Ricky Rubio da una exhibición de pases y buen juego para abrir el All Star

• Ricky puso la magia en los pases y Kenneth Faried puso las canastas
• Guiaron a su equipo a la victoria en el Partido de las Promesas (163-165)
• Rubio: "He disfrutado mucho, todo, porque se trataba de eso, de pasarlo bien"

Ricky Rubio entra a canasta pese a la oposición de Damian Lillard.

Ficha técnica:

163 - Equipo de Chuck (90+73): Rubio (5), Beal (12), Davis (11), Leonard (20), Faried (40) -cinco inicial-, Shved (12), Thompson (20), Thomas (18), Vucevic (15) y Knight (10). Entrenador: Mike Budenholzer.

135 - Equipo de Shaq (66+69): Lillard (18), Irving (32), Barnes (12), Parsons (13), Kidd-Gilchrist (8) -cinco inicial-, Walker (8), Zeller (4), Thompson (11), Waiters (23), Nicholson (6) y Drummond (-). Entrenador: David Fizdale.

El ala-pívot Kenneth Faried, de los Nuggets de Denver, surgió con su mejor inspiración encestadora y junto con el base español Ricky Rubio, de los Timberwolves de Minnesota, que puso la magia en los pases, guiaron al equipo de Chuck a la victoria por 163-135 ante el de Shaq en el Partido de las Promesas de la 62 edición del Fin de Semana de las Estrellas.

Faried fue una máquina de hacer puntos y concluyó el partido con un doble-doble de 40 tantos (18-22, 1-1, 3-3), 10 rebotes y dos asistencias, que le permitieron también ser nombrado Jugador Más Valioso (MVP) del partido.

"Me siento maravilloso. Es un gran sentimiento el saber que has ganado un premio al tener al lado a grandes jugadores a los que has superado en el lado positivo de competir y hacer que el baloncesto fuese un gran espectáculo", declaró Faried al concluir el partido. "Ganar el premio de MVP es todo un honor".

Faried, que anotó 19 puntos en la primera parte, tuvo en Rubio a su mejor pasador y con el que se entendió a la perfección, siendo la clave que abrió el marcador a favor del equipo de Chuck, al igual que los 14 que consiguió el base Isaiah Thomas, de los Kings de Sacramento, también un segundo año como Faried, que concluyó el partido con 18 tantos.

Rubio, como había prometido antes del partido, salió al campo del Toyota Center, de Houston, para divertirse y hacer que la gente lo pasase bien, algo que logró en plenitud. El jugador catalán, que salió de titular, disputó 16 minutos en los que anotó cinco puntos (2-2, 1-3, 0-2), pero repartió 10 asistencia, recuperó un balón y perdió otro.

Aunque Rubio fue el único jugador del equipo de Chuck que no superó la barrera de los 10 puntos, el resto de sus nueve compañeros tuvieron números de dos dígitos, el jugador de El Masnou se entendió a la perfección con Faried, Leonard y Tristan Thompson (Cleveland), estos dos últimos que aportaron 20 puntos cada uno.

Thompson logró un doble-doble al aportar 10 rebotes, mientras que Leonard también capturó siete balones bajo los aros, de los 42 que consiguió el equipo de Chuck por 28 que tuvo el de Shaq.

El pívot suizo Nikola Vucevic consiguió 15 puntos y cuatro rebotes, mientras que el base ruso novato Alexey Shved, compañero de Rubio, y el escolta Bradley Beal, de los Wizards de Washington, llegaron a los 12 tantos cada uno.

El entrenador asistente de los Spurs, Mike Budenholzer, que dirigió al equipo de Chuck, le ganó también en la estrategia del juego y en los cambios a David Fizdale, el asistente de los Heat de Miami, que trabajó con el de Shaq.

El base australiano Kyrie Irving, de los Cavaliers de Cleveland, que jugó con el equipo del Shaq, fue el mejor al aportar 32 puntos, seis asistencias y seis rebotes, pero esta vez no pudo darle la victoria como hizo el año pasado con el de Chuck (146-133), cuando anotó 34 tantos y ganó el premio de Jugador Más Valioso (MVP).

El escolta novato Dion Waiters, compañero de Irving con los Cavaliers, fue el segundo máximo encestador del equipo de Shaq tras anotar 23 puntos y el base de los Trail Blazers de Portland, Damian Lillard, llegó a los 18 y repartió cinco asistencias.

"He disfrutado todo el partido y hoy se trataba de eso"

El base español disfrutó al máximo del evento celebrado en el Toyota Center, de Houston (EEUU). "He disfrutado mucho, todo, porque se trataba de eso, de pasarlo bien y lo he conseguido", declaró Rubio al concluir el partido. "Además, me sentí más cómodo y sólo pienso en el futuro, y que todo va a bien con relación a mi lesión", dijo.

En cuanto a la gran labor que realizó su compañero de equipo Kenneth Faried, de los Nuggets de Denver, nombrado Jugador Más Valioso (MVP) después de anotar 40 puntos, y con el que se entendió a la perfección en los pases, Rubio dijo que le gustaría tenerlo de compañero en su equipo profesional. "Sí, es un ejemplo, cualquier rookie o jugador tendría que actuar con la misma garra que lo hace él cuando está en el campo y llegas a la liga", destacó Rubio. "Es la única manera de demostrar que quieres hacerte un nombre".

Rubio dijo que Faried tiene una garra especial, que lucha desde el primer día y es un jugador que pelea cada balón, inclusive en partidos en los que no hay nada en disputa.

El jugador de El Masnou reiteró que tiene más experiencia, conoce mucho mejor todo lo que sucede en la liga y de ahí que ahora ya pueda disfrutar cada partido. "La lesión me permitió tener tiempo para ver mucho baloncesto y me ayudó para aprender mucho, de ahí que cada vez me sienta más cómodo en todo lo que hago en el campo", agregó.