Nibali: "La segunda semana va a ser más importante que la tercera"
- Para el italiano las etapas en el Pais Vasco son "difíciles, pero no muy duras"
- El del Liquigas apunta al danés Fuglsang como "uno de los más peligrosos"
- El británico Wiggins está preparado "para coger las riendas si hace falta"
Vincenzo Nibali, corredor italiano del Liquigas-Cannondale, cree que desde el miércoles en la Estación de Montaña Manzaneda hasta el domingo en L'Angliru se vivirá la fase decisiva de la Vuelta 2011 y en la que puede quedar prácticamente resuelta.
Para el italiano "esta segunda semana de la Vuelta va a ser más importante que la tercera. Después de L'Angliru, no digo ya que sabremos quien es el ganador, pero casi".
En opinión del vencedor de la Vuelta en 2010 las etapas de la tercera semana las dos jornadas que se desarrollarán en el País Vasco serán "difíciles, pero no son excesivamente duras".
El ciclista de Mesina ha aprovechado la jornada de descanso para realizar un suave entrenamiento, pero también para analizar la clasificación y destaca que entre los ciclistas que están en las primera plazas pero no entraban en los pronósticos iniciales "los más peligrosos" pueden ser el danés Jakob Fuglsang, del Leopard, y el sueco Fredrik Kessiakoff, del Astana.
También ha analizado su actuación en la contrarreloj de Salamanca de la que salió bastante satisfecho aunque tuvo "algunos problemas en el tramo central en el que no encontré el ritmo, pero no es una excusa", además valora de forma positiva el haber perdido solo un minuto con un especialista como el británico Bradley Wiggins, del Sky.
Otro aspecto que puede condicionar según el ciclista de Liquigas es el desarrollo de las etapas es que rivales como el español Joaquim 'Purito' Rodríguez (Katusha) y su compatriota Michele Scarponi (Lampre-ISD) por el tiempo de retraso que acumulan van a tener que atacar y "la carrera será más abierta"
Wiggins "La situación fantástica, hace 8 semanas estaba en el hospital"
Por su parte, Bradley Wiggins (Sky), tercer clasificado en la general y uno de los favoritos al triunfo final, ha señalado que se encuentra preparado para afrontar las etapas decisivas de la Vuelta y ha clasificado su situación de "fantástica", sobre todo porque "hace 8 semanas estaba en el hospital", convaleciente de una fractura de clavícula que se produjo en el Tour de Francia.
El británico ha afirmado: "Estamos en una situación fantástica, que no me hubiera creído antes de la contrarreloj, ya que estuvimos por encima de lo esperado con el segundo puesto de Froome y el tercero mío, y además con el maillot rojo en el equipo. Todo un lujo que además servirá para quitarnos presión"
Wiggins se ha mostrado preparado "para coger las riendas si hace falta" y ha asegurado que "aún queda todo el partido por jugar". El campeón británico ha recordado que "hace ocho semanas estaba en el hospital con la clavícula rota y ahora estoy disputando la Vuelta. Es increíble que esté viviendo esta situación y estoy dispuesto a aprovecharla".
La etapa del Angliru será "el día crítico", según ha asegurado Wiggins, donde se puede resolver gran parte de la Vuelta, un puerto que no conoce, solo tiene referencias de su compañero de equipo Xavier Zandio.
Por su parte, Chris Froome, destacó que la carta del equipo "sigue siendo Bradley Wiggins", aunque se ha mostrado dispuesto a defender el maillot rojo de líder "hasta el límite de las fuerzas". Froome ha comentado: "He aprendido a dosificar las fuerzas, antes era más impulsivo. Espero que este aprendizaje me sirva para sacar un buen resultado en la Vuelta".