Madrid y Barça pasan a semifinales, pero pasan apuros sin Cristiano ni Messi

• Los representantes españoles se clasifican tras sufrir en la vuelta de cuartos
• Ambos evidencian la dependencia de sus máximos goleadores
• Esperan en el bombo del viernes los dos mejores equipos de la Liga alemana
• Sorteo de semifinales de Champions en directo, viernes a las 12:00 horas en Teledeporte y RTVE.es

Cristiano Ronaldo, más líder del Madrid

Dos de tres. Real Madrid y FC Barcelona se clasifican a semifinales de la Champions League. No pudo el Málaga, que cayó en el tiempo añadido frente al Borussia Dortmund. Los campeones de la pasada Liga alemana estarán en el bombo del viernes junto a sus sucesores, el Bayern de Múnich. Dos españoles y dos teutones animan las casas de apuestas. [Sorteo de semifinales de la Champions League en directo, viernes a las 12:00 horas en Teledeporte y RTVE.es]

Los dos 'clásicos' de la Liga española pasan, sí, pero con apuros. No dejó una buena impresión el Madrid en su partido de vuelta contra el Galatasaray en Estambul (3-2), como tampoco el Barça en casa frente al Paris Saint-Germain (1-1).

Ambos partían con resultados favorables de los partidos de ida, más el Madrid, pero los dos dejaron una pobre impresión en sus respectivos encuentros de vuelta.

Las cosas no comenzaron mal para los blancos, que se adelantaron en el marcador con gol de Cristiano Ronaldo, pero en la segunda parte vieron cómo el equipo turco marcaba tres goles en apenas 15 minutos.

La remontada del 'Galata' seguía antojándose heroica, pero el ambiente del Turk Telekom (antes llamado Ali Sami Yen) hacía presagiar que los otomanos iban a dejarse la piel buscando la gesta.

Mourinho había dicho en la previa que no se iría contento perdiendo por 2-0. El segundo gol de 'CR7', el que mataba definitivamente las esperanzas del Galatasaray, privó a los medios de comunicación de una regañína antológica de 'The Special One'.

El Barça también partía con ventaja gracias al empate con goles cosechado en París. A priori no debería tener complicaciones el considerado mejor equipo del mundo frente a un rival teóricamente inferior.

Pero el PSG aprovechó por igual sus propias virtudes -un contragolpe eficaz- y las carencias del conjunto azulgrana -los despistes defensivos-. El gol de Pastore hizo saltar las alarmas y obligó a Tito Vilanova a forzar con Messi, que había visto la primera hora de partido desde el banquillo.

Hasta su salida, el resto del equipo había mostrado sus virtudes con el balón en los pies, pero al mismo tiempo se veía incapaz de imprimir velocidad a sus jugadas. Para colmo de males, hacía demasiadas concesiones a los rápidos atacantes galos, merced a sus errores en defensa.

El Barça tiene dos caras, por lo menos esta temporada, en función de si maneja el balón de centro del campo hacia adelante o hacia atrás. Una para bien y otra para mal. Iniesta había hablado la víspera de "Messidependencia". No era su intención sacar los colores a los blaugrana, pero resultó muy esclarecedor.

'Cristianodependencia' y 'Messidependencia'

Llegados a este punto hay un paralelismo entre los dos equipos españoles en lo que a la dependencia de sus estrellas se refiere. Tanto Madrid como Barça han mostrado en cuartos que sin sus máximos goleadores pasan muchas dificultades.

Es algo más que los goles, que también. Es la sensación que dejan los demás futbolistas de ir una marcha por debajo de ellos. Cuando no están ellos sus compañeros se muestra lentos, sin ideas, predecibles.

Cristiano Ronaldo hizo tres goles en los dos partidos contra el Galatasaray. Messi anotó uno de los tres de su equipo, pero su salida fue determinante para que Pedro Rodríguez salvara al Barça cuando estaba contra las cuerdas en el Camp Nou. Muy mal tuvo que ver el panorama Vilanova para esperar hasta el minuto 63 para dar entrada al argentino. Y muy delicado tiene que estar su bíceps femoral para que esperara hasta ese momento para sacarlo.

El bombo puede deparar un doble derbi, o bien puede emparejar a españoles contra alemanes en sendas eliminatorias. Si es así, tanto merengues como culés deberían cruzar los dedos y rezar todo lo que sepan para que no se rompan sus delanteros estrella.

Bayern y Borussia, sobre todo los primeros, han demostrado ser más solventes como colectivo. Eso debería preocupar a Vilanova y Mourinho.