Estados Unidos se acerca a la Copa pero Europa no pierde todas las esperanzas (10-6)
- Las dos últimas victorias hacen que el viejo continente aún plantee batalla
- Europa necesita ganar 8 de los 12 partidos que restan este domingo
- A EE.UU. le basta con sumar 4 victorias y un empate para llevarse la Ryder Cup
Europa aún palpita en una Ryder Cup que tenía prácticamente perdida en Medinah (Chicago), gracias a los dos últimos puntos del sábado que han atenuado lo que parecía una ventaja intimidatoria de los Estados Unidos. A falta de los doce partidos individuales del domingo, Estados Unidos vence a Europa por 10-6.
Sergio García y Luke Donald, y finalmente Ian Poulter con Rory McIlroy, hicieron posible en un dramático desenlace, en el hoyo 18, que los dos últimos puntos cayeran al saco del viejo continente y que aún se plantee batalla.
Los europeos necesitan ganar 8 de los 12 partidos que restan para empatar y retener así el trofeo, por ser el último campeón. Una tarea, no obstante, endiabladamente difícil.
Aunque también hay una cuenta más sencilla: a los Estados Unidos le basta con sumar 4,5 puntos (cuatro victorias y un empate) para levantar el diminuto pero emblemático trofeo.
El resumen desde el comienzo del torneo hasta el umbral de los individuales es que los dieciséis encuentros por parejas, tras dos jornadas con sesiones dobles, fueron abrumadoramente dominados por los golfistas norteamericanos.
No hubo empates, curiosamente, pero de las seis derrotas locales todas menos una (hoyo 17) se escenificaron en el hoyo 18.
La Ryder Cup se ve medio llena para los intereses locales. Es la tercera vez, en las últimas quince últimas ediciones de esta competición, que los Estados Unidos afronta un domingo con ventaja.
El punto abultado (5 y 4) de Bubba Watson y Webb Simpson sobre Justin Rose y Francesco Molinari aseguró esta ventaja para el domingo de los duelos cara a cara.
El equipo estadounidense ya avanzó el doble de metros que el europeo (8 a 4), tras los partidos matinales de 'foursomes' (golpes alternos). Tres de ellos cayeron hacia el bando local.
De esas tres victorias del 'Team USA' hubo una especialmente sorprendente. Por el resultado, un abultado 7 y 6 (7 hoyos de ventaja y 6 por jugarse), y porque Phil Mickelson y Keegan Bradley fueron otra vez los artífices de un monumento a la compenetración.
Phil y el novato Bradley liquidaron a los ingleses Luke Donald y Lee Westwood en el hoyo 12. El resultado iguala el mejor registro de una victoria por parejas en la historia de la Ryder Cup.
Mickelson no ha pisado aún el 'green' del 18 y, además, es la segunda vez que suma 3 puntos en otros tantos partidos. Antes solo había logrado en la edición de 1995, cuando el zurdo era novato y Bradley, hoy su pareja, tenía solo 5 años.
El español y capitán europeo, José María Olazábal, consciente de la importante desventaja, colocó sus dos mejores parejas para los últimos partidos de la tarde.
García-Donald y Poulter-McIlroy tenían la misión de, al menos, asegurar que la renta desfavorable no se fuera más allá de los 4 puntos. De lo contrario, ganar el domingo sería un ejercicio de gladiadores en medio de un griterío de más de 40.000 gargantas.
Ese último cartucho de Olazábal estuvo bien tirado, porque ocurrió que García y Poulter, éste un coloso (4 'birdies' en los últimos 4 hoyos), abrieron una espita a la esperanza de un difícil pero posible remontada visitante.