ya, a ese equipo soñado del 92 y recordado por todo el barcelonismo y que rivaliza con los mejores equipos de la historia del fútbol
Si Koeman pasó a la historia del Barça y de Wembley, esta noche del 28 de mayo han sido Pedro, Messi y Villa los que han escrito su nombre en letras doradas en la historia del futbol, tras marcar tres auténticos golazos que perdurarán en en la memoria azulgrana. Es el cuarto título europeo del Barça, el decimotercero de un equipo español. Con cuatro 'orejudas', el Barça iguala al Bayern de Múnich y al Ajax de Amsterdam.
Con Roma en la retina
Un título conseguido como hace todo el Barça, a lo grande. Nadie esperaba un partido tan loco y desde luego con tantos goles, pero Wembley merecía una final así, ya que hasta aquí llegaron los dos mejores conjuntos de Europa.
El inicio de la primera mitad parecía la reedición de la final de Roma. El Manchester salió enchufadísimo, se hizo con el balón y no dio oportunidad al Barcelona, que veía impotente como no podría desarrollar su juego.
De hecho, en los primeros compases Valdés tuvo que arriesgar en una salida porque Rooney, con ganas de gol, se acercaba peligrosamente a su portería.
Pero como ocurrió en 2009, ese dominio inglés solo duró 10 minutos. Después, los chicos de Guardiola se hicieron con la pelota y, toque a toque, como a ellos les gusta a ellos, empezaron a asediar la portería de Van der Sar.
Un omnipresente Messi, que se llevó el título de mejor jugador del partido, lo intentaba por todos lados, y el argentino, junto con Villa tuvieron tres ocasiones bastante claras.
Pedro inició el camino
Pero al final fue Pedrito, que se está ganando el derecho a que le llamen Don Pedro, con todas las letras, el que abrió el marcador y acercaba más el sueño de la cuarta Championes.
La grada se venía abajo coreando el nombre del canario, experto en marcar en finales, pero sin querer restarle méritos, hay que destacar a Xavi que le dio un pase magistral, como solo él sabe.
El Barça comenzaba a sentirse cómodo. Tenía la pelota, creaba las ocasiones y estaba por delante en el marcador. Pero cuando nadie lo esperaba, fallaron en un saque de banda y apareció Rooney para decir que esta final no tenía el mismo guión que la de 2009.
El delantero inglés inició desde atrás, se fue muy veloz combinando con Giggs, que estaba en posición dudosa. El árbitro la dio por buena y Rooney aprovechó la ocasión para batir a Valdés.
El Barca peleó más
Con el empate en el marcador se llegó al descanso y tras la reanudación, Guardiola demostró que quería esta Champions más que Ferguson. Los 'red devils' se encerarron atrás esperando matar en una contra, pero el Barcelona no lo permitió.
La pelota parecía que estaba pegada a las botas blaugranas, pues los culés no desperdiciaban ni un solo pase y las ocasiones cernían sobre la portería de Van der Sar, 40 años de edad, que ha tenido la peor de las despedidas imaginables la noche antes, después de una carrera de 21 años en la elite.
Messi, omnipresente
Messi, presente en todas la jugadas blaugranas terminó consiguiendo el ansiado gol. El argentino, máximo goleador de la competición con 12 tantos, igualando la marca de otro 'killer', Ruud van Nistelrooy, el único que había llegado a esta cifra, en el curso 2002-2003, con el Manchester United. Nunca había anotado en un estadio inglés y debió pensar que ¿en cuál mejor que Wembley?.
Además su gol no fue uno cualquiera sino un auténtico golazo desde fuera del área, con un disparo seco que pilló mal colocado al portero holandés, y que celebró por todo lo alto. Por eso y por otras tantas cosas fue elegido el mejor hombre del partido.
Entonces, la 'Pulga' se lució aún más y propiciaba llegadas peligrosas desde todos los frentes. Era una auténtica exhibición que merecía más recompensa y Villa, que debutaba en una final de Champions, se unió a la fiesta. Tras un pase de Messi y también desde la frontal del área, 'el guaje' sacudió un zapatazo que se coló en la escuadra de la portería.
Fiesta blaugrana en las gradas y en el césped
A partir de ese momento, la fiesta estalló en la grada a gritos de ¡Campeones, campeones! y los 25.000 culés desplazados hasta Wembley tuvieron 20 minutos de fiesta anticipada, porque el Manchester United no tenía nada que hacer, pese a que sus jugadores no tiraron la toalla.
Para finalizar la fiesta culé, Guardiola sacó a Puyol al campo para que subiera los109 escalones de Wembley y entrara a formar parte de la historia de este campo.
Pero el propio capitán le cedió los honores a Abidal, al que en un gesto muy emotivo, enfundó su brazalete para que el defensa francés, que ha superado un tumor en el hígado, fuera el que recogiera el trofeo. Así pues, la imagen de Abidal levantando la cuarta Champions del Barça ya queda en los anales del fútbol y de la forma de ser de este Barcelona.
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