Gescrap Bizkaia derrota a Montepaschi en el último segundo (60-59)
- Raúl López, héroe con una canasta sobre la bocina
- Los tiros libres en los segundos finales decidieron el partido
FICHA TÉCNICAFICHA TÉCNICA
60 - Gescrap Bizkaia (7+14+18+21): Jackson (-), Vasieliadis (6), Mumbrú (10), Hervelle () y D'or Fischer (7) -cinco inicial-; Raúl López (15), Blums (3), Grimau (2), Banic (16) y Mavroedis (1).
59 - Montepaschi Siena (8+14+17+20): McCalebb (12), Thorton (4), Stoonerook (6), Moss (10) y Andersen (-) -cinco inicial-; Zisis (-), Rakocevic (14), Aradori (3), Moss (), Ksistof Lavrinovic (2), Ress (5) y Carraretto (3).
Árbitros:Árbitros: Dubravko Muhvic (CRO), Borys Ryzhyk (UCR) y Luis Lopes (POR). Eliminado por faltas Moss (min.39)
Incidencias:Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada del Grupo F del 'Top 16' de la Euroliga, presenciado en el Bilbao Arena de Miribilla por 9.922 espectadores.
El Gescrap Bizkaia pudo con el Montepaschi en el último segundo. A Raúl Lópeza le tembló todo después de encestar la canasta decisiva cuando casi no quedaba tiempo para que viajara el balón de su mano a la canasta de la gloria. Fue en la última posesión de seis segundos, los de Katsikaris siguieron sus órdenes impartidas en el 'tiempo muerto de la vida' y Raúl se levantó en suspensión para conseguir la victoria más trabajada y sufrida: 60-59.
'Los hombres de negro' siguen dependiendo de sí mismos para seguir hasta los cuartos de la Euroliga. Una victoria a domicilio ante el Unicaja, sin opciones de clasificación, será suficiente para dejar fuera de la competición al Real Madrid.
El Gescrap Bizkaia llegó a la 5ª jornada del 'Top 16' de la Euroliga con la necesidad de ganar al Montepaschi de Siena para seguir dependiendo de sí mismos en su camino a la 'Final Four' de Estambul. Los de Bilbao tuvieron 10 días para preparar un partido tan vital, mientras que los italianos aparecieron con el nivel de competición al máximo, después de haber ganado el fin de semana su cuarta Copa de Italia consecutiva ante el Bennet Cantu, rival del Barcelona Regal el próximo jueves.
Duelo de bases, duelo de fallos
Se esperaba un bello duelo de bases entre el estadounidense Jackson, MVP en la cuarta jornada, y el nacionalizado macedonio McCalebb, máximo anotador de la fase con 18.5 puntos, y lo primero que se vió fue un recital de fallos que se extendió durante todo el primer cuarto. El marcador, 7-8, fue la imagen de unas estadísticas asombrosas por su racanería.
Los de Simone Pianigiani anotaron una canasta de dos en 10 intentos, ¡esto es un 1%!. Vivieron de los dos triples anotados por los americanos Moss y Thornton. Por su parte los de Bilbao no anotaron hasta el minuto 7:39, necesitaron tres intentos hasta que Mumbrú acertó. Sus números también fueron muy bajos, ningún triple de cuatro intentos, 0%. Consiguieron mantenerse a duras penas en el partido con dos canastas y un tiro libre.
Katsikaris había advertido que sería un partido duro, muy físico... y la lucha por cada pelota así lo demostró. Si los números de anotación fueron bajos, los de rebotes destacaron por lo contrario: 44 para los vizcaínos, 17 en ataque, y 33 para los de Siena, 27 en defensa. Esto significa que los de Bilbao se dejaron todo lo que llevaron sobre el parquet de Miribilla. Lo mismo que sus aficionados que siguen creyendo en su equipo y en el efecto que su grito "¡A por ellos!" causa sobre el rival.
Raúl López, el base que sí acertó
Al minuto de comenzar el segundo cuarto entró a la cancha el hombre que volvió de América para llevar a su equipo a Estambul. Raúl López apareció para dar descanso a Jackson. Tres minutos después provocó la ovación cuando pareció que se paseaba por la zona y soltó un gancho inesperado y certero, dos puntos por delante, 12-10. La belleza de esa canasta amortizó de sobra el precio de la entrada.
El partido siguió moviéndose en un marcador siempre ajustado y escaso. El Gescrap no conseguía triples, Vasiliadis lo hizo tres minutos antes del decanso y fue el único en 20 minutos. Montespachi tampoco acertó en tiros de dos, 4 de 17 para afrontar el tercer cuarto.
Caminando sobre el filo
Montepaschi de Siena quiso evitar al temible CSKA en los cruces de cuartos siendo primero de grupo. Su entrenador, Simone Pianigiani, confió en un jugador seguro, Rakocevic, al que dio más minutos que a su estrella McCalebb y el serbio se lo agradeció con 14 puntos, cuatro de ellos en tiros libres. Fueron los que decidieron el partido, los del silencio y los del abucheo que Miribilla regaló apasionadamente. Los números dieron la razón a los vascos, fallaron un cuatro por ciento menos.
Faltas intencionadas muy rápidas, fallos, pérdidas, a 22 segundos, a diez, a seis... y el recuerdo del tiro de Raúl López, para siempre, suspendido sobre la angustia de su afición, la incertidumbre del vuelo, ganar o perder en menos de un segundo... y ¡entró, vaya que si entró!.