El Barça sigue esperando al mejor Xavi

• El centrocampista del Barcelona sufre un edema en el sóleo
• Su reaparición frente al Valencia le supuso una recaída

Xavi Hernández, en el partido de Copa frente al Valencia en el Camp Nou

El entrenador del Barça, Pep Guardiola, lo dijo en rueda de prensa tras la ida de la semifinal de Copa frente al Valencia: "Tiene que descansar". Xavi Hernández era una de las ausencias ilustres del partido de Mestalla y el detalle no se le escapó a los periodistas. El resultado fue de empate a uno.

Su suplencia prosiguió contra la Real y en Pamplona, donde el FC Barcelona perdió contra Osasuna, y regresó en la vuelta de la eliminatoria de Copa en el Camp Nou: victoria del Barça por 2-0, con gol del '6', y a la final.

Pero el centrocampista de Terrassa pagó el esfuerzo con una recaída que le obligó a ver la vuelta a la Champions desde la grada, haciendo compañía a un cariacontecido Piqué. Por lo menos pudo ver la victoria de su equipo por 1-3 frente al Leverkusen.

Xavi tiene un édema en el sóleo, que para los legos en medicina es acumulación de líquido en un músculo de la pierna que está justo por debajo de los gemelos, conectándolos con el tendón de Aquiles.

La lesión en sí no tiene mayor importancia si se trata, por ejemplo, con antiinflamatorios y reposo, según los casos. Sin embargo, llega en un momento crucial para el Barça, con una remontada en Liga -diez puntos por debajo del Madrid-, la recta final de la Champions y la final de Copa contra el Athletic en el horizonte.

El segundo capitán azulgrana sigue teniendo, a día de hoy, difícil su reemplazo, aunque Cesc y Thiago vengan apuntando maneras; necesitan tiempo para coger galones. Lo sufre Messi, cuyo ritmo anotador ha bajado desde que la ausencia del centrocampista.

Su lesión preocupa a aficionados culés y al seleccionador, Vicente del Bosque, puesto que la Roja defiende título en Europa y en el pasado torneo (2008) fue elegido mejor jugador. Tiene 32 años y sabe que es uno de sus últimos grandes torneos de selecciones.

Todos, culés y no culés, ansían la vuelta del mejor Xavi Hernández, pero esta no llegará si no se le dan los mejores cuidados. La papeleta recae en Guardiola, quien deberá decidir entre mimar a una de sus estrellas o forzar su presencia en los compromisos más próximos, aun a riesgo de hacerle recaer.

El próximo domingo, frente al Valencia en el Camp Nou, tendremos una respuesta.