El Barça vence en Sevilla y el Caja Laboral sufre para llevarse el derbi vasco
- Xavi Pascual le gana el duelo de banquillos a Aito García Reneses (72-91)
- Caja Laboral sufre para llevarse el derbi ante Lagun Aro en el Buesa (88-80)
- El Valencia Basket asfixia con su defensa al Herbalife Gran Canaria (68-56)
- Kurz da oxígeno al Fuenlabrada frente al Blancos de Rueda Valladolid (84-74)
El Barcelona Regal se ha impuesto con facilidad en la cancha del Cajasol, que ha cosechado su tercera derrota consecutiva, en un encuentro en el que ha sobresalido el pívot australiano Nathan Jawai, dueño de ambas zonas y que rozó las dobles figuras (14 puntos y 9 rebotes).
Los primeros diez minutos estuvieron marcados por el gran acierto anotador del Barça, que encarnaron Oleson y Lorbek, frente a un equipo que no desmereció, sobre todo gracias a la aportación del portorriqueño Holland, pero cuyas opciones pasaban por propiciar un encuentro de anotación baja, en vista de que son el peor ataque de la Liga.
La defensa del equipo sevillano, enardecido por los ánimos de la grada, mejoró en el segundo cuarto y al término del cual el marcador se apretó (41-44) gracias también a los buenos minutos en ataque de Blakney, el base suplente del Cajasol, que anotó siete puntos casi consecutivos.
Un parcial de salida tras el descanso de 0-7 despegó al conjunto azulgrana pero dos triples consecutivos de Sastre y Blakney mantuvieron en contacto a los hombres de Aíto García Reneses, si bien la entrada del veterano Jasikevicius volvió a estirar la ventaja catalana en los últimos minutos del tercer periodo (55-68).
Sin algunos de sus titulares en pista, el equipo de Xavi Pascual se limitó a gestionar su renta en un último cuarto en el que se lució el joven pívot montenegrino Todorovic (9 puntos en seis minutos de juego) por parte visitante y Tomas Satoransky en el cuadro local, que embelleció su estadística en los minutos de la basura.
Caja Laboral sufre para llevarse el derbi ante Lagun Aro (88-80)
Caja Laboral ha cortado la racha de dos derrotas consecutivas con un partido de altibajos ante Lagun Aro, 88-80, en el derbi vasco del Buesa Arena. Lagun Aro sigue sin ganar en el coliseo baskonista donde ha caído en las seis ocasiones que ha jugado y deberá seguir peleando para escapar de la parte baja tras truncar en Vitoria la racha de tres triunfos seguidos con la que llegaba.
Lagun Aro arrancó más entonado gracias al acierto exterior de Díez y Finley y el trabajo coral de los de Sito Alonso, 7-19 minuto seis, sacó los colores a un Caja Laboral espeso en ataque jugando al ralentí y ausente de la cancha. Lampe y Nocioni, con cinco puntos en el tramo final, salieron al rescate para arreglar el marcador al cierre del primer cuarto, 19-23.
Un parcial de 22-4 en ocho minutos disparó al Caja Laboral, 44-31, ante un Lagun Aro que se colapsó cuando los vitorianos aplicaron una mayor intensidad defensiva sobre su aro. Sin embargo un aciago minuto final de los de Tabak, regalando ocho puntos a los donostiarras, estrechó la renta al descanso, 44-39.
Baskonia salió decidido a evitar nuevos sustos y pisó el acelerador para endosar doce puntos en cuatro minutos a un Lagun Aro que comenzó a dar síntomas de agotamiento y no poder seguir el ritmo de los vitorianos, 56-39. Paunic rompió la sequía anotadora de los de Sito Alonso, pero el Baskonia ya manejaba cómodas rentas carburando cada vez mejor en un duelo que derivó al intercambio de canastas sin que nada pudieran hacer los guipuzcoanos por frenarlo.
El último cuarto empezó con 16 puntos a favor de los locales, 73-57, pero las habituales desconexiones del Baskonia permitieron que Lagun Aro llegara a acercarse a solo diez puntos, 79-72 minuto 38, con un Ibekwe y Guille Rubio que se adueñaron del juego en la pintura para endosar un 6-15 a los vitorianos. Apareció Nocioni para redondear una jugada de tres puntos que puso fin al nerviosismo en el Buesa Arena y asegurar la victoria.
