España da una clase magistral de fútbol a Uruguay en su debut en la Copa Confederaciones
- La Roja sentencia el partido en la primera parte con goles de Pedro y Soldado
- Uruguay, desbordada desde el primer minuto, solo pudo marcar en el 87'
- España se las verá el jueves a las 21:00h. con la débil Tahití en Río de Janeiro
- Todos los datos y estadísticas del España 2-1 Uruguay
Ficha técnica:
2 - España: Casillas; Arbeloa, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Busquets, Xavi (Javi Martínez, m.77); Iniesta, Cesc (Cazorla, m.65), Pedro (Mata, m.81); y Soldado.
1 - Uruguay: Muslera; Maxi Pereira, Lugano, Godín, Martín Cáceres; Diego Pérez (Forlán, m.69), Gargano (Lodeiro, m.63), Gastón Ramírez (Álvaro González, m.46), Cebolla Rodriguez; Luis Suárez y Cavani.
Goles:
1-0, m.20: Pedro.
2-0, m.32: Soldado.
2-1, m.88: Luis Suárez.
Si a alguien le quedaba alguna duda, que ya no la tenga. A España no se le puede medir por los amistosos. Cuando hay que jugar, juega... y lo hace además mejor que nadie. Esta vez ha sido Uruguay el equipo que ha tenido que sufrir y caer derrotado ante la Roja en una nueva exhibición de los chicos de Vicente del Bosque, esta vez ha tenido lugar en Brasil y en el debut en la Copa Confederaciones. [Todos los datos y estadísticas del España 2-1 Uruguay]
La alineación del técnico salmantino sorprendió
. No ya solo por la inclusión de Casillas en la puerta o Soldado en la delantera, los sorprendente era ver jugar a la España de Del Bosque sin el doble pivote en el centro del campo.
Sin Xabi Alonso, Busquets tenía que desempeñar la misma labor que hace en el Barça. Recordaba a la España que venció en la Eurocopa de 2008 con Marcos Senna como único centrocampista de corte defensivo.
A pesar de la variación táctica, la Roja no cambia su estilo. Esas ganas de dominar el partido se han vivido en Recife de manera exponencial en los primeros minutos de partido. Uruguay estaba desbordada y en las gradas se veían bocas abiertas y se escuchaban ¡olés! Todo esto en Brasil, el país más futbolero del mundo que se echará a llorar cada vez que tenga que comparar a esta España con el Brasil que ganó 3-0 a Japón. Parecen dos deportes diferentes.
El peligro llegaba por la derecha, por el centro y, sobre todo, por la izquierda cuando Pedro e Iniesta se asociaban con Jordi Alba. Todo se cocinaba para que Soldado llegara con los cuchillos luego pero el primer gol llegó en una jugada de carambola.
Corría el minuto 19 cuando Pedro cazó en la frontal un despeje charrúa en la defensa de un córner. Su disparo tocó en Lugano e hizo inútil la estirada de Muslera. Fue de rebote sí pero era más que merecido después del dominio rotundo de los de Del Bosque que habían visto ocho minutos antes como el palo impedía el gol de un superlativo Cesc Fábregas.
Llovía en Recife y llovía especialmente sobre la moral de los jugadores uruguayos. Luis Suárez y Cavani nunca habían defendido tanto como durante los treinta primeros minutos. La única que olieron fue un remate de cabeza del segundo a centro del primero en el 28’ que atajó sin problemas Casillas. Su única intervención en la primera parte.
Tanto dominio acabó por traducirse en el segundo gol, esta vez un gol de categoría, en el minuto 31. Pase antológico de Cesc que dejaba a Soldado solo ante Muslera en la frontal del área. Simplemente imparable el cañonazo que soltó el valenciano.
Los uruguayos no lograban entrar en el partido ni tratando de cambiar la inercia a fuerza de faltas y protestas al arbitro. Sonó el silbato y el descanso llegó como el párroco que visita a los condenados a muerte.
La segunda parte no pasará a la historia
No tuvo que ser fácil para Tabarez arengar a los suyos ni tampoco el escuchar los silbidos del público ante la falta de ambición del equipo charrúa a la hora de intentar robar el balón a España.
Del Bosque, que se convertía gracias a este partido en el primer seleccionador español que ha dirigido a la Roja en cuatro grandes torneos, introdujo sus cambios (Cazorla, Javi Martínez y Mata) pero el partido no varió. Misma tónica en la posesión pero ahora la Roja no necesitaba buscar el área rival, especialmente cuando la propia no la pisan nunca.
Hoy volvía Casillas pero volvió a una alineación porque lo que es jugar… no tuvo que jugar. La única que tuvo que parar fue un tiro de falta de Luis Suárez en el minuto 87 pero no la atajó.
El 2-1 podía hacer pensar que España sufriría pero tampoco fue para tanto el arreón final de los uruguayos. A pensar ya en Tahití.