El seleccionador francés pide "un castigo ejemplar" para los implicados del Montpellier

• "Este asunto es algo desagradable", dice Claude Onesta ante el escándalo
• Señala que el jugador Karabatic es "una persona digna y ejemplar en todo"
• "Si se prueban los hechos la sanción será merecida", comenta el técnico galo

Los jugadores del Montpellier guardan silencio

El seleccionador francés de balonmano, Claude Onesta, ha pedido "un castigo ejemplar" para los implicados en el supuesto amaño de partidos y apuestas ilegales por parte de jugadores del Montpellier, entre los que se incluyen su pupilo en el combinado nacional Nikola Karabatic, al que sin embargo ha querido arropar porque le considera "una persona digna y ejemplar en todo lo que ha emprendido".

"Este asunto es algo desagradable, incluso insoportable. No nos hemos acostumbrado a lo que estamos viviendo en estos momentos. Llevamos varios días tratando de entender, de saber. Si no hemos hablado las personas de la Federación Francesa es porque todo eran rumores. Ahora, pensamos en reaccionar porque se ven afectadas 500.000 personas federadas, arrastradas por el fango como si todas fuera culpables", señaló Onesta en declaraciones a la cadena 'RTL'.

Rompe una lanza por Karabatic

Una vez realizada esta aclaración, el seleccionador galo reconoce que "al parecer" los jugadores del Montpellier "han cometido un grave error" que "debe ser sancionado y castigado de manera ejemplar", también en el caso de los dos jugadores que tuvo bajo sus órdenes en los Juegos Olímpicos de Londres, Karabatic y Honrubia, aunque este último no figura entre los detenidos por la policía francesa.

"Lo siento por ellos, son chicos por los que tengo un gran respeto y afecto. Espero que la investigación continúe, si se prueban los hechos la sanción será merecida y sé que la van a aceptar porque se habrán dado cuenta de la gravedad de la situación", analizó Onesta, que en cualquier caso quiso romper una lanza a favor de Karabatic.

"Nikola Karabatic es una persona digna y ejemplar en todo lo que ha emprendido. Este error debe ser castigado, porque es perjudicial tanto para él como para los demás, pero todavía tengo afecto por él. No debemos hundir hoy lo que ayer nos encantó", reivindicó.