Uruguay echa a Argentina de la Copa América en los penaltis
- Los uruguayos se han impuesto 5-4 en los penaltis a Argentina
- Higuaín y Muslera, hombres clave en el partido
- Uruguay se medirá en semifinales a Perú, la sorpresa del campeonato
Ficha técnica:
1 (4) - Argentina: Romero; Zabaleta, Burdisso, Gabi Milito, Zanetti; Gago (Biglia, m.96), Mascherano; Messi, Di María (Pastore, m.71), Agüero (Tévez, m.80); e Higuaín.
1 (5) - Uruguay: Muslera; Maxi Pereira, Lugano, Victorino (Scotti, m.19), Cáceres; Álvaro González, Diego Pérez, Arévalo Ríos (Eguren, m.110), Álvaro Pereira (Gargano, m.110); Forlán y Luis Suárez.
Goles: 0-1, m. 5: Diego Pérez. 1-1, m.17: Gonzalo Higuaín.
Tanda de penaltis: 1-0: Messi, gol. 1-1: Forlán, gol. 2-1: Burdisso, gol. 2-2: Luis Suárez, gol. 2-2: Tévez, para Muslera. 2-3: Scotti, gol. 3-3: Pastore, gol. 3-4: Gargano, gol. 4-4: Higuaín, gol. 4-5: Martín Cáceres, gol.
Árbitro: Carlos Amarilla (Paraguay). Expulsó por doble amarilla a Diego Pérez (m. 3 y 38), por parte de Uruguay, y a Mascherano (m. 49 y 83), por Argentina. Amonestó a los argentinos Zabaleta, Gabi Milito, Burdisso, Gago y Tévez y a los uruguayos Cáceres y Álvaro González (m. 42).
Incidencias: partido de cuartos de final de la Copa América 2011, disputado en el estadio Brigadier Estanislao López de Santa Fe ante unos 37.000 espectadores.
Y finalmente Uruguay se ha llevado el gato al agua. El duelo del Río de la Plata que ha enfrentado a los de Tabárez contra Argentina se ha resuelto en los penaltis (5-4) tras haberse llegado a la prórroga 1-1 y donde los uruguayos sobrevivieron cerca de una hora con un hombre menos.
Los de Forlán no han perdonado la pena máxima y un disparo fallido de Tévez ha sido más que suficiente para que los celestes se hayan metido en semifinales. Allí ya les estaba esperando Perú, equipo que se ha convertido en la sorpresa del campeonato tras haber vencido en la prórroga a Colombia (0-2).
En el estadio no cabía ni un alfiler, y es que dos grandes selecciones se jugaban en los cuartos de final de la Copa América un billete a semifinales. Con este panorama, ambos equipos saltaron al terreno de juego con ganas de morder. Prueba de ello fue un disparo de Higuaín en el minuto 1 con el que el ‘Pipita’ quiso dejar clara sus intenciones.
Cuando prácticamente ambos equipos se estaban acoplando al campo, apareció Diego Pérez para abrir el marcador (0-1) en el minuto 5. El ‘Ruso’ Pérez aprovechó un error de Zannetti que le permitió marcar el tanto fácilmente.
Argentina pretendía un 4-3-3, con Agüero abierto a la izquierda y Messi a la derecha para poder encarar bien. Los de Batista necesitaban buscar espacios y Uruguay no estaba dispuesto a ceder ni un milímetro.
En el minuto 18, Messi demostró porque es el mejor del mundo y le ofreció un asistencia a Higuaín que terminó en gol (1-1). La ‘Pulga’ arrancó con la derecha y encaró con la izquierda ofreciéndole un balón al ‘Pipita’ quien solo tuvo que meter la cabeza.
Antes del descanso, las dos selecciones vieron un gol anulado y el ‘Ruso’ Pérez se fue a la calle por acumulación de tarjetas.
Argentina se metió en los vestuarios con la sensación de ser superior. Distribuían el juego y aunque les había faltado profundidad, Messi se había convertido en una pesadilla para Uruguay, que estaba jugando muy atrás.
Intensidad y emoción hasta el último minuto
En la segunda parte y con un hombre menos, Uruguay no bajó los brazos. Forlán y Luis Suárez continuaron en punta, a la espera de algún balón que les hiciera alcanzar la gloria.
Argentina iba a la contra y quería sentenciar el partido de una vez, pero su defensa dejaba mucho que desear y esto era aprovechado por los de Tabárez.
Higuaín perdonó un golazo. El jugador madridista giró casi sin espacio en el mismo sitio donde recibió la pelota y estuvo a punto de marcar un sombrerazo. Pero Muslera con una mano prácticamente divina desvió el balón.
Los últimos minutos fueron de infarto: Pastore y Messi se buscaban complices y Mascherano fue expulsado por dos amarillas.
Argentina no supo jugarle a Uruguay la pelota en ningún momento. El cansancio físico se notaba en ambos. Aunque los albicelestes habían dominado más el balón y creado un poco más de peligro, la defensa uruguaya era increíble.
La prórroga fue más de lo mismo, mucha intensidad y emoción. El partido se tenía que resolver por la genialidad de algún delantero o el error de algún defensa. Finalmente nada de eso ocurrió y el desenlace llegó con los penaltis.