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Roland Garros 2011 | Novak Djokovic - Roger Federer

Federer arrebata la final a Djokovic

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Federer corta la racha de Djokovic

Roger Federer regresa a una final de un Grand Slam, la de Roland Garros 2011, y se convierte en el hombre de moda al vencer al hasta ahora invencible Novak Djokovic en tres horas y 40 minutos (7-6, 6-3, 3-6 y 7-6). La racha del serbio se queda en 42 y estrena su casillero de derrotas. [Así te lo hemos contado | Así te lo hemos contadoDatos y estadísticas

El suizo volverá a jugar una final contra Rafa Nadal mas de dos años después (en directo este domingo a las 15:00 por La 1 y RTVE.es), los que han pasado desde la del Open de Australia de 2009. Pero a punto estuvo de ver aplazado su desenlace por falta de luz.

El encuentro se resolvió entre penumbras en un agónico 'tie break', que cerró el de Basilea (Suiza) con un saque directo. El asalto al nº1 de la ATP por parte de Djokovic tendrá que esperar.

La primera manga regaló a los aficionados el mejor tenis que se había visto en el torneo. La igualdad fue total, incluso en la grada, donde no se distinguían claramente los gritos a favor de uno u otro.

Comenzó golpeando primero Federer, logrando un 'break' nada más comenzar ante un Djokovic que acusó la inactividad de cuatro días atrás con un par de errores. Supo rehacerse el serbio en el siguiente para devolver la rotura.

Pronto se vio que 'Nole' se había metido en el partido, cuando salvó varias pelotas de rotura en el tercer juego, a pesar de que Federer se las envió de todos los colores, como una volea desde la red a la cruceta que aplaudió elegantemente el belgradense.

Con quien no estuvo tan elegante fue con el juez de silla, al que protestó airadamente una pelota que vio fuera en un juego posterior, a pesar de que ganó el punto. Además, se llevó un 'warning' por dilatar en exceso su saque.

Un saque que volvieron a romperse una vez más. Se puso 4-2 Djokovic y parecía tener el partido encarrilado, pero Federer no estaba por la labor de repetir la imagen de sus partidos ante el serbio de este 2011 y destapó el frasco de las esencias para igualar de nuevo el marcador.

El desempate en el 'tie break' fue igual de reñido y vistoso, pero lo cerró -mal- 'Nole' regalando un golpe a la red cuando servía para empatar a seis puntos. 74 minutos después, el mejor de la historia ganaba por fin un set al mejor del momento, como los ha bautizado Rafa Nadal.

Federer rompe el guión

No estaba en el guión, por lo menos no en el de Djokovic, que se quedó bastante tocado anímicamente. Federer sacaba en plan Sampras y logró romper al serbio en el cuarto juego. Volvieron a verse los gestos de desesperación del 'Nole' de 2010 -y antes-, mientras el suizo se crecía en su juego. No obstante, el número 2 del mundo seguía salvando pelotas de rotura ante un Federer que no acababa de creérselo. Hasta 19 al final del set.

Pasó con un 0-40 y 2-5 en el marcador, es decir, tres pelotas de set para Federer. El vértigo pudo con el de Basilea en ese juego, pero no en el siguiente, donde le tocó a él salvar la bola de rotura para apuntarse el set después en 45 minutos. Ahí sí empezó a creérselo, aunque en parte se lo debió a la caballerosidad de Djokovic: con 30-40 el juez de línea canta fuera un 'ace' de Federer y Djokovic le corrige.

Estaba tocado, pero no hundido. En el tercer set recuperó 'Nole' la iniciativa, en parte por el desgaste de Federer. Ganar dos sets al mejor tenista del momento tiene que suponer un esfuerzo notable.

El serbio aprovechó el único 'break' de que dispuso, en el segundo juego, y se limitó a administrar su ventaja, sin ceder siquiera una sola ocasión para el 'break' de su rival. Pero lo más importante fue que volvió a sentirse cómodo sobre la pista.

Alargar el partido a un cuarto set no era el escenario deseado para Federer, que inició la manga a toda prisa con su servicio y se lo anotó en blanco. No quería dejar los deberes para el sábado.

Djokovic aceptó el envite pese a su teórica inferioridad en ese terreno y se intercambiaron saques ganadores, a la espera de ver quién era el primero en fallar para regalarle el parcial a su adversario.

Entonces llegó el frenético desenlace. Primero con una rotura de 'Nole' tras golpe con el marco de la raqueta por parte de Federer, pero a continuación se lo devolvió el suizo con una clase magistral de tenis a la vieja usanza. 

El serbio volvió a intentar romperle, pero se defendió bien Roger, quien tuvo que esperar al desempate final tras la defensa que hizo Djokovic de su saque en el 'deuce'. Casi sin luz, Federer remató el partido en el 'tie break' sin apenas cometer errores. El día del cumpleaños de Nadal, le regaló el número uno por un torneo más; pero también demostró que no está muerto, y el más grande de la historia apunta a su segundo Roland Garros, con permiso de Rafa.