Rusia vuelve al podio europeo con la medalla de bronce
- Kirilienko devolvió a Rusia a la elite europea tras cuatro años
- McCalebb no fue suficiente para una Macedonia sin banquillo
- Datos y estadísticas del Macedonia 68-72 Rusia
Ficha técnica:
68 - Macedonia (13+17+20+18): Ilievski (16), McCalebb (22), D. Stojanovski, Antic (13) y Samardziski (6) -equipo inicial-, Mirakovski (2), Sokolov, V. Stojanovski (5) y Chekovski (4).
72 - Rusia (17+19+16+20): Vorontsevich (10), Mozgov (10), Bykov (5), Ponkrashov y Kirilenko (18) -equipo inicial-, Fridzon (7), Shved (5), Antonov (7) y Monya (10).
Árbitros: Juan Arteaga (ESP), Christos Chistodoulou (GRE) y Robert Lottermoser (ALE). Fridzon fue eliminado por cinco personales (min.40).
Incidencias: Partido correspondiente a la disputa por la medalla de bronce del campeonato de Europa disputado en el Kauno Arena de Kaunas ante unos 10.000 espectadores.
Rusia consiguió en Kaunas la medalla de bronce al ganar a Macedonia (68-72), en un tenso partido que solo se resolvió en los segundos finales. Con esta medalla de bronce, Rusia vuelve al podio europeo después de cuatro años, cuando ganó la medalla de oro en España.
Macedonia, la auténtica revelación del campeonato de Europa, defendió su suerte de forma ejemplar, pero la falta de banquillo y el cansancio físico la condenó en los momentos finales.
Los nervios y la tensión por la trascendencia del partido se dejaron sentir en ambos equipos desde el primer segundo. De hecho, las dos primeras jugadas de los dos finalizaron con la bocina de fin de posesión de 24 segundos.
Tras unos instantes de dominio de Macedonia, fue Rusia la que pasó a comandar el marcador, más que por aciertos propios, por deméritos del rival ya que sólo anotó un triple de 8 lanzados.
Con Pero Antic desaparecido, 0 de 4 en tiros de 2 y 0 de 3 en triples, McCalebb fue la única fuente fiable de puntos entre los macedonios, que aún así aguantaron en el marcador haciendo la goma, pero nunca más lejos de los 7 puntos de diferencia.
Además de la falta de Antic en la anotación, Rusia prácticamente dobló a su rival en rebotes, 22 por 12, pero ni aún así pudo marcharse al descanso con una renta mínimamente tranquilizadora. Los 6 puntos al descanso, 30-36, dejaron abierta la puerta de la medalla a cualquiera de los dos equipos.
En el tercer cuarto, un McCalebb absolutamente galáctico se las bastó, prácticamente solo, para mantener a Macedonia en el partido. El base, autor hasta ese momento de 22 puntos, dejó a su equipo a sólo 2 puntos de diferencia al final de los primeros 30 minutos de juego, 50-52.
Ilievski adelantó a Macedonia en los primeros segundos del periodo definitivo, 53-52, gracias a un triple letal que hizo cundir el pánico entre los rusos.
La falta de banquillo en los macedonios y el cansancio acumulado en el partido y durante todo el campeonato, comenzó a pasar factura. Rusia, casi sólo con presencia física y un Kirilenko que tiró del equipo, con dos triples consecutivos, recuperó mínimas ventajas.
Pero a los últimos 48 segundos se llegó con empate a 68 y ahora sí Rusia resolvió casi por inercia. Al final y por agotamiento del rival.