Hamilton confirma que Fuentes le trató con transfusiones, EPO y otras sustancias
- Hormona del crecimiento, testosterona e insulina, las otras sustancias
- El fallecido Alberto León le hizo una reinfusión en el Tour de 2002
"En el Tour 2004 mi orina se volvió negra después de una reinfusión", dice
El exciclista estadounidense Tyler Hamilton, citado como testigo en el juicio oral de la Operación Puerto, ha confirmado que trabajó durante tres años con Eufemiano Fuentes en los que el médico le trató con transfusiones, EPO, hormona de crecimiento, testosterona e insulina.
Hamilton, en declaración por videoconferencia desde Washington, ha asegurado que estuvo unas quince veces con Fuentes ya fuera para extracción o transfusión de sangre y que su código en las bolsas de sangre era 4142.
El exciclista ha relatado que "la peor reacción" que sufrió fue después de una reinfusión de sangre fue en 2004, durante el Tour de Francia, cuando pasados "35 o 40 minutos" su orina se volvió "de color negro".
El contacto con Fuentes
"Creo que la sangre no se había manejado de manera adecuada, que se había deteriorado. Lo supe porque unos 35 o 40 minutos después mi orina era de color negro", explicó durante su testimonio.
Además, ha desvelado que solo tomó insulina una vez porque le dieron sudores y taquicardias, que, en julio de 2004, sufrió fiebre tras una transfusión, y que incluso el fallecido exciclista Alberto León le hizo una reinfusión en el Tour 2002.
"El doctor Fuentes me ofrecía estos productos, en concreto EPO, insulina, testosterona, hormona de crecimiento...", precisó. Hamilton contó cómo se produjo el primer contacto con el médico canario.
"Hablamos por teléfono y acordamos reunirnos para conocernos. Iba a una carrera desde Girona a Valencia y nos reunimos en una zona de descanso de la carretera en enero de 2002", señaló.
El objeto de la reunión, comentó, "era planificar el futuro" y concretó que se trataba de hacer transfusiones y detallar los servicios que le prestaría en el futuro.
Hamilton, corredor del US Postal (95-01), CSC (2002-03), Phonak (2004), Tinkoff (2007) y Rock Racing (2008-09), dijo que cuando empezó el tratamiento no firmó ningún documento y que solo se sometió a una prueba de hematocrito.
A preguntas de la letrada de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), recordó cómo se produjo el primer encuentro con fines dopantes.
"El primer encuentro fue en Madrid, en un laboratorio del señor Merino Batres enfrente de un hotel. Solo estaba Eufemiano presente. La primera vez solo me sacó una bolsa de sangre, pero luego me sacó más", dijo.
Tres años de tratamiento
Durante los tres años que fue tratado por Eufemiano Fuentes corredor y médico se vieron en total "unas 15 veces" y en todas ellas "se realizaron extracciones o reinfusiones".
"Me dio un calendario con la programación de las carreras y otro para saber cuándo tenía que tomar las sustancias que mejoraban el rendimiento físico, y fue cuando me dio la EPO, marcada con un círculo, que dependiendo del color del mismo indicaba la cantidad.", dijo Hamilton, quien también incluyó entre las sustancias de consumo la insulina y la hormona de crecimiento.
Hamilton afirmó que no tomaba mucha hormona de crecimiento: "No seguía sus indicaciones respecto a esta sustancia, pero me acuerdo de los círculos de la EPO". El exciclista reconoció que alguna vez tuvo problemas físicos con el consumo de alguna de las sustancias recomendadas por Eufemiano Fuentes.
"La insulina solo la tomé una vez porque no me gustó cómo me sentó. Sudaba, las pulsaciones eran rápidas, me sentía extraño...", detalló. "Luego recibí una transfusión en julio de 2004 que me sentó muy mal, me puse enfermo", dijo también.
Según señaló en su testimonio, las transfusiones de sangre no solo se realizaban en la clínica de Merino Batres, sino en otros sitios como "apartamentos, pisos y habitaciones de hotel". A este último lugar Eufemiano se presentaba con la bolsa de sangre guardada "en una nevera portátil".
El excorredor reconoció que él mismo asumió el coste de los tratamientos de Fuentes, a quien pagó en efectivo de 25.000 a 30.000 euros al año desde 2002 hasta 2004, y que posteriormente esta cantidad subió hasta 50.000 euros por la utilización del sistema de congelación de la sangre, al que llamaban "Siberia".
"Me explicaron que yo y otros ciclistas teníamos que asumir el coste de este congelador. Dijo que tres o cuatro de nosotros pagaríamos el congelador. Que yo sepa trabajaba con seis o siete ciclistas en total", añadió.
Preguntado por la fecha y los motivos que le llevaron a poner fin a su relación con Fuentes, único de los acusados en el juicio con el que reconoció haber tenido una relación laboral -además del hematólogo José Luis Merino-, Hamilton explicó que fue a mediados de septiembre de 2004, después de dar positivo en la Vuelta a España de ese año por una transfusión.
"Me dijeron que tenía sangre de otra persona en mi organismo. Yo lo que tenía acordado eran autotransfusiones y siempre miraba para comprobar si era 4142", comentó en alusión al código que él mismo eligió para que se identificara la sangre que le extraían, antes de añadir: "O se había intervenido mi muestra, o me pusieron sangre de otro, o la prueba se hizo mal".
Declaración clave en el 'caso Armstrong'
Hamilton, en su declaración a la USADA para la investigación del caso Lance Armstrong, ya reconoció que al final de la temporada 2001, cuando firmó por el CSC, el director del equipo "rápidamente" le habló "del médico español Eufemiano Fuentes para hacer transfusiones de sangre".
"Fui a ver al doctor Fuentes a su oficina de Madrid la siguiente primavera. Fuentes me mintió sobre cuántos ciclistas trabajaban con él. Él me llevó a creer que no eran muchos. Trabajé con él durante 2002, 2003 y 2004 y me embarqué en un programa regular y sistemático de transfusiones de sangre", admitió.
También en su declaración a la USADA admitió que la primera vez que escuchó el término "correr a pan y agua" -sin sustancias que mejoren el rendimiento-, fue en España en 1997 y que corrió sin doparse los dos primeros años de su carrera como profesional hasta que ese año, después de la Vuelta a Valencia, el doctor Pedro Celaya le ofreció testosterona para ayudar a su recuperación.
Su testimonio a la agencia antidopaje de Estados Unidos también reflejó el momento en que se inyectó EPO por primera vez en ese año y que el siguiente Lance Armstrong se sumó al equipo, que desde 1999 tuvo director deportivo a Johan Bruyneel, que había sido corredor en el equipo ONCE.
Hamilton relató a la USADA cómo se inyectó EPO durante varios Tours con Armstrong, cómo le asistió el doctor italiano Michele Ferrari y cómo a partir del año 2000 empezaron a hacerse autotransfusiones, ya que no había controles para detectarlas.
También narró que en 2001 se trasladó a Girona junto a Armstrong, quien le confesó que en la Vuelta a Suiza de ese año había dado positivo por EPO. "El dijo que su gente había estado en contacto con la UCI, que iban a tener una reunión y que todo iba a salir bien, por lo que entendí que el positivo de Armstrong iba a ser ignorado por la UCI".