La NBA demanda a los jugadores

• La liga estadounidense argumenta que no negocian de buena fe
• Ambas partes se reúnen en Nueva York sin lograr un acuerdo
• El sindicato emplaza a los propietarios a volver a reunirse este mes

El comisionado de la NBA, David Stern.

Desde que se declarara el cierre patronal en la NBA el pasado 1 de julio, las posturas de las partes enfrentadas se han endurecido hasta el punto de que la liga de baloncesto estadounidense ha demandado al sindicato de jugadores por mala fe en las negociaciones.

La NBA ha presentado la demanda en un tribunal federal de Nueva York, así como otra ante la Comisión Nacional de Relaciones Laborales, contra el sindicato de jugadores, al que acusa de no actuar de "buena fe" y poner en práctica "una presión inaceptable" en las negociaciones de un nuevo convenio.

La liga también solicita en la misma demanda que desea anular todos los contratos existentes con los jugadores si el sindicato decide disolverse.

Desde el pasado 1 de julio, todas las actividades dentro de la NBA han sido canceladas al decretar los dueños de los equipos un cierre patronal por no haberse alcanzado un acuerdo para la firma de un nuevo convenio colectivo.

Los dueños, que aseguran que la pasada temporada perdieron más de 300 millones de dólares, quieren que los jugadores reduzcan el porcentaje de dinero que reciben para pagar sus salarios.

De acuerdo al antiguo convenio, los jugadores recibían el 57% de los ingresos que se obtenían. Los dueños quieren que ese porcentaje se reduzca al 40% para hacer rentable el sistema financiero y de gestión de la NBA, mientras que el sindicato de jugadores, en la última oferta que presentó, solo estaba dispuesto a bajarlo al 54,5%.

Este lunes ambas partes se habían reunido en Nueva York por primera vez desde que se decretara el 'lock out', aunque del encuentro no salió acuerdo alguno. 

Al término de este encuentro con los representantes de los  jugadores, el comisionado de la NBA, David Stern, se mostró pesimista  respecto a una posible solución a este desencuentro y comentó que en  su opinión el sindicato de trabajadores "no" estaba negociando "de  buena fe", en la línea de la demanda presentada.

Por su parte, el base de Los Angeles Lakers Derek Fisher,  representante de los jugadores, explicó que no se habían presentado  nuevas propuestas pero indicó que creía que podría haber una reunión  futura entre las partes en agosto. "Nos damos cuenta de que aún hay  una brecha entre nosotros". Pero sin reunión, no habría "ningún  progreso", aseguró.