La magia goleadora de Messi se desata ante el Real Madrid
- El argentino suma 13 goles en 15 clásicos, todos marcados a Iker Casillas
- Está a un gol de igualar a César Ródríguez, mayor anotador culé frente al Madrid
- Con ocho tantos supera a Raúl como máximo goleador de la Supercopa
Decir Messi es decir fútbol. El argentino, elegido mejor jugador del mundo y Balón de Oro en 2009 y 2010, sigue demostrando por qué es el merecedor de esos títulos y, aunque apenas ha tenido rodaje en la pretemporada, su calidad y sus goles marcan la diferencia y sirven para darle un nuevo título al Barcelona.
Pese a todo, en el día después de la Supercopa 2011 se está hablando más de la tangana ente los futbolistas de ambos clubes o del dedo que Mourinho metió en el ojo a Tito Vilanova, pero todo esto, debería quedar en un segundo plano. Sobre todo, teniendo en cuenta el espectáculo futbolístico que Messi despliega cuando se enfrenta al eterno rival.
La 'Pulga' acumula 13 goles en sus 15 partidos contra el Real Madrid, todos encajados por Iker Casillas (al que también ha marcado un 14º gol con la selección argentina), lo que confirman que Messi es 'la bestia negra' de los blancos y de todo un portero campeón del Mundo y de Europa.
Un futbolista determinante
En el último clásico, Messi volvió a ser el jugador más determinante. El que aparece cuando más se le necesita para marcar en momentos claves. Y además, con un efecto psicológico ya que su primer tanto en el Camp Nou rompía las tablas en el minuto 44.
El astro argentino, tras recibir un saque de córner en la frontal del área, penetró y recogió un taconazo de Piqué. Cruzó la pelota, ante un Casillas que nada pudo hacer, y adelantó a los suyos.
Pero si la genialidad de Messi se vio en esta jugada, su segundo fue, si cabe, más bonito y determinante ya que llegó en los minutos finales, cuando el partido parecía abocado a la prórroga.
Abrió a banda y, entrando desde la segunda línea, remató el centro de Adriano, desatando la locura en el Camp Nou.
Certero, excelso, desequilibrante... son solo algunos de los calificativos para el gran partido de Messi, pero en el empate a 2-2 de la ida, el argentino se mostró igualmente letal. Aprovechó el fallo de Pepe y Khedira, que se liaron en el despeje, y solo ante Casillas y le batió por bajo.
Además, con estos dos goles, Messi se convierte en el máximo goleador histórico de la Supercopa española, con 8 tantos, superando a Raúl que tenía 7.
Golazos en Champions
La 'Pulga' también aprovechó los partidos de Champions frente al Madrid para romper uno de sus gafes. El argentino, que no sabía lo que era marcar en unas semifinales de Liga de Campeones, se resarció en el partido de ida en el Bernabéu con dos tantos espectaculares.
En el 76' remató un centro de Afellay, que supuso el primero del encuentro, pero el segundo fue mejor, y quedará para los anales del fútbol.
Arrancó desde más de cuarenta metros y, encarando, regateó hasta cuatro defensores madridistas. Finalmente, cruzó la pelota y batió a Casillas, dejando la semifinal decantada para los bluagranas.
Hat-trick en Liga
Además de estos cinco tantos, Leo Messi ha metido otros ocho goles al eterno rival en el campeonato de Liga. El último lo consiguió desde los 11 metros, al transformar el penalti que cometió Albiol, tras derribar a Villa, en el clásico liguero que finalizó en tablas, el pasado mes de abril.
Pero si hay un Madrid-Barça que el argentino recordará con agrado es el disputado en la temporada 2006/07 en el Camp Nou, cuando Rijkaard entrenaba al Barça.
Se estrenaba como goleador en un clásico y no lo pudo hacer de mejor forma. Un Messi de otro planeta hizo los tres tantos de su equipo, empatando en el descuento un partido en el que los suyos siempre fueron por detrás en el marcador.
En 2008, ya bajo las órdenes de Guardiola, el astro argentino también contribuyó con un gol a la victoria del Barcelona por 2-0 al Madrid. La 'Pulga' a pase de Henry, mandó el balón al fondo de la malla tras una exquisita definición con su sello.
Doblete en el 2-6
Messi tampoco quiso perderse la fiesta azulgrana en el Bernabéu, con el histórico 2-6. El argentino hizo el tercero y el quinto de la noche, desquiciando especialmente a Lass a quien robó un balón y remató a placer para desconcierto de la parroquia madridista.
Por último, Messi también 'mojó' en el clásico de 2009-2010 ante un Madrid entrenado por Pellegrini. El Barcelona, gracias a los goles del argentino y de Pedro Rodríguez, se llevó un encuentro que a la postre le serviría para proclamarse campeón de liga.
Con estos 13 goles, el jugador de Rosario está a solo uno de igualar a César Rodríguez como máximo goleador del equipo catalán ante el eterno rival. Y seguro que le supera, pues a Leo Messi le quedan por delante muchos clásicos.
Además, el argentino tiene también la habilidad de marcar en todas las grandes citas del Barça, como en las finales de Champions ante el Manchester United en Roma en 2009, con un gran remate de cabeza, y en Wembley en este 2011, con el gol del 2-1 que encarriló la victoria azulgrana.
No es de extrañar que si sigue por el camino mostrado en esta Supercopa, sumado a sus 53 goles oficiales en la pasada temporada y a los títulos conseguidos en la Liga y la Champions League -con la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes al fondo-, Leo Messi pueda volver a alzarse con el FIFA Balón de Oro en 2011, el tercero consecutivo, con solo 24 años. Tiempo al tiempo.