Odriozola propone recuperar el cargo de director técnico 23 años después
- Ramón Cid será director técnico de atletismo si Odriozola es reelegido presidente
- El dirigente ejerció el cargo, equivalente a seleccionador, en los últimos 23 años
- "Siempre habrá sospechas, pero en dopaje aplico tolerancia cero", dice Odriozola
José María Odriozola, candidato a la reelección a la presidencia de la Federación Española de Atletismo (RFEA) en las elecciones del próximo día 16 de diciembre, ha anunciado que Ramón Cid, hasta ahora responsable de saltos en la RFEA, será el director técnico en caso de ser reelegido.
"Ramón ha sido el entrenador más votado con diferencia para la asamblea y tiene buena acogida en todos los sectores. Él y Juanjo Prado fueron quienes me animaron a presentarme en 1988. Nos conocemos bien, somos amigos, conozco su capacidad técnica y además en buena persona", ha declarado Odriozola.
Odriozola concede "plena autonomía" al director técnico, un cargo que el propio presidente ha venido ejerciendo desde hace 23 años. El último fue Carlos Gil, seleccionador nacional entre 1979 y 1988, hasta que Odriozola ganó las elecciones a Guillermo Ros, el candidato oficial del entonces presidente, Juan Manuel de Hoz.
"Le he pedido perdón por haberle ofrecido el cargo en el momento más difícil. Yo sólo voy a controlar el aspecto económico. Hay que ir soltando lastre, esto es parte importante de la transición, aunque seguiré estando al día del atletismo", ha dicho Odriozola.
Tolerancia cero contra el dopaje
El dirigente también ha afirmado que a pesar de que "siempre habrá sospechas", en su mandato "siempre hubo tolerancia cero con el dopaje" y ha dicho que el caso Armstrong es "un precedente peligroso".
Odriozola valora el apoyo de la atleta Marta Domínguez a su candidatura, al margen de que la atleta palentina estuviera en su día implicada en la "Operación galgo antidopaje".
"Estoy encantado de que la mejor atleta española de todos los tiempos me ofrezca su apoyo. Ya sé que siempre habrá sospechas sobre ella y sobre mi en el país de la rumorología. Se me ha acusado de tapar posibles positivos, pero llevo casi treinta años de presidente y siempre tuve tolerancia cero. Nunca he parado de luchar contra el dopaje", asegura.
"Ahí está las hemerotecas. Yo establecí, contra viento y marea, los controles fuera de competición, pero tengo que respetar el principio de confidencialidad y a veces he tenido que disimular porque no puedo decir nada. En España ha habido casos famosos que han sido sancionados, y han sido los principales disgustos que he tenido como presidente pero en otros no se ha demostrado nada", dijo.
También se refirió Odriozola al peligro que puede suponer en la lucha contra el dopaje casos como el del exciclista estadounidense Lance Armstrong, en el que los testimonios de otros ciclistas influyeron decisivamente en la sanción.
"Casos como el de Armstrong son un precedente peligrosos porque en base a testimonios se ha aplicado una sanción. La regla es que te sancionan si das positivo o admites tu culpa, que te has dopado. Se puede sospechar de todo el mundo, yo no me fío ya de nadie, pero solo hay dos motivos de sanción: que el atleta sea cazado o que confiese su culpa. Es peligroso sancionar si no se dan estas premisas", subrayó.
Sobre la reducción del presupuesto para la lucha contra el dopaje, Odriozola explicó que el recorte de 50.000 a 25.000 euros se debe a la "transferencia de funciones" a la Agencia Española Antidopaje, entre los que se incluyen los controles fuera de competición.
Confía en la reelección
"Conservo la pasión y la ilusión por el atletismo, y en estos tiempos tan difíciles que se avecinan hace falta un último mandato para intentar dejar las cosas lo mejor posible. Me parecí feo no presentarme en tiempos tan difíciles", afirma.
Sobre la otra candidatura, en la que se han fusionado los proyectos de Vicente Añó y Fermín Cacho, dice: "No me lo esperaba, pero están en su derecho y a ver quien gana. Me sorprende un poco las formas porque los dos querían ser presidentes. Ahora les quedarán menos cargos que ofrecer".
Odriozola, que anunció que se bajará el sueldo un 20 por ciento, confía en "ganar claramente las elecciones" del próximo 16 de diciembre. "He pedido el aval a 140 de los 147 asambleístas, a algunos no he querido pedírselo, y a día de hoy ya tengo 60. Nunca había tenido tantos a estas alturas".