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Anna Tarrés: "El límite en el trabajo siempre se consensúa con el deportista"

  • La ex seleccionadora de 'sincro' asegura que no todo vale para ganar
  • Asegura que no mantiene contacto con sus exnadadoras, salvo Mengual

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Anna Tarrés, exdirectora técnica de la selección española de natación sincronizada, comentó en el Foro Espacio 2014-AS, en Madrid, que los éxitos llegan no sólo con el trabajo, sino también con actitudes y aptitudes personales, admitió que ha sufrido en estos meses, y señaló que el límite del trabajo es consensuado.

La técnica catalana impartió una ponencia sobre el entrenamiento de alto nivel en competición para conseguir los mejores resultados, en donde hizo un repaso a su relación con la Federación Española de Natación, la evolución que tuvo al frente de la selección nacional de sincronizada y la situación en la que se encuentra ahora.

Comentó que cree en las posibilidades de éxito de la selección en el futuro, que su ausencia no debería ser definitiva, aunque apunta a que no será fácil: "Todo el mundo se merece una oportunidad. Hemos aprendido a trabajar en la excelencia del deporte y esto requiere entrenamiento, incluso para ser un buen entrenador".

Y no cree que las medallas se debieran sólo a su dirección: "Lo que empieza es una época distinta, nadie es imprescindible en este mundo, pero es cierto que los proyectos tiran hacia adelante por las personas. Y si las personas no son competentes, raramente se puede llegar arriba".

Durante su ponencia habló de la importancia del trabajo, del espíritu de superación, de la necesidad de que haya buenas relaciones entre los componentes, y el mantenimiento de una máxima motivación, e indicó: "Para conseguir los éxitos se necesita una máxima exigencia que lleve a la excelencia".

Pero, al contrario de lo que se ha dicho sobre ella, no cree que todo vale para la victoria: "El límite va unido a la relación que tengas con el grupo. Siempre se trabaja para conseguir algo más. Hay que tener complicidad y compromiso, pero los límites están consensuados con el grupo para conseguir el máximo rendimiento".

En referencia a la búsqueda de resultados, señaló que hay que ser conscientes de la situación del equipo: "Hay que poner objetivos reales. En nuestro caso, cuando estamos ante otras selecciones, como Rusia, que son muy superiores a nivel individual y colectivo, tenemos que buscar otras cosas para mejorar la puntuación e imponernos".

Sobre el documento que una veintena de exnadadoras firmaron en su contra, Tarrés comentó que cree que es una "carta orquestada desde la Federación", y que no entiende cómo algunas nadadoras si tan mal lo pasaron pudieron llevar a hermanas y familiares.

Además reveló: "No he tenido contacto con ninguna de ellas desde entonces", todo lo contrario que con Gemma Mengual: "Nunca quise tener amistad con mis nadadoras, pero en el caso de Mengual nos hemos hecho íntimas".

No quiso entrar a valorar mucho la carta ni la situación en la que se encuentra, puesto que tiene un juicio el próximo lunes contra Fernando Carpena, el presidente de la Federación de Natación, y reveló que, dependiendo del resultado, podría denunciar a las propias nadadoras.

Finalmente, reveló que actualmente tiene contrato con la federación, aunque se dedica a un trabajo administrativo: "No se me comunica nada del trabajo que hacen, ni de planificación de trabajo ni nada, y mi trabajo es el de realización de informes que creo que son poco productivos".