Los Lakers apabullan a Minnesota y alcanzan la cuarta plaza del Oeste (104-85)

• Bryant vuelve a liderar a los suyos con 31 puntos y siete rebotes
• Pau Gasol contribuyó con 15 puntos y cinco rebotes
• Ricky Rubio, notable con los 'Wolves' dando 9 asistencias

Ficha técnica:

104 - Los Ángeles Lakers (26+24+33+21): Fisher (7), Bryant (31), Peace (8), Gasol (15), Bynum (13) -cinco inicial-, Blake (8), Barnes (9), Murphy (7), Goudelock (2), Walton (2), Ebanks (-), Kapono (2) y McRoberts (-).

85 - Minnesota Timberwolves (18+26+15+26): Rubio (3), Ridnour (8), Johnson (5), Williams (10), Pekovic (10) -cinco inicial-, Beasley (14), Milicic (4), Webster (14), Randolph (12), Barea (-), Tolliver (3) y Ellington (2).

Árbitros: Kennedy, Connor y Mott. Sin eliminados.

Incidencias: Partido de temporada regular de la NBA disputado en el Staples Center, de Los Ángeles, ante 18.997 espectadores.

Los Ángeles Lakers aprovecharon un parcial de 33-15 en el tercer periodo para deshacerse sin mayores problemas de los Minnesota Timberwolves (104-85) y así alcanzar la cuarta plaza en la Conferencia Oeste.

Es la decimoséptima victoria seguida de los angelinos frente al equipo que dirige Rick Adelman, que sufrió la baja de Kevin Love por una gripe.

Kobe Bryant lideró a los suyos con 31 puntos, ocho asistencias y siete rebotes, mientras que Pau Gasol añadió 15 tantos, cinco rebotes y cuatro asistencias. Por los Wolves destacaron Michael Beasley y Martell Webster con 14 tantos cada uno, en tanto que Ricky Rubio se quedó en tres puntos y nueve asistencias en 25 minutos de juego.

En los tres partidos que ha jugado hasta ahora Rubio en el Staples Center (los otros dos, frente a los Clippers, saldados con victoria) acumula un registro de 4/34 en el tiro.

Los californianos, gracias al reposo del All Star 2012, salieron espoleados desde el comienzo con un espectacular Bryant, a quien no le afectó de ninguna manera jugar con una máscara protectora por la fractura del tabique nasal que sufrió en Orlando.

El equipo de Mike Brown incidía en el protagonismo de Andrew Bynum en la zona y hacía gala de una defensa muy agresiva (26-11), aunque el acierto de Minnesota desde el triple y la aportación desde el banquillo de Webster firmaron la respuesta con un parcial de 0-9 (26-20).

Beasley, un jugador del interés de los angelinos según la prensa especializada, y Darko Milicic mantuvieron la intensidad de los Wolves hasta que la segunda unidad angelina comenzó a carburar.

La intensidad de Matt Barnes y dos triples seguidos de Steve Blake volvieron a dar una renta cómoda a los Lakers (46-33) mientras Rubio se desperezaba en ataque con su primer triple. El catalán, inadvertido hasta entonces, comenzó a sentirse más cómodo en la pista y sus compañeros parecían contagiarse al descanso (50-44).

Minnesota sobrevivía a pesar de su 41 por ciento de acierto en tiros, por un 54 por ciento de su rival. Los locales volvieron a pisar el acelerador (63-48) a pesar de que Rubio había destapado el tarro de las esencias con dos asistencias mágicas, pero ese brote de ingenio quedó sepultado bajo el desorden y desacierto de su equipo.

Los Lakers, disfrutando de un Gasol entonado e intenso, siguieron apretando y consiguieron un margen superior a los 20 puntos (81-57) dejando el último periodo visto para sentencia.

A pesar de ello los reservas de los Wolves no se dieron por vencidos (89-70) y obligaron a Brown a contar de nuevo con Bryant y Gasol para apuntalar el choque. Al 24 de los Lakers no le importó y de hecho llevó su cuenta anotadora hasta más allá de los 30 puntos para regocijo del público.