Marc Gasol, estrella de la NBA por derecho propio

• El pívot español disputará por primera vez el partido de las estrellas
• A lo largo de su carrera ha tenido que sufrir comparaciones con su hermano
• Pero desde su llegada a la NBA en 2008 se ha convertido en indiscutible
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Marc Gasol está firmando sus mejores números desde la llegada a la NBA

La elección de Marc Gasol (Barcelona, 1985) para jugar el All Star Game que se disputa este domingo en Orlando supone la confirmación definitiva de un jugador que, desde su llegada a la NBA, no ha hecho más que mejorar hasta convertirse en uno de los cinco mejores pívots de la competición.

No es una opinión subjetiva sino que los datos avalan sobradamente su presencia en el partido de las estrellas: 15 puntos por partido, 10,1 rebotes –décimo en la clasificación-, 3,1 asistencias y 2,2 tapones –cuarto-. Números de estrella que dan la dimensión de un jugador que, a lo largo de su carrera, ha tenido que luchar para demostrar que era mucho más que el hermano de Pau.

Como cuando en el Mundial de Japón de 2006 el entonces seleccionador nacional, Pepu Hernández, fue prácticamente acusado de nepotismo por seleccionar a Marc para sustituir al lesionado Fran Vázquez. Su destacada actuación en la final, cuando secó al pivot griego Sofokles Schorchianitis, hizo que, en adelante, nadie dudara de su inclusión en una convocatoria de la selección.

O como cuando llegó a la NBA en 2008, aterrizando en Memphis Grizzlies como parte del fichaje de su hermano Pau por los Lakers –el equipo de Los Angeles tenía los derechos de Marc y los incluyeron en la operación-.

Entonces hubo voces que calificaron de ‘robo’ el intercambio entre ambos equipos, pero en Memphis son muchos los que piensan que la llegada de Marc fue el primer paso para la reconstrucción de una franquicia que el año pasado brilló en los play-offs de la NBA.

Personalidad propia

Que Marc Gasol es un tipo con personalidad se aprecia claramente en sus decisiones, muchas de ellas arriesgadas. Cuando tenía 16 años cruzó el charco con el resto de su familia para acompañar a Pau en la aventura americana, pero en 2003, cuando todo el mundo esperaba su ingreso en la liga universitaria, decidió regresar a España y enrolarse en las filas del FC Barcelona.

Su paso por el equipo azulgrana no fue un camino de rosas. Marc llegó pasado de peso y no contó con la confianza de Dusko Ivanovic, por lo que se tuvo que marchar al Akasvayu Girona, donde empezó a mostrar números de estrella, sobre todo en la temporada 2007/2008, cuando fue elegido mejor jugador de la temporada regular. Era hora de volver a Estados Unidos.

En Memphis Grizzlies fue titular desde el primer día y enseguida se convirtió en uno de los puntales de un equipo que, de la mano de Marc y de su compañero en la pintura, Zach Randolph, volvió a clasificarse para los play-offs después de cinco años de sequía, cayendo eliminados en semifinales de conferencia por Oklahoma City Thunders, después de dejar fuera a uno de los favoritos al título, San Antonio Spurs.

No es extraño que Memphis se haya tenido que ‘rascar’ el bolsillo para renovar al pívot español, al que media NBA quería tener en sus filas, dada la escasez de hombres altos de garantías que sufre la liga.

Su mejor temporada

Si las temporadas anteriores fueron buenas, esta está siendo aún mejor para Marc Gasol. El 28 de enero pasado fue elegido por primera vez Jugador de la Semana y pocos días después se confirmó lo que todo el mundo esperaba: Marc, al All-Star.

La gran decepción es que los hermanos Gasol no podrán defender juntos la camiseta del Oeste, ya que Pau no ha sido seleccionado, en parte debido a la irregular situación por la que atraviesan los Lakers.

Marc Gasol no reniega de la herencia de Pau. “Solo puedo estar agradecido a mi hermano. Le debo tanto. Nunca he intentado huir de lo que él representa”, declaraba hace unas semanas en una entrevista al diario Marca.

Está claro que la senda de Pau le ha servido a Marc para llegar hasta lo que es hoy, una estrella de la NBA. Pero también es verdad que nadie le ha regalado nada y que su presencia entre los 24 seleccionados para el All-Star de Orlando pone de manifiesto que su propio esfuerzo le ha permitido ser mucho más que ‘el hermano de…’