El difícil futuro del deporte español sin los Juegos Olímpicos de Madrid 2020
- España albergará los Mundiales de ciclismo y de baloncesto en menos de un año
- Mundiales de Vela y Tiro y Juegos Mediaterráneos, en los próximos cuatro años
- "Hay que sentarse y pensar dónde queremos ir", dice Alejandro Blanco
- Vota: ¿Debe presentar Madrid una nueva candidatura olimpica?
La eliminación de Madrid en su afán de organizar los Juegos Olímpicos de 2020 abre un periodo de incertidumbre para el deporte español, en especial para el minoritario. Sin el abrigo del respaldo del Comité Olímpico Internacional y al socaire de la cada vez mayor falta de recursos económicos, los deportistas deberán hacer gala del espíritu de superación y España seguir haciendo frente a los compromisos organizativos adquiridos.
El COI no quiso 'iluminar el futuro', como rezaba el lema de la candidatura madrileña y, aunque Rajoy dijo: "Desde el Gobierno seguiremos apoyando, más si cabe, al deporte español", las palabras del presidente sonaron más a palmada en la espalda en un momento de desolación, en el que a Madrid no le salieron las cuentas.
En los últimos años, las subvenciones al deporte han bajado en torno al 60 por ciento, con un plan ADO de apoyo a los deportistas cada vez más exigente. El momento es especialmente duro para esos deportes que no miman la fama y los patrocinadores, a los que la Ley de Mecenazgo no acaba de llegar. La sombra de la emigración para los deportistas es cada vez más alargada.
El desencanto de los deportistas
Rafa Nadal declaró tras conocer la noticia que uno trabaja "con un objetivo y una ilusión", y por eso "cuando te la van quitando tantas veces, todos somos humanos y la ilusión se va perdiendo en el camino", tras lo cual insistió que queda "seguir intentándolo o darse un periodo de descanso".
El tenista, que recordó el momento "complicado" que atraviesa España, echó en falta mayor "sensibilidad" de parte del COI por todo el esfuerzo que hizo Madrid en estos años para cumplir su sueño de ser ciudad olímpica.
Muchos fueron los deportistas olímpicos que expresaron su decepción. El excapitán de la selección española de balonmano, José Javier Hombrados, dejó caer su tristeza: "Una pena, había mucho esfuerzo detrás. En cualquier caso el deporte español (no fútbol) necesita ayuda".
El piragüista Saúl Craviotto reconoció haberse "quedado de piedra" y añadió: "No me esperaba que fuera la primera eliminada. Qué bajón...". También la regatista Marina Alabau: "Estoy muy triste por ver la eliminación de Madrid 2020. Se ha acabado mi sueño".
En ese sentido habló la también regatista Blanca Manchón: "La adjudicación de los Juegos a Madrid hubiera sido una inyección para seguir viviendo". Y Nicolás García, medallista en taekwondo, expresó si tristeza y esperanza: "A nosotros nos toca seguir entrenando duro a diario y trayendo alegrías para todos los españoles, es la mejor forma de agradecer su apoyo".
Pero ya que la cosa va de lemas, es bueno recordar el de Ander Mirambell: "Si está permitido caerse, es obligatorio levantarse", dice el piloto olímpico español de skeleton, acostumbrado a caídas y reveses. Así que el deporte nacional debe buscar alicientes para seguir creciendo, volcarse en las competiciones que tiene que acoger y mantenerse como referente en la organización de pruebas.
Nuevos retos y tiempo de reflexión
España acogerá en menos de doce meses las citas mundiales de Ciclismo en Ponferrada y el campeonato del mundo de baloncesto, cuya última edición organizó precisamente Turquía, la otra derrotada en la aciaga noche del sábado.
En 2014 están previstas otras dos citas importantes en nuestro país, los Mundiales de Vela en Santander y los de Tiro en Granada, ciudad que un año después será escenario de la Universiada de Invierno. Y en 2017, Tarragona se convertirá en el escenario de los Juegos del Mediterráneo.
Señaló Javier Gómez Noya, subcampeón olímpico de triatlón, con acierto: "Juegos Olímpicos seguirá habiendo y, aunque ha sido una pena que no eligieran a Madrid, los deportistas tenemos que seguir trabajando igual, sean donde sean".
El deporte español debe levantarse de nuevo, incluso "con un ERE encima", como lamentaron algunos deportistas, pero con otra meta olímpica en el horizonte para conseguir que los Juegos de Invierno se celebren en Barcelona en 2022.
La candidatura catalana ya dio sus primeros pasos hace tiempo y el alcalde de Barcelona, Xavier Trías, ratificó el pasado junio la decisión de su ciudad de entrar en esa pelea olímpica, en la que las decisiones de los miembros del COI son inexplicables.
La derrota de la candidatura olímpica de Madrid deja a Barcelona como posible próximo proyecto del olimpismo español. En este sentido, preguntado en Catalunya Radio, sobre si la elección de Madrid hubiese perjudicado a las aspiraciones de Barcelona para acoger en 2022 los JJOO de invierno, Trias ha contestado: "sí, esto es verdad, si nos hubiésemos encontrado con una Madrid organizando los JJOO de 2020, nosotros nos tendríamos que haber replanteado los JJOO (de invierno) de 2022 y tendríamos que haberlos pasado para el 2026 o 2030".
“La decisión de si optamos a 2024 es dentro de dos años“
Para los Juegos de verano, Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español y de la fallida candidatura madrileña, lo dijo en Buenos Aires: "El momento para tomar la decisión de si optamos a 2024 es dentro de dos años, como mínimo (...) Hay que sentarse y pensar dónde queremos ir", dijo Blanco.
No obstante, tan solo un día después del gran golpe, la Confederación de Comercio de Madrid (COCEM) ha reclamado al Ayuntamiento de la capital española que continúe trabajando en el sueño de convertirse en sede olímpica y ponga ya en marcha la candidatura para organizar los juegos de 2024.
Apretando los dientes para superar el varapalo, tiempo habrá para reflexionar sobre las cosas que se han hecho mal esta ocasión, qué y quiénes deben desaparecer de la escena deportiva y pensarse si Madrid debe volver a presentarse.