Omega borda el esprín y Cavendish se estrena en este Tour de Francia
- El británico ha sido el más rápido en la llegada masiva a la ciudad de Marsella
- La general no ha sufrido cambios y Simon Gerrans continúa de amarillo
- En un final nervioso y con caída, los españoles han salvado bien el día
Si dejan que su equipo le prepare el esprín, 'Cav' nunca falla. El ciclista británico del Omega Pharma, Mark Cavendish, se ha impuesto en la quinta etapa del Tour de Francia -la número 24 de su carrera en la Grande Boucle- en el esprín final por las calles de Marsella.
Segundo ha sido el noruego Edvald Boasson Hagen (Sky) y tercero Peter Sagan (Cannondale). El australiano Simon Gerrans (Orica) mantiene una jornada más el maillot de líder.
La quinta etapa ha estado protagonizada por la fuga exótica compuesta por el único japonés del pelotón, Yukiya Arashiro (Europcar), y el ciclista negro del mismo equipo, Kévin Reza. Además estaban en la fuga el francés Romain Sicard (Euskaltel), Alexey Lutsenko (Astana), Thomas de Gendt (Vacansoleil) y Anthony Delaplace (Sojasun). La escapada se formó nada más lanzarse la etapa en Cagnes-sur-Mer y llegó a contar con casi 13 minutos de ventaja cuando se habían recorrido 37 kilómetros de camino a la meta de Marsella, situada a 228,5.
La incertidumbre de si la fuga culminaría con éxito no se resolvió hasta los últimos kilómetros. Al Orica Green Edge solo le preocupaba conservar el maillot amarillo para Simon Gerrans y eso estaba asegurado con bajar la ventaja de los fugados a menos de 3’42’’ (la desventaja del japonés Yukiya Arashiro, mejor colocado en la general de los fugados).
Sin embargo los australianos no bajaron el pistón y no bajaron el ritmo ni cedieron el peso de la caza a equipos como el Omega (para Cavendish) o el Argos (para Degenkolb).
A falta de 20 kilómetros para llegar a Marsella, la ventaja era de dos minutos y el Cannondale y el Argos se pusieron al frente para atravesar el Col de la Gineste, puerto no puntuable pero con rampas de hasta el 6%.
Tras pasar la cota, se vivió una montonera por una caída. En ella se vieron envueltos corredores como Christian Vande Velde (Garmin), Voeckler (Europcar) o Kittel (Argos). Afortunadamente no hubo que lamentar lesiones destacables.
Tras la caída, el ritmo del Omega condenó a los escapados, en apenas tres kilómetros se bajó la ventaja de los de adelante a menos de medio minuto. El fin de la aventura tuvo lugar bajo la pancarta de los cuatro kilómetros, ya en las calles de Marsella.
En el esprín final, Omega y Lotto hicieron cada uno su trabajo y se llegó a la última recta con Cavendish tercero por detrás de dos de sus compañeros. En esa tesitura es casi imposible batir al de la Isla de Man que finalmente levantó los brazos y suma así su victoria número 40 en grandes vueltas.
Este jueves se disputa la sexta etapa, de 176,5 kilómetros entre Aix-en-Provence y Montpellier, con un único puerto, el Col de la Vayede, puntuable de cuarta categoría, en el ecuador de otra jornada en la que el guión apunta a una nueva volatta en la que Cavendish podría añadir una muesca más a su exitoso currículo si el viento de costado no se erige en el protagonista.