John Terry, investigado por insultos racistas

• El capitán del Chelsea se encaró con Anton Ferdinand
• Un vídeo alimenta las sospechas sobre el carácter racista de los insultos
• El jugador se defiende y recibe el apoyo de su entrenador

John Terry vuelve a estar en el candelero de la actualidad de la Premier League por motivos poco agradables. El capitán del Chelsea está siendo investigado por la policía por presuntos insultos racistas a Anton Ferdinand, jugador del Queen's Park Rangers.

El Rangers se apuntó una sorprendente victoria en el derbi londinense de la pasada jornada, pero lo de menos es la derrota para un hombre como Terry, que ya vivió una situación desagradable el año pasado cuando le fue descubierto una aventura extraconyugal, que le costó la capitanía de la selección inglesa.

El brazalete 'pross' pasó a manos de Rio Ferdinand, del Manchester United, que es precisamente hermano del otro jugador implicado en la discusión polémica de la semana.

El diario The Guardian publica un vídeo en el que se ve a Terry gritando algo a Ferdinand -aunque el jugador local no aparece en ninguna imagen-. La controversia ha surgido por el contenido de la frase y una palabra en concreto, que en mitad de dos fuertes improperios en inglés puede ser 'black' (negro) o 'blind' (ciego).

La FA inglesa ha comunicado que no había sido informada al respecto, pero un portavoz de la policía confirma que están investigando un supuesto delito de abuso racial, sin mencionar a un jugador en concreto.

Ha sido Terry el primero en salir en su propia defensa en un comunicado en el que asegura haber aclarado el asunto con Ferdinand en el vestuario "durante diez minutos". "La gente ha llegado a falsas conclusiones y lo ha sacado de contexto. Jamás diría una cosa así y me entristece que lo puedan pensar", ha añadido.

El capitán del Chelsea ha recibido el apoyo de su entrenador, Andre Villas-Boas, quien además se ha identificado como testigo de la conversación entre ambos jugadores en el vestuario. "Anton (Ferdinand) estuvo en nuestro vestuario. Para nosotros es el fin de la historia".

El portugués ha reaccionado con dureza ante aquellos que han dado credibilidad a la versión de los insultos racistas, recordando que Terry "es un jugador que representa a su país al más alto nivel internacional. Me parece extraño que no se crea a un representante de vuestro país".

"Ha sido tan solo un malentendido y algo sacado fuera de contexto. La gente que representa a su país debería tener un mayor apoyo", ha añadido Villas-Boas.

Esta polémica es la segunda de carácter racial en una semana en la Premier, después de que una semana antes el lateral francés del Manchester United, Patrice Evra, acusara al uruguayo Luis Suárez, del Liverpool, de insultos racistas en el partido jugado entre sus equipos en Anfield.