Un Athletic relajado se mide a un PSG ansioso

• Marcelo Bielsa dará minutos en París a los menos habituales
• Los rojiblancos tienen asegurado el primer puesto del grupo F
• El PSG, con el agua al cuello, se juega toda su inversión

El Athletic prepara su trámite europeo

El relax del Athletic de Bilbao, que tiene asegurado el primer puesto del grupo F de la Liga Europa, contrasta con la ansiedad que vive el París Saint-Germain, que agota ante el equipo español sus últimas opciones de seguir adelante en la competición continental.

Ante la intrascendencia del duelo, el técnico argentino del Athletic, Marcelo Bielsa, poco dado a las rotaciones, no se ha llevado a la capital francesa a la mitad de sus teóricos titulares, sustituidos por algunos de los jóvenes 'cachorros' con los que viene trabajando desde su llegada a Bilbao. Se han quedado en casa Javi Martínez, Fernando Amorebieta, Óscar de Marcos y Ander Herrera para que descansen, mientras que el atacante Fernando Llorente tampoco ha viajado por lesión.

Además, otros jugadores también con muchos minutos en sus piernas a estas alturas de temporada, como Markel Susaeta, Iker Muniain o Andoni Iraola, podrían no formar parte de un once inicial en el que se espera de portero a Raúl Fernández, suplente en todas las competiciones oficiales.

Tanta ausencia de habituales podría dar la oportunidad en el once inicial a canteranos como Jonás Ramalho, que ya ha debutado con el primer equipo rojiblanco, Íñigo Ruiz de Galarreta, de quien se esperaba que ya hubiese sido utilizado por el rosarino, o Guillermo Fernández, opción para una delantera un tanto desamparada con la lesión de Llorente.

La presencia de estos chavales sobre el terreno de juego, el premio económico que da cada punto y cada victoria en la segunda competición europea por clubes son los dos principales alicientes para el equipo español, junto con el honor de jugar en un escenario tan majestuoso como el Parque de los Príncipes.

El PSG. con el agua al cuello

Todo lo contrario que los locales, que afrontan el encuentro con el agua al cuello y con pocas opciones clasificatorias. Para seguir en Europa, el proyecto francés apuntalado por los fondos cataríes necesita ganar al Athletic y esperar el tropiezo del Salzburgo. O, al menos, obtener un mejor resultado que el equipo austríaco en Bratislava.

Lo contrario tiraría por tierra las ambiciones de un club que aspira a codearse con los mejores del continente, para lo cual los petrodólares del golfo Pérsico han traído futbolistas por valor de más de 80 millones de euros, una inversión que, de momento, no parece dar sus frutos. El técnico, Antoine Kombouaré, está en el disparadero y los rumores le sitúan con un pie fuera del club durante el parón invernal.

La eliminación de Europa sería un golpe de gracia al entrenador que, además, afronta el duelo contra el Athletic con un ojo puesto en el partido que el próximo domingo su equipo jugará contra el Lille, actual campeón de Francia y que le adelantará en el campeonato doméstico si le derrota. Así, el técnico se debate entre alinear a su mejor equipo para apostar por las escasas opciones de clasificación que le restan o reservar a sus mejores hombres con la vista puesta en el duelo dominical.

Kombouaré esconde sus cartas, pero no podrá contar Chantôme, Matuidi y Hoarau por lesión. Habrá que esperar a ver si reserva a sus estrellas, como el argentino Javier Pastore y el delantero Kevin Gameiro, o si sale a por todas.