El entrenador de la Fiorentina, despedido por agredir a uno de sus jugadores

• Delio Rossi lanzó un puñetazo a Ljajic por aplaudir irónicamente su cambio
• La 'Fiore' ocupa la quinta plaza por la cola, con 42 puntos a 6 del descenso
• El entrenador es sancionado también con tres meses de inhabilitación

La célebre escena de Luis Aragonés con Eto’o después de cambiarlo ha quedado en una minucia. Anoche, el entrenador de la Fiorentina, Delio Rossi agredió a uno de sus jugadores, el serbio Ljajic. Era el minuto 32 de la primera parte. La "Fiore" perdía 0-2 en casa ante el Novara, equipo ya descendido y el entrenador decidió el cambio. El jugador lo acepta de mal grado y mientras se dirige al banquillo aplaude irónicamente al técnico a la vez que le dice algo.

En ese momento, el preparador se lanza sobre su jugador a quien lanza algún puñetazo. Varios jugadores y ayudantes del técnico intervinieron para parar la trifulca.

El presidente del sindicato de futbolistas, Damiano Tommasi, dijo que comprendía la tensión del momento, pero precisó que "perder la brújula de esa manera no tiene justificaciones".

A falta de dos jornadas para el final, el Fiorentina ocupa la quinta plaza por la cola, con 42 puntos a 6 del descenso por lo que tiene prácticamente asegurada la permanencia que es la misión que le encomendaron al entrenador destituido. Delio Rossi, de 52 años, tiene una amplia trayectoria en la primera división italiana donde ha dirigido a la Lazio, el Palermo, en Genoa, Lecce y Fiorentina entre otros

Su reacción le ha valido la inmediata destitución como entrenador del equipo violeta toscano y su sanción con tres meses de inhabilitación. Vicenzo Guerini será el encargado de dirigir la Fiorentina en las dos últimas jornadas. Hasta este miércoles era el manager general. Esta tarde dirigirá su primer entrenamiento.

El juez deportivo Gianpalo Tossel ha informado de esta decisión de inhabilitación tras analizar las imágenes de televisión y ha señalado que evidencian una conducta "impulsiva", cuya gravedad no puede verse atenuada "por la tensión emotiva generada de una fase delicada" a nivel profesional.