El Barça se inmuniza con una victoria ante el Getafe y otro doblete de Messi

• Plácida goleada del Barça con tantos de Adriano, Messi (2) y Villa
• Messi entró como sustituto en el 59 e hizo un doblete en veinte minutos
• Puyol se lesiona el ligamento de la rodilla y estará de 4 a 6 semanas de baja
• Así ha sido el Getafe 1-4 Barcelona

Fábregas celebra el gol del Barça conseguido con un remate de Adriano.

Ficha técnica

1 - Getafe: Moyá, Valera, Lopo, Alexis, Miguel Torres, Xavi Torres, Michel (Lacen, m.68), Abdel Barrada, Diego Castro, Pedro León (Sarabia, m.78) y Adrián Colunga (Álvaro Vázquez, m.60).

4 - Barcelona: Víctor Valdés; Montoya, Piqué, Puyol (Mascherano, m.57), Adriano, Busquets, Xavi, Thiago (Messi, m.59), Tello (Villa, m.76), Pedro y Cesc Fábregas.

Goles: 0-1, m.33: Adriano; 0-2, m.74: Messi, de penalti. 0-3, m.78: Messi; 1-3, m.80: Mascherano, en propia puerta. 1-4, m.90: Villa.

Árbitro: Teixeira Vitienes, del Comité Cántabro. Mostró tarjeta amarilla a Busquets (m.23), Piqué (m.37), Michel (m.61), Valera (m.62)

Incidencias: encuentro de la cuarta jornada de Primera División disputado en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe (Madrid) ante unos 10.000 espectadores

Un Barça que prescinde de Messi consigue no ser un peor Barça, y con Messi siempre es victorioso. Esa es la lección que se pudo extraer de Getafe, uno de los campos malditos del conjunto azulgrana el año pasado y que vuelve a conjurar, como el Reyno de Navarra, con una victoria firmada en la primera parte y confirmada con un doblete del argentino, que vino a revolucionar la victoria a la que apuntaban sus compañeros [Datos y estadísticas del Getafe 1-3 Barcelona.

La victoria valió dos horas después mucho más por la derrota del Real Madrid en el Sevilla, que pone a los catalanes como líderes en solitario con ocho puntos de ventaja respecto al vigente campeón y principal rival por el campeonato.

Es cierto que los azulgranas, 'naranja-amarillo' en esta ocasión, jugaron un partido tirando a espeso en la primera parte, con la posesión de siempre y la falta de peligro de los últimos tiempos, pero consiguieron el gol  por medio de Adriano.

Y la previsible entrada de Messi en la segunda parte puso al equipo a velocidad de goleada. Un nuevo doblete del argentino engorda sus  estadísticas y refuerza el liderato azulgrana, que se saca una espina  que tenía clavada en el Coliseo, aunque se lleva a cambio una nueva lesión de su capitán, un gafado Carles Puyol.

Tito Vilanova, que cumplía su partido de sanción, dispuso en el once inicial un equipo de los que gustan a la parroquia azulgrana, por la presencia de diez canteranos, pero que daba pie a eventuales reproches por el descanso de titulares como Messi y Alves en un partido al que el Barça llegaba acusando las bajas de titulares como Iniesta, Alexis y Jordi Alba. Algo así como salir a la intemperie sin abrigo en una jornada en la que pululan los 'virus FIFA'. Una decisión inevitablemente avalada o censurada en virtud del resultado.

Y fueron esos canteranos los que bendijeron su apuesta. Un combativo Tello que originó las primeras ocasiones azulgranas con su endiablada velocidad. El Getafe, que no pudo negociar la posesión del balón pese a tener querencia a ello, optaba por los contraataques y al peligro de Colunga -quiso cobrarse un penalti que no existió-, Barrada y Pedro León.

La ocasión más clara la dibujó Thiago Alcántara, que no es Iniesta pero tampoco hace falta, porque aporta también chispa y algo distinto por los andurriales del albaceteño, con una jugada de dibujos animados atravesando defensas a pares y con un trallazo que se estrelló en el larguero en el minuto 25.

Con el descorche, las combinaciones horizontales dieron lugar a ocasiones más directas, y la fórmula de más ruptura y menos toqueteo fue ejecutada por Cesc Fábregas.

El jugador que aspira a un papel prominente en el Barça como el que lucía cuando era capitán del Arsenal condujo a su equipo al gol en una arrancada en la zona de tres cuartos, un cambio de ritmo que trató de interceptar tarde y con blandura la zaga madrileña, y que terminó en los pies de Adriano, lateral izquierdo transmutado en uno de esos 'delanteros mentirosos' que proliferan últimamente para batir a Moyá con tiro raso. Es el segundo gol consecutivo en Liga del brasileño, que ya marcó ante el Valencia.

El gol desinhibió también al Getafe, que pidió una mano de Puyol en el área y condujo un gran contraataque que terminó con un tiro blando de Pedro León. En otra conexión Tello-Thiago estuvo a punto de llegar otro tanto. Pase picado por alto, control con el pecho y tiro a la base del palo izquierdo, donde llegó la ágil mano de Moyá.

Puyol se vuelve a lesionar y Messi repite doblete

En la segunda parte, el Barça concedió algunas llegadas al Getafe, sin dejar de ocasionar peligro con la velocidad de Tello, un recurso excepcional en el partido del Coliseo, que calcó su ocasión del primer tiempo.

Vilanova tuvo que iniciar los cambios antes de lo previsto. Puyol se torció la rodilla izquierda en una jugada aislada en el minuto 53, y tuvo que retirarse el día en el que regresaba a la titularidad sustituido por Mascherano. El pronóstico llevado a cabo por los médicos del Barcelona apunta a un estiramiento del ligamento y a una baja de entre cuatro y seis semanas.

Al instante, Messi salió al campo ocupando la plaza de Thiago Alcántara y el Getafe sacó a su nuevo delantero, Álvaro Vázquez, procedente del Espanyol. Y a los pocos minutos, en el 66, en una de sus típicas galopadas el argentino fue derribado en el área por Miguel Torres, pero Teixeira Vitienes no señaló penalti, para asombro del argentino, que no daba crédito.

El que sí pitó es el que cometió Valera sobre Pedro, que barrió el recorte del tinerfeño con el tacón como último e inútil recurso. Y claro, Messi compareció a la cita con el gol, esta vez desde los once metros, con un tiro indiscutible fuerte y al centro.

El 'golito' del 'Guaje'

Como todo iba sobre ruedas para el Barça, Vilanova redondeó la crónica del día siguiente dando entrada a Villa por Tello para el último cuarto de hora, una oportunidad para que el 'Guaje', que también ansía el éxito tras ocho meses de ausencia, se ruede. Y en una jugada vertiginosa, el balón llega en claridad a Montoya por la derecha, una banda que había estado desierta para los azulgrana y sirve el balón a Messi para que remate a puerta vacía.

Acto seguido, el Getafe obtuvo su gol a diez minutos del final en un disparo de Sarabia que rebotó en el rostro de Mascherano y despistó a Valdés, pero aunque buscó sus oportunidades, el balón en posesión de los de Luis García no tenía capacidad para inquietar y el Barça se dejó llevar.

Todos salvo uno, Villa, que estaba deseando reivindicarse y también rentabilizó su concurso en el partido con un gol, en el mismísimo minuto 90, recogiendo un gran centro, controlando con el pecho y colando el tiro bajo las piernas de Moyá. Noche a pedir de boca para el Barça y el barcelonismo, que afrontará sus próximos retos reforzado como líder, con la satisfacción del deber cumplido y el sueño ganado. Las pesadillas las dejan para el equipo de enfrente.