Nadal: "No quiero poner excusas, varias cosas no fueron bien"
- El jugador español analiza la derrota en segunda ronda en Wimbledon
- "La única cosa que no entiendo es por qué se tiene que cubrir la pista"
- Así ha sido, minuto a minuto, el Nadal - Rosol de Wimbledon 2012
El español Rafael Nadal, tras caer en la segunda ronda de Wimbledon frente al número 100 de la ATP, el checo Lukas Rosol, no quiso "poner excusas" a una derrota en la que "varias cosas no fueron bien".
Tras un parón de casi 45 minutos para cerrar el techo de la pista central y encender la luz artificial, el número dos del mundo perdió el quinto y definitivo set de un encuentro que había comenzado a remontar en la cuarta manga.
"La única cosa que no entiendo es por qué se tiene que cubrir (la pista). Se acaba la luz natural, pero ¿la luz artificial no se puede poner sin cubrir? Me parece lo más lógico, jugar con luz artificial y no tener que esperar los 45 minutos", apuntó Nadal tras el encuentro.
"En el quinto set jugó de manera increíble y en los tres primeros yo no estuve a la altura. No fue la mejor decisión esperar al cierre de la pista, pero tuve que aceptarlo", indicó.
El mallorquín matizó sin embargo que "con el techo descubierto iba perdiendo dos sets a uno" y zanjó la cuestión aduciendo que no quiere "buscar razones extradeportivas a lo que ha sido una derrota".
“Estoy decepcionado“
"Cuando llegó el momento, él volvió a jugar increíble. Estaba capacitado para golpear a la pelota con mucha fuerza, sin presión y todo le fue bien. Estoy decepcionado", añadió.
Nadal reconoció que en los tres primeros sets no mostró su mejor nivel y adoleció de falta de "inspiración", si bien opinó que el buen juego de su rival en el último set fue una de las claves del choque, el primero de segunda ronda en un Grand Slam que se le escapa desde 2005.
"A todos nos sorprende cuando ves a un jugador al nivel que ha jugado (Rosol) en el quinto set. Es un nivel que creo que supera un poco la realidad. Golpeas todas las bolas todo lo fuerte que quieres, sacas todos los saques todo lo fuerte que quieres, te entran prácticamente todas donde tú sueñas. Más que sorprenderme, lo veo casi irreal", dijo Nadal.
El mallorquín, que llegaba a Wimbledon tras coronarse por séptima vez en la tierra batida de París, señaló, sin embargo, que "perdió" el encuentro en unos tres primeros sets en los que le faltó "la chispa de otras veces".
“Me siento muy bien mentalmente, pero físicamente necesito descansar“
"Las pocas opciones que he podido tener no las he jugado como se tienen que jugar para pasar de ronda en un torneo como este, que se decide por detalles muy pequeños", analizó el tenista de Manacor, de 26 años.
El español subrayó que sobre hierba hay muy poco margen de maniobra para cualquier tenista: "En otras superficies es más fácil corregir partidos, pero aquí pasa todo tan rápido que se puede decidir muy poco", explicó el dos veces ganador en el All England Club (2008 y 2010).
Al ser preguntado acerca de las opciones de su rival de avanzar en el torneo, Nadal se mostró cauteloso: "No lo sé. ¿Cuántos años tiene?", preguntó el español que, al conocer que el checo tiene 26 años, los mismos que él, se mostró cauteloso sobre sus posibilidades de avanzar en Wimbledon.
"No lo hizo en el pasado, no sé si lo hará en el futuro. Hoy jugó muy bien, si lo hace como en el quinto set puede ganar a cualquiera, pero sabemos que es muy difícil hacer eso cada día. Tendrá su oportunidad, le deseo lo mejor", afirmó Nadal, que aseguró que se tomará unos días de descanso antes de afrontar los Juegos Olímpicos de Londres, que comienzan el 27 de julio.
"Me siento muy bien mentalmente, pero físicamente necesito descansar. He jugado los últimos seis meses casi cada partido posible en los torneos a los que he ido. Por supuesto, físicamente tengo que parar un poco", explicó el español.
Por su parte, el checo Rosol mostró su felicidad. "Nunca habría esperado algo así. Lo siento por él. Ahora espero poder jugar otros partidos como éste. Sin duda fue el mejor partido de mi vida, que significa mucho para mí", comentó.