El Real Madrid estrena con victoria (76-100) ante el Spirou su andadura en la Euroliga
- El Real Madrid hace un gran control del partido y gana (76-100) al Spirou belga
- Rudy Fernández vuelve a ser el líder de un equipo con juego muy sólido
- Superioridad reboteadora y concentración para una brillante victoria
Ficha técnica:
76, Spirou: Welsch (4), Hamilton (9), Mallet (27), Shengeila (11) y Beghin (9) --cinco inicial--; Hill (3), Broyles, Green (3), Riddick (8) y Oveneke (2).
100, Real Madrid: Llull (7), Suárez (9), Rudy (19), Velickovic (-) y Tomic (9) --cinco inicial--; Sergio Rodríguez (2), Pocius (8), Carroll (14), Begic (4), Mirotic (9) y Reyes (19).
Parciales: 16-23, 21-22, 18-26, 21-29.
Árbitros: Recep Ankarali (TUR), Robert Lottermoser (ALE) y Jurgis Laurinavicius (LIT). Eliminaron a Welsch del conjunto local por faltas personales.
El Real Madrid de baloncesto debutó en la Euroliga con un claro, pero trabajado triunfo (76-100) ante el Belgacom Spirou de Charleroi (Bélgica), un incómodo contrincante y que exigió una alta concentración a los blancos para mantener las riendas del choque.
Le costó abrir brecha al Real Madrid ante un conjunto rocoso en su pista. Un juego básico, si se quiere, el de los belgas, aunque complicado de afrontar. Superioridad en los rebotes, tino en el tiro, velocidad y tensión en el juego dieron el triunfo al Madrid.
Llegó a la centena de puntos el Madrid, con la destacada actuación de Rudy Fernández, 19 puntos, y la pelea de Felipe Reyes, también con 19 puntos y 9 rebotes. Y un partido notable para el bloque.
Deuda pendiente
No quiso confianzas el equipo de Pablo Laso ante el Spirou, que es el rival más debil del grupo C de esta Euroliga, lo que no quiere decir que sea un mal conjunto. Además, el Madrid tenía una deuda pendiente, tras la humillante derrota del año pasado.
Mucha desconfianza y mucho desacierto en los dos conjuntos, que en los cuatro primeros minutos empataron 4-4. Rudy Fernández marcó el rumbo con su triple, los blancos dominaron también en el juego interior y corrieron mucho por toda la pista.
Dos triples de Carlos Suárez y la efectividad de Rudy llevaron al Madrid a su máxima ventaja (10-18) a dos minutos del final del primer cuarto.
El Spirou manejó entonces bien las transiciones y se acercó en el marcador con un triple de Demont Mallet, al que respondieron Tomic y Felipe Reyes para liquidar el primer cuarto con 16-23 favorable a los blancos.
Control del Madrid
Los belgas fueron rivales incómodos y el recurso de los triples, sensacional el de Carroll, junto a la fortaleza en el rebote, constituyeron armas eficaces para el equipo español.
Bien manejados por Sergio Rodríguez, los blancos empezaron a encarrilar el choque en este segundo cuarto, en el que mantuvieron 10 y 12 puntos de ventaja, ampliados (21-34) en el minuto 14 de partido.
Meritorios los de Laso, con rapidez y talento en los pases para mantener la distancia en el marcador. No bajaron la guardia ante los locales, siempre prestos a aprovechar los escasos errores del rival. El Madrid controló para llegar al descanso 37-45.
Concentración blanca y final
Los blancos recuperaron su concentración, perdida levemente en los minutos finales de la primera mitad. Salida perfecta en el segundo tiempo, materializada con un parcial de 6-0.
La conexión Sergio Llull- Rudy Fernández aportó acciones brillantes de un equipo muy bien armado y armónico en sus integrantes. Felipe Reyes, Tomic y Carroll secundaron a sus compañeros y se mantuvo la barrera de los 10 puntos siempre favorables para el Madrid, que no dejó entrar al rival en el choque.
En velocidad de crucero, liderados por Rudy Fernández y el poderío de Felipe Reyes, los de Laso finalizaron el tercer cuarto con una máxima ventaja de 55-71.
El técnico no permitió que su equipo bajará la tensión defensiva en los últimos 10 minutos. Estaban 65-81, pero Mallet estaba en estado de gracia anotadora. El estadounidense llegó hasta los 27 puntos.
Respondieron los jugadores, que se lucieron en los minutos finales para redondear un brillante triunfo por 76- 100, con el que el Madrid inicia con buen pie la competición europea y se saca la espina de lo del año pasado.