El Barcelona gana la Supercopa de balonmano al Naturhouse
- El equipo azulgrana no da opciones (40-31) al conjunto riojano
- Sarmiento, Karabatic y Víctor Tomás, destacados en el Barcelona
Ficha técnica:
40- F.C Barcelona (19+21): Saric, Noddesbo (2), Juanín García (4), Víctor Tomás (6), Morros (1), Karabatic (6), Lazarov (7), Sarmiento (5), Ariño (-), Gurbindo (2), Saubich (1), Stranovsky (-), Sorhaindo (3), Entrerríos (1) y Rutenka (2,1p).
31- Naturhouse La Rioja (12+19): Jorge Martínez (Aguinagalde, ps), Malasinskas (4), Arrieta (1), Luis Felipe Jiménez (-), Garabaya (2), Pedro Rodríguez (7,4p), Capote (1), Thiagus (5), Velasco (3), Ángel Fernández (-), Thiagus (6), Paván (6) y Romero (2).
Parcial cada cinco minutos: 3-2, 6-4, 11-5, 14-8, 17-10 y 19-12 (descanso); 23-15, 26-17, 27-19, 31-24, 36-27 y 40-31 (final).
Árbitros: Óscar Raluy López y Ángel Sabroso Ramírez(Federación canaria). Excluyeron dos minutos a Viran Morros (min.21), del Barcelona, y a Capote (min.28) y Garabaya (min.39), del Naturhouse.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la Supercopa de España, disputado en el pabellón Pisuerga de Valladolid ante unos 3.000 espectadores.
El Barcelona de balonmano sumó su segundo título de la temporada -el primero en el ámbito nacional- al ganar (40-31) la Supercopa, tras ofrecer un recital de potencial ofensivo y defensivo, ante un luchador Naturhouse que, aunque nunca tuvo opciones, no bajó los brazos y buscó dar el cien por cien.
El Barça salió dispuesto a no hacer concesiones a un Naturhouse que planteó una seria defensa desde el inicio para poder aguantar los envites de la potente primera línea azulgrana, comandada en los primeros compases por Sarmiento, muy organizado en la dirección del juego, y por Víctor Tomás, que impuso su rapidez desde el extremo.
Pero su esfuerzo cayó en saco roto ante la calidad de los jugadores blaugranas, que no perdonaron ni una ocasión y bombardearon sin piedad la meta de Jorge Martínez, que pronto dejó su puesto a Aguinagalde en busca de mayor acierto, lo que tampoco impidió que los catalanes fueran incrementando la renta.
El Barcelona se mostró mucho más compenetrado que el cuadro riojano y con más ritmo competitivo, fruto de su paso por la exigente Superglobe, de ahí que apenas encontrara obstáculos para dominar totalmente el marcador (16-8), merced a su intensa defensa, bien culminada en Saric.
El Naturhouse ponía todo su empeño y echó mano de coraje y casta para intentar plantar cara al vigente campeón de la Supercopa, pero sin demasiado éxito, ya que su defensa no impedía frenar a los lanzadores catalanes y su ataque se mostraba impotente para superar la férrea defensa azulgrana, por lo que se llegó al descanso con un contundente 19-12.
Tras la reanudación, ninguno de los dos equipos bajó los brazos, ni el Barcelona a pesar de su importante ventaja, ni el Naturhouse que, si bien llegó a ir diez goles por debajo en el marcador (26-16), apretó los dientes en defensa y consiguió recortar diferencias (29-23).
La efectividad de Gurutz Aguinagalde en la meta de los riojanos permitió ese acercamiento a un Barcelona que recuperó a la mayoría de su siete titular, comandado por Karabatic, para volver a ofrecer su mejor versión y amarrar un nuevo título de Supercopa -el decimosexto-, el primero de esta temporada en España.