Beitia, oro en altura, consigue su primera medalla al aire libre
- La saltadora supera su asignatura pendiente en Helsinki
- Consiguió el oro con una marca de 1,97 al tercer intento
- Se jugó la medalla en un mano a mano con la noruega Angelsen
Ruth Beitia, con dos medallas mundiales y cuatro europeas bajo techo en su largo historial, se ha colgado al fin la primera al aire libre, la de oro en los Europeos de Helsinki, superando con matrícula de honor su asignatura pendiente, justamente el año en que pondrá fin a su carrera deportiva.
Una marca de 1,97 al tercer intento en una final de altura sin un solo fallo hasta entonces concedieron el título a la capitana de la selección española en Helsinki, que mete a España en el medallero. La noruega Tonje Angelsen (1,97) y la sueca Emma Green (1,92) subieron con ella al podio.
La atleta cántabra, de 33 años, llegaba a sus últimos Europeos con la mejor marca de las contendientes (1,97) pero estaba convencida de que la final iba a estar muy pareja, por lo que debía mostrarse muy segura en cada salto.
Empezó en 1,85, altura que superó limpiamente, igual que los 1,92. Se puso al frente del concurso cuando rebasó el listón en 1,95, siempre a la primera. Con ese registro ya tenía segura, al menos, la medalla de plata, porque sólo la noruega Tonje Angelsen lo había saltado, aunque tenía un nulo en 1,89.
Mano a mano con Angelsen
Beitia se jugó la medalla de oro en un mano a mano con Angelsen frente al listón en 1,97 metros, altura que nunca había superado la noruega. Esta vez sí lo hizo, a la tercera. La española necesitaba, por tanto, saltarlo para recuperar el primer puesto, y lo hizo en su última tentativa, igualando su marca del año. Ninguna de las dos pudo luego con 1,99.
Desde que, con sólo 10 años, saltaba 1,29 metros, Ruth Beitia ha estado persiguiendo una medalla en grandes campeonatos al aire libre, pero hasta este jueves, a pocas semanas de su retirada, siempre se le había mostrado esquiva.
Plusmarquista española con 2,02, Beitia acaba de aprobar su eterna "asignatura pendiente" a un mes vista de los Juegos Olímpicos de Londres, la última gran competición antes de abandonar el atletismo "para poder tener niños en casa, ir a los restaurantes y vivir la vida", según comentó la víspera de la final.
Beitia, en la actualidad diputada regional en el parlamento de Cantabria, ya había estado presente en la final de los tres Europeos que había disputado antes de Helsinki: undécima en Múnich 2002, novena en Gotemburgo 2006 y sexta en Barcelona 2010.