Samuel Sánchez: "Parece que hay una mano negra detrás de este Tour"
- El ciclista de Euskaltel cree que lo importante "es sobreponerse"
- Lamenta los abandonos de Velasco y Txurruka por sendas caídas
- Se marca como objetivo "ganar una etapa, algo de por sí complicado"
El líder del equipo Euskaltel Euskadi en el Tour de Francia, Samuel Sánchez, ha lamentado este lunes, en la primera jornada de descanso de la ronda gala, la mala suerte que está teniendo su equipo con la caídas y los abandonos, pero ha precisado que "lo importante es sobreponerse" y seguir adelante para poder luchar por el objetivo de ganar una etapa.
"Estoy donde quería, pero con un minuto y medio más de retraso del que me gustaría. Eso sí, viendo todo lo que ha ocurrido en esta primera semana, pienso que lo importante es que estoy bien, que no he tenido ninguna caída", señaló el campeón olímpico ante los medios de comunicación en el hotel de concentración, situado en la localidad de Aurillac, punto de partida de la etapa del martes.
'Samu', que está a 2:36 minutos de Cadel Evans, y a cinco minutos del líder, Thomas Voeckler, confesó que "por la tensión" que se ha vivido durante esta semana previa, "parece" que llevan "un mes de Tour", y "aún faltan tres días para la primera etapa de alta montaña", que llegará este jueves con final en Luz Ardiden.
"Esta siendo un Tour muy intenso, quizás más que otros años, y tenemos la sensación de que llevamos muchísima carrera cuando aún no hemos afrontado ninguna de las etapas que sobre el perfil se podrían definir como decisivas", indicó.
"El objetivo sigue siendo ganar una etapa"
El corredor asturiano recordó que "el objetivo" sigue siendo "ganar una etapa, algo de por sí muy complicado", precisó. "Luego, si en la lucha por una victoria de etapa se produce un giro y nos acercamos al cajón, perfecto, pero ahora mismo estoy muy lejos. Subir al podio nos gusta a todos, así que es muy, muy difícil lograrlo", señaló.
Preguntado sobre los abandonos de Wiggins, Vinokourov, Van den Broeck, Horner o Brajkovic, Samuel Sánchez subrayó que son "bajas sensibles" porque se trata de "ciclistas de gran nivel que estaban llamados a jugar un papel importante en la prueba". "Pero esto es el Tour de Francia y ahí están Basso, Kloeden, Evans.., y, por supuesto, Alberto Contador. En esta carrera todo es muy caro, el nivel es altísimo", añadió.
En cuanto al rendimiento del equipo, el de Oviedo subrayó que "las imágenes de televisión hablan por sí solas del excelente trabajo que están haciendo" sus compañeros. "Me están llevando a la perfección, evitando peligros... Estoy muy satisfecho", recalcó.
"La única pena que tenemos son los abandonos de Amets (Txurruka) e Iván (Velasco)", lamentó sobre sus dos compañeros, quienes han tenido que abandonar el Tour por sendas roturas de clavícula. "Iban a jugar un papel muy importante en la montaña. Por muy bien que nos lleguemos a desenvolver, siempre les echaremos de menos porque son dos ciclistas de nivel que siempre responden. Es una lástima, pero hay que seguir. El año pasado nos pasó lo mismo con el propio Amets y Juanjo (Oroz). Parece que hay una mano negra por detrás, pero no queda otra que sobreponerse", resumió.
“Todos queremos estar delante y eso genera situaciones delicadas“
En este punto, el jefe de filas de Euskaltel Euskadi hizo referencia a las numerosas caídas que se han sucedido en la primera semana, un hecho que achacó a la "tensión descomunal" que ha existido. "El que no haya una etapa prólogo que desde el primer día marque diferencias hace que la carrera sea mucho más tensa. El maillot amarillo está en juego y ninguno queremos perder puestos; todos queremos estar delante y eso genera situaciones delicadas", concluyó.