Carlo Ancelotti, el entrenador que susurraba a los futbolistas

• El nuevo entrenador del Real Madrid es un hombre de carácter dialogante
• Con el Milan logró dos Copas de Europa entre las temporadas 2001 y 2009
• Títulos de Liga con Milan, Chelsea y PSG, en su carrera de 18 años de técnico
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El entrenador italiano, Carlo Ancelotti.

Carlo Ancelotti, el nuevo entrenador del Real Madrid, es un hombre de afable, tímido en lo personal, al decir de quienes lo conocen, y dialogante con los jugadores de los equipos que dirige. El italiano tiene un pasado como futbolista que traslada a su experiencia en los banquillos, donde ha conocido dos veces el éxito en la Liga de Campeones en su dilatada carrera de 18 años como entrenador.

En lo deportivo, Ancelotti fue un reputado futbolista, inteligente, de habilidad técnica y 26 veces internacional. Jugó de medio volante en la mejor época del Milan de Arrigo Sacchi, con el que hizo dos tripletes consecutivos en las temporada 1988/89 y 1989/90, en las que triunfó en la Copa de Europa, Supercopa de Europa, Copa Intercontinental; además de ganar dos veces la Liga italiana (años 88 y 92).

Sin embargo, con ser un alumno aventajado de Sacchi, tal vez fue su entrenador en el Roma, Nils Liedholm, el que dejó más huella en el joven 'Carletto'. Con el sueco estuvo en sus ocho temporadas en el equipo romano.

Liedholm y Sacchi, sus maestros

Como entrenador, Ancelotti se impregnó de la sabiduría de Sacchi y Liedholm, así como de su forma de conducir grupos humanos, a lo que añadió su impronta personal, siempre sin olvidar el futbolista que lleva dentro.

Tampoco olvida Carlo su humilde origen, de padres campesinos. “Si no hubiese sido por el sudor de mi mamá y mi papá yo habría sido un cualquiera”, le gusta recordar a este hombre al que se le aprecian también los rasgos de ser una persona con sentido del humor y de difícil enfado.

Debutó en los banquillos en el humilde Reggiana en 1995, y lo ascendió a Primera. Su paso por el Parma fue discreto y por el Juventus fue un calvario. En el equipo turinés solo obtuvo la Copa Intertoto de 1999. Sin embargo, la afición de 'la Vecchia Signora' nunca olvidó ni perdonó su pasado en Parma y en Roma. A pesar de ello ganó el título de entrenador del año de la serie A en la campaña 2000/01.

En el Milan, lo mejor

Así que Ancelotti volvió al San Siro de sus grandes éxitos. En el Milan pasó ocho temporadas que lo llevaron a la élite de los entrenadores europeos. Entre 2001 y 2009 ganó galones, aunque en la competición nacional solo destacan la Liga y la Copa del año 2003.

En el ámbito internacional alcanzó el éxito en dos ediciones de la Liga de Campeones, temporadas 2002/03 y 2006/07; dos Supercopas de Europa, en los mismos años; y en la 2006/07 completó el triplete con el Mundial de clubes.

En esta época desarrolló las mejores virtudes técnicas que destacan muchos de los jugadores que ha tenido: el orden táctico, el gusto por el doble pivote para cerrar el mediocampo, el gusto por el toque de balón y salir jugando desde atrás, además de no dar por perdidos los balones nunca.

El Ancelotti de los grandes proyectos

La ejecutoria de Ancelotti llamó la atención del multimillonario Abramovich, que requirió sus servicios para el 'mega- proyecto' del Chelsea. Carlo no defraudó en su llegada y logró el primer doblete de la historia del club londinense: Premier y FA Cup en la sesión 2009/10.

Sin embargo, la siguiente campaña fue un desastre para un Chelsea que se quedó vació de títulos. La situación provocó su salida hacia el Paris Saint- Germain, otro club con multimillonario dueño y grandes ambiciones.

El paso de Ancelotti por el PSG aportó al club su primer campeonato en la liga francesa, después de nueve años de sequía; además de haber devuelto al conjunto a la 'clase noble' del fútbol europeo, ya que alcanzaron los cuartos de final de la pasada Liga de Campeones, en la que los eliminó el FC Barcelona.

A partir de ahora Ancelotti seguirá como rival del Barça, de manera aún más encarnizada, desde el banquillo de un Real Madrid, que ha buscado para suceder a Mourinho a una persona con un carácter muy diferente al del portugués.