Ratthapark Wilairot se baja de la moto y se convierte en monje budista por 15 días

• El piloto se ha encomendado a sus obligaciones como ciudadano tailandés
• Para cumplir sus obligaciones, Wilairot ha tenido que afeitarse cabeza y cejas

Ratthapark Wilairot durante la ceremonia de iniciación a monje budista.

El piloto de Moto2 Ratthapark Wilairot ha celebrado estos días una ceremonia iniciática a la que le obliga su religión budista y su condición de ciudadano tailandés.

Ratthapark ha tomado los hábitos para convertirse en monje por un breve periodo de tiempo, atendiendo a la tradición en el país asiático, que tiene como religión de Estado el Budismo Theravada.

Según esa creencia, casi todo tailandés debe convertirse temporalmente en monje budista al menos una vez en la vida, durante unas semanas o incluso tres meses coincidiendo con la época de los monzones.

La renuncia de los deseos, los méritos y la meditación son algunas de las actividades por las que debe pasar un monje budista, además de la toma de hábitos.

Una tradición tailandesa

Para cumplir con sus obligaciones, Wilairot ha tenido que afeitarse la cabeza y las cejas, vistiendo una túnica blanca en símbolo de pureza y llevando consigo una varita de incienso, una vela y una flor en la mano, siendo conducido posteriormente en procesión al templo budista.

El tailandés comentaba así esta fase de su vida que estaba a punto de iniciar: "Va a ser un momento importante de mi vida".

“Va a ser un momento importante de mi vida“

"La toma de hábitos y todo lo que ello conlleva es una forma de encontrarse con uno mismo y aprender de las situaciones por las que hemos pasado en nuestra vida", ha racalcado Wilairot.

El piloto de Moto2 no ha tenido un buen año y en unos de los últimos GPs del año, el de Australia, sufrió una lesión al ser embestido por detrás por el español Marc Márquez en un espectacular accidente.

“Está es una gran oportunidad para dejar atrás lo ocurrido“

"Teniendo en cuenta el final de año 2010 y todo el 2011 que he tenido, está es una gran oportunidad para dejar atrás todo lo ocurrido y empezar de cero una nueva etapa en mi vida. En unos días me veréis con la cabeza y las cejas afeitadas, llevando túnicas budistas y realizando mis obligaciones como monje".