Iker Casillas, mejor portero del año por quinta vez
- En la votación entre periodistas de los cinco continentes acumuló 224 puntos
- Supera a su colega más admirado: el italiano Gianluigi Buffon, que sumó 128
- El reconocimiento le llega en un momento delicado con su entrenador
Iker Casillas, capitán del Real Madrid y de la selección española, ha sido declarado por quinta vez mejor portero del año por la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol (IFFHS).
En la votación entre periodistas de los cinco continentes Casillas acumuló 224 puntos, con los que superó a su colega más admirado: el italiano Gianluigi Buffon (Juventus), que sumó 128.
El checo Petr Cech, guardameta del Chelsea inglés, fue tercero con 92; el alemán Manuel Neuer, del Bayern Múnich, cuarto con 85; el inglés John Hart, del Manchester City, quinto con 26; y el también español Víctor Valdés, del Barcelona, sexto con 15.
Casillas, con 31 años, logra este título por quinta vez consecutiva tras haber sido segundo, tercero y dos veces cuarto en este ránking entre 2003 y 2007.
De fuera vendrán que bueno te harán
El reconocimiento le llega en un momento delicado en su carrera después de ser suplente en el último partido de Liga que su equipo disputó en Málaga donde su entrenador buscó culpables por el mal arranque liguero de su equipo.
El primero en pagar los platos rotos fue Iker Casillas, viéndose relegado al banquillo en favor de Antonio Adán. El capitán blanco no era suplente por decisión técnica en Liga desde 2002, diez años antes.
A tenor de las filtraciones -más o menos interesadas- ya se sabía que la relación entre el técnico, José Mourinho, y el capitán, Iker Casillas, era tensa. Después de la suplencia de este, pueden saltar chispas.
El meta titular se presumía insustituible. En 2002, con Vicente del Bosque el frente del banquillo blanco, el mostoleño tuvo que luchar por el puesto con César Sánchez. Una lesión muscular de este y paradas de las milagrosas en la final de la 'Novena' de Casillas forjaron la leyenda.
Desde entonces nadie había osado cuestionar su titularidad por razones técnicas; hasta que llegó Mourinho. Al portugués no podía sentarle bien el tipo de madridismo que encarna Iker. 'Mou' es aguerrido, encarado con el rival, mientras que el capitán representa el lado amable, respetuoso con el contrario e incluso llegando a la amistad con el 'enemigo': el Barça.
Un miembro del eterno rival, Víctor Valdés, ha roto una lanza en favor de su compañero de selección deseando que el meta campeón del mundo y de Europa vuelva a estar bajo los palos.