El Real Madrid arranca el 'Top 16' de la Euroliga con triunfo in extremis en casa del Unicaja (80-81)

• Una canasta de Mirotic, a medio segundo del final, da el triunfo al Real Madrid
• Unicaja, con Zoric como líder, planteó un partido muy incómodo a los blancos

El Madrid gana in extremis a Unicaja

Ficha técnica:

80.- Unicaja: Fitch (8), Valters (9), Garbajosa (6), Payne (-), Zoric (32) --quinteto inicial-- Rodríguez (9), Peric (8), Rowland (4), Sinanovic (4), Lima (-).

81.- Real Madrid: Sergio Llull (5), Suárez (-), Singler (13), Tomic (12), Mirotic (12) --quinteto inicial-- Sergio Rodríguez (11), Felípe Reyes (10), Begic (6), Pocius (5), Carroll (7).

Parciales: 20-15, 19-22, 19-25, 22-19.

Árbitros: Christos Christodoulou (GRE), Dubravko Muhvic (CRO), Luis Lopes (POR). Sin eliminados.

Pabellón: Martín Carpena. 10.900 espectadores.

El Real Madrid venció a domicilio al Unicaja de Málaga (80-81) con una canasta in extremis de Nikola Mirotic, en el inicio del 'Top 16' de la Euroliga. Un partido de enorme igualdad y emoción entre los dos equipos españoles, que ofrecieron un gran baloncesto.

El valor de jugar en casa

La Euroliga comenzó de verdad para Unicaja y Real Madrid. Llegó el momento en el que las victorias tienen valor añadido y casi no hay tiempo para recuperarse de los traspiés. Unicaja siempre había ganado en su pista al Real Madrid; sin embargo, los detalles impidieron, en esta ocasión, que tuviera valor jugar en casa.

El conocimiento y respeto mutuo quedo palpable y ambos se pusieron manos a la obra desde el comienzo. Unicaja no echó de menos las ausencias de Abrines, Darden y Freeland, con un Zoric excepcional, 32 puntos, 9 rebotes y 32 puntos de valoración.

Un poco menos fluido el juego inicial de los locales, que se vieron con un 4-11 mediado el primer cuarto. Ante un solvente Real Madrid, con Tomic y Singler en protagonistas, Valters – con un par de triples majestuosos - y Zoric capitanearon la reacción del equipo malagueño.

De su mano empató Unicaja el partido (13-13) y mantuvo el rumbo para llegar al final de unos tensos 10 primeros minutos con 20-15, gracias a una bella canasta de Rowland.

Partida de ajedrez

Una ventaja en la que la defensa en zona impuesta por Chus Mateo desorientó al poderoso ataque del Real Madrid, en el que sus bases, Sergio Rodríguez y Llull, no tuvieron su mejor partido.

El inicio del segundo cuarto fue una exhibición con el duelo de “gigantes”, Sinanovic (2,22) y Begic (2,16). Los dos le dieron vida y espectáculo al partido, en el que los cañoneros blancos, Carroll - sin puntos en todo el primer tiempo - y Pocius, tardaron en entrar en acción.

Pasados 15 minutos, con equilibrio en el marcador (24-24), roto por un triple de Berni Rodríguez, el choque ganó en ritmo. El Real Madrid se impuso al poderío reboteador del rival, pero se contagió, sin embargo, del habitual mal porcentaje del Unicaja en tiros de tres. Tampoco fue el equipo visitante el conjunto rápido en las transiciones que suele ser.

El Unicaja le hecho mucho valor y, ante las ausencias, fue Zoric la referencia ofensiva local. A duras penas, el Real Madrid consiguió no perder comba en el marcador, gracias a un Singler destacado, y se llegó al descanso con 39-37.

Chus Mateo le ganó la partida táctica a Pablo Laso en el primer tiempo. Fue una partida de ajedrez en la que el Real Madrid tuvo serios problemas para leer la zona mixta y las variaciones que uso el Unicaja.

Concentración máxima

El equipo local salió pleno de intensidad en la segunda mitad. Zoric, Peric y Garbajosa aportaron un gran trabajo y Unicaja logró 5 puntos de ventaja (45-40) en los primeros dos minutos.

Una técnica a Valters, tras dos faltas consecutivas no señaladas a compañeros suyos bajo el aro, calentó un choque ya de por sí equilibrado. El Real Madrid trató de no perder concentración y volvió a ponerse por delante (49-50) a los 25 minutos, pero muy bajo en el tiro exterior.

Unicaja mantuvo su fortaleza defensiva, sin dejar jugar al rival con comodidad, y con Zoric acumulando méritos, pero se quedó solo. En los minutos finales del tercer cuarto, los locales pasaron una crisis, que agudizaron sendos triples de Carroll y Pocius y una canasta de Felipe Reyes. Con un parcial de 5-0, el Real Madrid llegó al último cuarto con ventaja (58-62).

Una cuestión mental

Los casi 11.000 espectadores del Martín Carpena vibraron entonces y llevaron a sus hombres hacia la reacción, liderados por un Zoric inmenso, al que se le unió Fitch (64-63). Pero los locales se liaron un poco en el momento clave.

Ante el “arreón” verde, el Real Madrid acusó el golpe y apenas acertó a anotar un punto en cuatro minutos, aunque los de Laso empataron (66-66) con mucho sufrimiento.

Si Fitch – Valters – Zoric fueron una pesadilla, un triple de Sergio Rodríguez devolvió la igualdad. El intercambio de golpes fue espectacular en unos cuatro últimos minutos electrizantes.

Luchar en todos los campos fue la consigna de los dos entrenadores a sus hombres, y vaya si lo hicieron. Sin embargo, Unicaja entró en “bonus” a falta de tres minutos cuando iba 74-71. Un respiro para el Real Madrid, en el que aparecieron Llull y Sergio Rodríguez en los instantes decisivos (74-76).

Unicaja se la jugó a triples, sin éxito. Con el partido empatado a 78 en los últimos 40 segundos fue el mayor aplomo del Real Madrid el que decidió un partido emocionantísimo con una canasta de Nikola Mirotic que hizo enmudecer al Martín Carpena .