China celebra su buen inicio y dice que Lochte tiene suerte de que Ye sea mujer
- Ye Shiwen batió el récord mundial con un tiempo de 4:28:43
- La televisión estatal china repite una y otra vez la gesta de la nadadora
- "Es muy raro no tener a Michael conmigo en el podio" dice Lochte
- Phelps: "Estaba tan emocionado que me obligué demasiado pronto"
La prensa china ha celebrado el buen inicio del país en Londres 2012 (4 oros, 2 bronces y primer puesto en el medallero tras la primera jornada), y en especial la meteórica carrera de su nadadora Ye Shiwen, quien, según los chinos, podría ganar a Ryan Lochte o Michael Phelps si compitiera contra ellos.
"Lochte puede dar las gracias de que Ye Shiwen sea una mujer y no pueda competir contra él", destaca la agencia oficial Xinhua, señalando que en los 50 metros finales del 400 estilos la joven china de 16 años hizo un tiempo parcial mejor que el del estadounidense, oro en la misma prueba pero en modalidad masculina.
Ye batió el récord mundial con un tiempo de 4:28:43, siendo la primera mujer que establece una plusmarca desde que en 2010 se prohibieran los bañadores fabricados con derivados del poliuretano y se volviera a los textiles.
"Es un gran paso para la natación de China", declaró Ye a los periodistas de su país, asegurando que el progreso de la nación asiática en el deporte se debe a "un entrenamiento científico y duro".
Ye nadó los últimos 50 metros 17 centésimas más rápido que Lochte
Ye Shiwen invirtió 17 centésimas menos que Ryan Lochte en recorrer los últimos 50 metros y sólo tres más que el estadounidense en los últimos 100 según los parciales de sus respectivas finales de 400 metros estilos.
Ye se colgó la medalla de oro con un tiempo de 4:28:43, rebajando por más de un segundo el récord mundial anterior, en poder de la australiana Stephanie Rice con 4:29.45.
Para los amantes de la estadística anecdótica, la adolescente nadadora china dejó un parcial de 28.93 segundos en los últimos 50 metros, en tanto que Ryan Lochte, en su final de la misma disciplina, marcó 29.10 a partir del último volteo.
La sorprendente aceleración final de la nadadora china se refleja también en los últimos 100 metros, en los que sólo cedió tres centésimas a Lochte (58.68 frente a 58.65 del norteamericano).
Un país orgulloso de su arranque en los Juegos
En las horas previas a que comience la segunda jornada de los Juegos, la televisión estatal china repite una y otra vez la gesta de la nadadora y también la de Sun Yang, quien en los 400 libres se convirtió en el primer hombre del país asiático que se cuelga un oro olímpico, un objetivo que perseguía tras haber sido uno de los protagonistas de los Mundiales de Shanghái 2011.
También se retransmiten repetidamente el oro de la haltera Wang Minjuan en halterofilia y el de Yi Siling en tiro, que fue el primero de Londres 2012, por lo que tiene también un gran valor simbólico para los chinos.
La prensa china destaca además que Yi es una de las atletas más atractivas de la delegación nacional, además de tener un origen humilde (sus padres tienen un pequeño restaurante en el sur de China).
Lochte: "Michael está orgulloso de mí"
El nadador estadounidense Ryan Lochte, que el sábado se proclamó campeón olímpico en los 400 estilos en una prueba en la que su compatriota Michael Phelps no pudo conseguir medalla, ha asegurado que, a pesar de la decepción de su rival, éste le ha reconocido que se siente "orgulloso" de él por haber logrado el oro para Estados Unidos.
"Es muy raro no tener a Michael conmigo en el podio. Hablamos después de la sala de masajes. Estaba orgulloso de mí porque gané la primera medalla de oro para los Estados Unidos, a pesar de que sé que, al mismo tiempo, se sintió decepcionado", aseguró el nuevo campeón olímpico en una entrevista para el diario deportivo francés L'Equipe.
Además, Lochte destacó la importancia de ganar a un hombre como Phelps, poseedor de catorce medallas de oro olímpicas. "Dio el 110%, sin lugar a dudas. Estaba invicto en la distancia en los Juegos Olímpicos, así que me siento orgulloso de haberle vencido. Será una motivación aún más grande para las próximas pruebas", afirmó.
El norteamericano asegura también que su vida cambió desde los Juegos Olímpicos de Pekín. "Llevo mi vida como quiero. En Pekín era joven; desde entonces he cambiado las cosas en mi dieta, mi formación... Se aprende mucho en la vida. Mi modelo en la vida es divertirme. Tengo 28 años, un poco mayor para la natación, supongo, pero explotaré", manifestó.
"Estoy muy contento. Durante cuatro años he trabajado muy duro y sabía que estaba en gran forma para ir a los Juegos. Estaba tan emocionado por participar en una final que me obligué demasiado pronto, tuve un poco de dolor. Esta victoria es una gran alegría, que me da más energía para el resto de la competición", concluyó.