Mourinho provoca el 'Casillasgate'
- La suplencia del capitán destaca en la derrota contra el Málaga
- La relación entre ambos se tensa, aunque lo niegan en público
- Ramos vivió una situación parecida contra el Manchester City
La derrota del Real Madrid frente al Málaga (3-2) en la última jornada de Liga abre un nuevo frente en el vestuario blanco. A tenor de las filtraciones -más o menos interesadas- ya se sabía que la relación entre el técnico, José Mourinho, y el capitán, Iker Casillas, era tensa. Después de la suplencia de este, pueden saltar chispas.
El meta titular se presumía insustituible desde hacía diez años. En 2002, con Vicente del Bosque el frente del banquillo blanco, el mostoleño tuvo que luchar por el puesto con César Sánchez. Una lesión muscular de este y paradas de las milagrosas en la final de la 'Novena' de Casillas forjaron la leyenda.
Desde entonces nadie había osado cuestionar su titularidad por razones técnicas; hasta que llegó Mourinho. Al portugués no podía sentarle bien el tipo de madridismo que encarna Iker. 'Mou' es aguerrido, encarado con el rival, mientras que el capitán representa el lado amable, respetuoso con el contrario e incluso llegando a la amistad con el 'enemigo': el Barça.
Mourinho no es capaz, o no quiere entender que Casillas trate de tender siempre puentes con el eterno rival, cuando él prefiere la confrontación. Lejos de contradecirle en público, el meta le respaldaba e incluso se hacía fotografías con él camino a Cibeles para celebrar la Liga.
Pero en esta temporada se le ha acabado la paciencia. Para colmo, Casillas no ha cuajado su mejor inicio y ha recibido algunas críticas, llegando a ser señalado en algunos de los goles encajados por el Madrid. Goles que han significado puntos perdidos.
La receta de 'Mou' ya la tuvo que tomar Sergio Ramos antes que Iker. El camero fue suplente en el inicio de la Champions contra el Manchester City. Luego volvió contra el Rayo en Liga y su técnico alabó su reacción.
Entonces hizo ver que la decisión buscaba una reacción del defensa y este respondió de manera óptima. ¿Busca lo mismo con Casillas? Es posible, pero quienes sospechen otras intenciones del portugués verán coincidencias entre Ramos y su capitán: ambos son españoles, campeones de Europa y del Mundo con la selección y, a ojos de 'The Special One', vacas sagradas del vestuario; demasiado sagradas para su gusto.
El propio Ramos declaró al finalizar el partido de Málaga que la suplencia de Casillas le sorprendía, "pero es el capitán y seguirá ahí". En ello confía el equipo y la afición, que en más de un partido ha coreado su nombre tras una parada de las consideradas milagrosas.
Sin embargo, Mourinho ya ha dejado claro a los suyos que no se casa con ninguno; que con él no hay nada ni nadie sagrado. Siente que para terminar con cualquier atisbo de rebelión en el vestuario en momentos deportivos difíciles debe cortar la cabeza que más sobresalga.
El entrenador no da pistas sobre si se quedará en el Madrid a partir del próximo junio o pedirá marcharse, en caso de que no lo despida el club. Con decisiones como la suplencia de Casillas parece estar firmando una hipoteca sobre su futuro, y el panorama actual no está precisamente para hipotecas.