Lucha libre española, una 'low-cost' muy rentable

• La luchadora vasca Maider Unda ha logrado un histórico bronce en Londres
• La Federación Española de Lucha cuenta con un presupuesto de 600.000 euros
• Contrastan con los 24 millones de euros de Rusia o los 12 de Azerbayán
• Repasa la lucha libre de los Juegos de Londres en RTVE.es

La española Maider Unda celebra con su entrenador Luis Crespo y el seleccionador Francisco Barcia la medalla de bronce.

Maider Unda ya tiene su hueco en la historia olímpica española. Su medalla de bronce en los Juegos de Londres supone la primera presea para la lucha libre española.

Este deporte minoritario en España cuenta con apenas 3.000 federados y con poca proyección mediática. Los Juegos Olímpicos son el mejor escenario para reclutar a jóvenes que aseguren el futuro de este deporte.

La presea de bronce conseguida por Maider Unda es un éxito que cierra un ciclo olímpico que comenzó con el quinto puesto hace cuatro años en Pekín.

Los 35 años de esta pastora y productora de queso hacen casi imposible su participación en los Juegos de Río de 2016, como ella misma reconoció en rueda de prensa tras su éxito y como confirma el seleccionador nacional Francisco Barcia.

"Unda es una deportista que se cuida mucho, pero tiene 35 años y creo que podrá seguir compitiendo profesionalmente uno o dos años más, pero no creo que llegue a Río", afirma el seleccionador.

“Unda es una deportista que se cuida mucho“

La Federación Española de Lucha tiene en la optimización de recursos y en el plan ADO, a pesar de los recortes, a sus mejores aliados para poder subsistir e ir evolucionado poco a poco.

Los 600.000 euros anuales con los que cuenta la Federación española de Lucha, contrastan con los 24 millones de euros que destinan los rusos a este deporte o los 12 millones de euros de Azerbayán.

"La federación ha hecho una gran labor, el presupuesto que tenemos lo organizamos bien y las ayudas del ADO son muy importantes para nosotros. Nos enfrentamos a países que invierten 24 millones de euros en la lucha", asevera Paco Barcia.

Intercambio de luchadores

Los luchadores españoles basan parte de su preparación en los intercambios de deportistas con las federaciones de otros países.

"Para ir cogiendo cada vez mejor nivel hacemos intercambios de luchadores con otros países como Estados Unidos. Lo único que tenemos que pagar es el viaje de los deportistas, de la estancia se hace cargo el país de destino", resalta.

Otro de los inconvenientes del bajo presupuesto con el que cuenta la lucha es que para ahorrar costes, cada vez que hay una competición internacional, el seleccionador, en lugar de llevarse a todos sus efectivos, tiene que competir con la mitad.

La siguiente remesa de luchadores españoles está en pleno proceso de cocción y es complicado que llegue en condiciones óptimas para lograr la clasificación a los Juegos que se celebrarán en Brasil dentro de cuatro años.

“Estamos trabajando con la base de los futuros luchadores“

"Ahora estamos trabajando con la base de los futuros luchadores. Los Juegos de Río están muy cerca y será muy complicado llegar. El objetivo más real será en 2020, en los que esperemos sean los Juegos de Madrid”, asevera el seleccionador nacional.

Cómo tener éxito en un deporte minoritario

La base del éxito en cualquier deporte, a parte del talento, es el trabajo y sacrificio diario que hay que dedicar para llegar a lo más alto.

"Para preparar unos Juegos llegamos a hacer once y doce sesiones de entrenamiento a la semana. Los entrenamientos son dobles, mañana y tarde", afirma Barcia.

La lucha libre es uno de los deportes más antiguos de los Juegos Olímpicos y España ha logrado su primera presea en Londres. Para el seleccionador nacional los futuros éxitos en este deporte pasan por una concienciación de la juventud en la práctica de disciplinas minoritarias.

"Tenemos que concienciar a los chicos en los colegios e institutos de que hay otros deportes, además de fútbol y tenis", reafirma Francisco Barcia.

“Hay otros deportes además de fútbol y tenis“

Sin preparación no hay luchadores y de ella se encargan los técnicos que se ven apostados en los laterales durante los combates, esas personas anónimas que dan instrucciones y animan a sus deportistas durante la lucha.

Los entrenadores que hoy se dedican a preparar a luchadoras como Unda salieron de la hornada de competidores que intentaron hacerse un hueco en este deporte hace 20 años, en Barcelona 92.

"Gracias a los Juegos de Barcelona hoy podemos tener un entrenador en casi todos los sitios de España, sin ellos no sería posible", concluye el seleccionador nacional, que hace unos días abrazó a Unda tras su éxito en tierras londinenses.