El Valencia asfixia al Gran Canaria (68-56)
El Valencia Basket asfixió con su defensa al Herbalife Gran Canaria, en la jornada 26 de la Liga Endesa, y sumó una victoria que le permite despegarse del equipo insular en la lucha por la cuarta plaza de la clasificación. El equipo canario dominó los primeros minutos del encuentro pero los locales lograron activar su defensa, adelantaron su línea de presión y ahogaron progresivamente a su rival hasta maniatarle y cerrar su triunfo en la segunda parte, gracias a las canastas en transición que logró tras sus muchas recuperaciones.
El Gran Canaria saltó a la pista liberado. Los exteriores de Pedro Martínez, con especial mención para Brad Newley en su regreso a la Fonteta, superaban con descaro a sus defensores en el uno contra uno, lo que propició canastas sencillas cerca del aro, bien de los penetradores o bien de los interiores (6-17, minuto 6).
Un par de triples de Thomas Kelati sellaron la remontada y obligaron a abrirse a la defensa visitante, lo que facilitó las penetraciones del Valencia, multiplicó las faltas personales insulares y permitió a los locales, que alimentaron su marcador desde la línea de tiros libres, llegar al descanso con el choque controlado (39-32, minuto 20).
El Valencia regresó a la pista dispuesto a no complicarse el partido. Adelantó su línea defensiva y ahogó por completó los ataques de un Gran Canaria que pagó su falta de agresividad en la circulación con cinco pérdidas de balón con sus correspondientes canastas fáciles para los locales (55-45, minuto. 30). El equipo insular no logró superar esa primera línea de presión valenciana en lo que quedaba de partido y aunque unos minutos de inspiración de Spencer Nelson sostuvieron a Gran Canaria, los robos de Stefan Markovic y Justin Doellman permitieron al Valencia cerrar sin apuros su victoria.
Fuenlabrada toma oxígeno a costa del Blancos de Rueda (84-74)
Necesitaba angustiosamente un triunfo el Mad-Croc Fuenlabrada después de encadenar dos derrotas consecutivas que lo situaron en la zona de descenso. Y lo ha conseguido ante el Blancos de Rueda Valladolid (84-74), en un encuentro en el que brilló especialmente el ala-pívot estadounidense Robert Kurz. Fiel a lo repetido por el técnico fuenlabreño, Trifon Poch, en el transcurso de la semana, entró el equipo naranja muy motivado en el partido, con una marcha más que el Valladolid, que no encontraba la forma de frenar las embestidas de los madrileños.
El parcial de 11-2 en los minutos iniciales daba idea del tipo de partido que tenía en mente el Fuenlabrada: agresivo en ataque y aguerrido en defensa. Los de Poch volvieron a demostrar una gran fortaleza en el tiro exterior (4 de 7 en los primeros diez minutos); y fue un magistral triple de Kurz en el último segundo lo que cerró el cuarto inicial, con una ventaja de once puntos para los madrileños (26-15, m.10).
Tras la reanudación, los locales no pudieron mantener el fuerte ritmo impuesto al comienzo y se mostraron muy erráticos desde la línea de 6,25 (0 de 5).
La gran superioridad reboteadora de los naranjas (20 del Fuenlabrada por 12 del Valladolid) y las segundas jugadas permitieron a los madrileños mantener la diferencia el marcador, que se acortó hasta los diez puntos (40-30, m.20).
El descanso pareció despertar a ambos equipos y a un Mou Sené que, por fin, pareció dar muestras de la calidad que atesora. Una gran bandeja y un espectacular tapón levantaron a los aficionados que llenaban el Fernando Martín.
La igualdad y el intercambio de canastas entre ambos conjuntos fue la tónica dominante en el tercer cuarto; en unos diez minutos en los que el alero ucraniano Sergii Gladyr dio el susto al retirarse cojeando.
Pese a las embestidas de los pucelanos, el Fuenlabrada respondió a cada punto y ambos equipos enfilaron el último cuarto con un 58-49 en el electrónico.
Los nueve puntos de diferencia no eran garantía de éxito y el miedo al último cuarto se palpaba entre los aficionados naranjas, que conocían de sobra como su equipo se desinflaba en los instantes finales de los encuentros.
Si bien el Valladolid se acercó hasta los cuatro puntos, los de Poch respondieron con dos triples consecutivos, obra de Cortaberría y Colom, que restauraron la diferencia entre los dos equipos.
En un encuentro muy completo por parte de los de Poch, con cinco jugadores superando la decena de puntos de valoración, brilló por encima del resto el estadounidense Robert Kurz. El ala-pívot, cuajó un encuentro excelente, con 19 puntos, 8 rebotes, 3 asistencias y 29 de valoración.
La victoria de los madrileños, unida a la derrota del Lagun Aro, rival directo por evitar el descenso, frente al Caja Laboral, da un balón de oxígeno a los de Poch, que se despegan ligeramente del descenso.