El ciclismo francés considera "una farsa" el juicio de la Operación Puerto
- Así lo ha calificado el presidente de la Federación Francesa de Ciclismo (FFC)
- "Parece que las autoridades españolas intentan proteger a futbolistas, etc."
- La Guardia Civil garantiza el buen uso, conservación y traslado de las muestras
El presidente de la Federación Francesa de Ciclismo (FFC), David Lappartient, ha señalado que el juicio en España a la Operación Puerto contra una supuesta trama de dopaje es "una verdadera farsa" y que da la sensación de que las autoridades españolas intentan proteger a deportistas.
“Es una verdadera farsa, no hay otra palabra“
"¿A quién se protege? Uno de los acusados está dispuesto a dar los nombres y no se le preguntan. Es una verdadera farsa, no hay otra palabra. ¿Para qué hacer un juicio?", señaló Lappartient en una conferencia de prensa en la sede de la federación en Rosny-sous-Bois, a las afueras de París.
Lappartient tiene "la sensación de que las autoridades españolas intentan proteger a futbolistas, tenistas...", dijo. "Eso demuestra que los ciclistas no son los únicos", agregó el presidente de la FCC.
“Ha habido protecciones a muy alto nivel“
"Sin duda, ha habido protecciones a muy alto nivel, normalmente estatales. Espero que las bolsas de sangre puedan transferirse a la AMA (Agencia Mundial Antidopaje) para poder establecer vínculos en este asunto", añadió Lappartient.
Guardia Civil garantiza que actuó correctamente
Los agentes de la Guardia Civil que participaron en los registros de los pisos de Eufemiano Fuentes y en la intervención de las bolsas de sangre, han defendido a través de múltiples testimonios la garantía de uso, conservación y transporte de las mismas ante la juez que preside el juicio de la Operación Puerto.
Los agentes interrogados coincidieron en que los medicamentos y las bolsas de sangre las encontraron en neveras de uso doméstico, y en ellas no recordaron la existencia de que tuvieran un mecanismo que pudiera mantener la temperatura de las mismas en caso de interrupción eléctrica.
A pregunta de la fiscal, uno de los testigos explicó que las muestras requisadas en su intervención se llevaron al Servicio de Criminalística en cajas de poliespam, capaces de mantener la temperatura en la que se encuentran durante un tiempo. "Las muestras que llegaron congeladas las mantuvimos a unos -20 grados y a 4 grados las no congeladas. Allí las mantenemos hasta que las van solicitando", explicó. El testigo aseguró que en todo momento se siguió con el protocolo habitual "para mantener las muestras en perfectas condiciones".
Otro testigo, encargado de recibir las bolsas halladas en la calle Caídos de la División Azul, propiedad de los padres del médico Eufemiano Fuentes, explicó las medidas solicitadas para garantizar la cadena de transporte. "Nos pidieron cajas de poliespam con bolsas de hielo para trasladar las bolsas. Son cajas de un grosor de unos 3 centímetros. Recibí tres bolsas de plasma, que conservamos a 4 grados. Las guardamos así porque no sabíamos qué iban a hacer con ellas", explicó el agente.
A preguntas de Ignacio Arroyo, letrado de la defensa, que cuestionó sobre los medios técnicos para medir la temperatura de las muestras, el agente aseguró: "Sí, teníamos, pero no se medía la temperatura de las bolsas, solo se miraba que estuvieran congeladas. Teníamos sondas para medir la temperatura de las neveras. Para mí no era relevante medir las muestras para ver si fluctúa cinco grados, lo importante es que estuvieran congeladas", precisó.
Los agentes se apartaron poco de toda narración que no se ajustara a su función concreta dentro de los registros, traslado o envío de muestras.
Respecto a las muestras que se enviaron al laboratorio de Barcelona, el agente testigo señaló que "se hizo en dos días, bajo órdenes del instructor". "Seguimos el protocolo marcado por el laboratorio de Criminalística, siempre con las garantías necesarias, en neveras preparadas y con hielo", dijo.