El Barça se alza con su octava Copa ASOBAL

• El conjunto azulgrana se impone en la final al BM Atlético de Madrid
• El equipo madrileño se mostró muy enfadado con la actuación arbitral

El Barça se lleva la Copa ASOBAL

Ficha técnica:

24 - Atlético de Madrid: Dahl, Balic, Jurkiewicz, Gojun, Kallman (3), Barachet (3), García Parrondo (3) -siete inicial-, Sabanovic (ps), Lazarov (2, 1p), Aguinalgalde (4), Ángel Romero (1), Markussen (3), Cañellas (3) y Masachs (2).

32 - Barcelona Intersport: Saric, Juanín García (4), Rutenka (1p), Noddesbo (7), Gurbindo (2), Sarmiento (3), Rocas (1) -siete inicial-, Víctor Tomás (3), Raúl Entrerríos (5), Sorhaindo (1), Montoro (2), Viran Morros (1), Stranovsky, Ariño (2) y Mikel Aguirrezabalaga.

El Barcelona Intersport ha revalidado su título de campeón de la Copa Asobal después de imponerse en la final al Atlético de Madrid (24-32), que no pudo mantener su buen inicio de encuentro y acabó cediendo con claridad. Es el octavo trofeo de la Copa ASOBAL para el equipo culé en la 23ª edición del torneo.

El cuadro rojiblanco fue de más a menos e incluso sus protestas a los colegiados Bustamante López y Álvarez Mata le costó la expulsión a su técnico, Talant Dujshebaev, a los 46 minutos, por sus airadas reclamaciones. El Barcelona se encontró con el mejor Atlético de Madrid de la temporada en el primer tiempo.

Los rojiblancos rozaron la perfección en el arranque del choque, sobre todo en defensa. Su fuerte 6-0 se le atragantó a su rival, que tardó diez minutos en marcar su segundo gol, obra de Dani Sarmiento tras culminar un rápido contraataque.

Unos problemas que se acabaron con la entrada del internacional español Raúl Entrerríos, al que su entrenador, Xavier Pascual "Pasqui", le concedió la dirección del juego en el ataque posicional, tras pedir su primer tiempo muerto en el minuto siete (5-1).

Con el pequeño de los Entrerríos y Dani Sarmiento en la primera línea, el Barcelona mejoró en ataque. Perdió lanzamiento exterior, pero ganaron en validad, lo que le permitió conectar varias veces con el pivote danés Jesper Noddesbo, letal en los seis metros -cinco goles en el primer tiempo-.

Poco a poco, y ante la desesperación de Talant Dujshebaev con la actuación de los colegiados, el Barcelona, cada vez más asentado en defensa, empezó a limar su desventaja, hasta igualar el duelo a falta de diez minutos para el descanso (9-9).

Pero una exclusión de Noddesbo, la segunda, la explotó el Atlético para dar un nuevo estirón en el electrónico (12-10, m.24). Un par de paradas del serbio Saniel Saric dieron aire al Barcelona, que llegó al intermedio igualado gracias al tanto del danés a falta de tres segundos.

El equilibrio se rompió en el arranque del segundo acto. El Barcelona ganó en intensidad defensiva y el Atlético, incapaz de conectar con Julen Aguinagalde, se atascó en el juego posicional. Con un parcial 0-7, los azulgranas se dispararon en el marcador (14-20, m.39).

Talant Dujshebaev, más pendiente de protestar a los árbitros que del juego, se acordó entonces de pedir tiempo muerto. Tras el parón, el francés Xabier Barachet desatascó a los rojiblancos en ataque. Y Adnan Sabanovic, que había sustituido en la portería a un desacertado Magnus Dahl, empezó a tocar balones.

Reaccionó el Atlético y se puso a tres de distancia (18-21, m.43). Parecía que había partido, pero una polémica decisión de colegiados acabó por indignar a Dujshebaev. El entrenador del Atlético fue amonestado con dos minutos por sus continuas protestas.

Lejos de callarse, el ex jugador entró en la pista persiguiendo a los árbitros, que le mostraron la tarjeta roja directa. Talant Dujshebaev, fuera de sí, mandó a sus jugadores marcharse de la pista. No le siguieron. Pero el partido ya estaba roto. El Barcelona recuperó la renta de los siete goles (19-26, min.48), dejando la final sentenciada.