Un entrenador de fútbol americano, culpable de abusos sexuales
- Jerry Sandusky agredió sexualmente al menos a 10 niños entre 1994 y 2008
- Era entrenador de fútbol americano de la Universidad de Penn State (Pensilvania)
- Sandusky podría pasar el resto de su vida en la cárcel cuando se dicte sentencia
Un jurado en Bellefonte (Pensilvania) ha encontrado culpable al exentrenador de fútbol americano de la Universidad de Penn State, Jerry Sandusky, de 45 de los 48 cargos que pesaban en su contra por agredir sexualmente a, por lo menos, 10 niños entre 1994 y 2008.
Ante la cadena perpetua
Sandusky, de 68 años, que se declaró no culpable de todos los cargos, que al principio fueron 52, podría pasar el resto de su vida en la cárcel cuando se le dicte la sentencia, que no se dará a conocer hasta dentro de al menos tres meses.
Sandusky fue entrenador de fútbol americano del prestigioso centro universitario de Penn State, junto al mítico Joe Paterno, despedido a consecuencia del escándalo y fallecido el pasado enero. El exentrenador, que se enfrenta a cadena perpetua, mostró poca emoción al escuchar el veredicto cuando fue leído y al concluirlo, el juez ordenó que fuera llevado a la cárcel del condado.
Su abogado Amendola dijo posteriormente en declaraciones a la prensa que su cliente "estaba decepcionado con el veredicto". Ocho hombres jóvenes testificaron en un juzgado de Pennsylvania sobre una serie de abusos que recibieron por parte de Sandusky que los besaba, los manoseaba, les hacia andar a tientas, tener sexo oral y violación anal.
Las primeras denuncias de dos de las presuntas víctimas, y el testimonio de Mike McQueary, otro entrenador asistente de Penn State que relató un encuentro sexual que Sandusky tuvo con un niño de alrededor de 10 años, fue lo que generó la destitución de Paterno y del presidente de la universidad, Graham Spanier.
El abogado de Sandusky no le permitió subir al estrado para hacer su propia defensa, algo que había pedido personalmente después de negar todas las acusaciones.
La defensa sugirió que sus acusadores tenían un motivo financiero para inventar historias años después del hecho y describió a Sandusky como la víctima de investigadores policiales que prepararon las preguntas a las presuntas víctimas para que diesen declaraciones acusatorias.
Sin embargo, los miembros del jurado creyeron en el testimonio de las víctimas y las palabras del fiscal Joseph McGettigan III, que presentó a Sandusky como un "pedófilo depredador". Apenas unas horas después de que el caso pasase a ser deliberado por los miembros del jurado, el abogado de uno de los seis hijos adoptivos de Sandusky, Matt, dijo que había admitido que su padre abusó también de él pero no le dejaron declarar.