La piloto neozelandesa Avalon Biddle disputará el GP de Australia

• La piloto 'kiwi' tratará de estar en la parrilla de salida de 125cc como 'wild car'
• Será la segunda mujer que lo intente después de que lo hiciera Elena Rosell

Imagen de la piloto neozelandesa Avalon Biddle.

Si ya es raro ver a un piloto en el mundial de motos que defienda la bandera de Nueva Zelanda, más difícil es aún ver a una mujer neozelandesa compitiendo en dicho campeonato.

La piloto Avalon Biddle competirá en el próximo GP de Australia como 'wild car' (invitado) en la categoría de 125cc. Biddle, que anuncia su reto en su página web, será la segunda mujer que trate de hacer historia esta temporada después de que la española Elena Rosell consiguiera disputar la carrera completa en el GP de Aragón en la categoría de Moto2.

La 'kiwi' podría eclipsar levemente a sus compatriotas del rugby este fin de semana si consigue estar en la parrilla de salida en Phillip Island. Y es que el currículum de la piloto invita al optimismo ya que Avalon ha resultado subcampeona en el campeonato neozelandés del cuarto de litro en 2010 y 2011, con varias victorias y podios incluidos.

“No tenía mucha esperanza“

"Qué sorpresa. No tenía mucha esperanza de que la FIM aceptara mi solicitud, incluso había pensado en vender mi material deportivo. La moto no será tan rápida como las de los pilotos que corren habitualmente el campeonato pero creo que puedo ser capaz de hacer un buen tiempo para clasificarme. Hacer algo así en Phillip Island sería un gran logro para mí", manifestó la piloto de Auckland que conducirá una Honda en el circuito 'aussie'.

Biddle empezó a manejar una moto a los 13 años y los éxitos en las categoría inferiores no han faltado. Llama la atención que sus pilotos de referencia no son oceánicos, y eso que los ha habido y los hay (Mick Doohan o Casey Stoner entre otros), sino el norirlandés Jonathan Rea y el estadounidense Ben Spies.

Será un gran día para los moteros 'All Blacks' ya que no tienen a un piloto en el Mundial desde los tiempos de Simon Crafar.