La selección española, en la corte de Obiang

• La campeona del mundo jugará por primera vez en la excolonia española
• El Gobierno de Guinea Ecuatorial califica de "histórica" la visita
• Abundan las críticas de opositores y defensores de los derechos humanos
• Guinea Ecuatorial - España en vivo, este sábado a las 22:00h. en RTVE.es

La selección española, en la corte de Obiang

Cinco millones de euros. Es la cifra que los jugadores de la selección de fútbol de Guinea Ecuatorial se embolsarán si este sábado consiguen derrotar a España, que visita Malabo en una cita amistosa calificada de "histórica" por el Gobierno ecuatoguineano, de "sucio juego propagandístico de Obiang" por parte de la oposición y de agradecimiento al pueblo africano por la Federación Española de Fútbol (RFEF).

Tres visiones diferentes para un partido que dará más que hablar por todo lo que le rodea que por el mero espectáculo deportivo en un choque que enfrenta al líder del ránking FIFA y a la selección número 119 del mundo.

Será la primera vez que la selección juegue un partido en la que fuera colonia española, y la primera en que lo haga una campeona del mundo. El hecho de disputarse en un país que lleva años sumido en una dictadura y destacado entre los países más corruptos del planeta, según Transparencia Internacional, no parece un problema para el fútbol, que vuelve a desmarcarse de la política a pesar de las críticas.

Guinea Ecuatorial, uno de los paises con mayor renta per cápita de África, de unos 16.000 dólares según el FMI, y uno de los más desiguales, según el último informe de Human Rights Watch, no pagará un euro por la disputa del partido, según la RFEF, a pesar del elevado caché de España desde que luce una estrella en su pecho. Gesto de buena voluntad con el fútbol africano el de la selección española, cuya derrota se paga a precio de oro en un país en el que la riqueza apenas sale de un elitista 5% de la población.

La desorbitada prima del Gobierno ecuatoguineano por el triunfo en un partido amistoso, junto con los 50.000 euros por gol que ha prometido el vicepresidente segundo Nguema Obiang, son solo una pincelada de cómo se reparte la riqueza en el pequeño país africano.

El espectacular crecimiento económico de Guinea Ecuatorial en los últimos años gracias al petróleo apenas lo ha notado la población, que malvive alejada de los excesos del poder en el estado número 136 dentro del Índice de Desarrollo Humano, con una esperanza de vida de 50 años y en situación de extrema pobreza.

Relaciones deportivas

Así es el país que visita la 'Roja' este sábado. Un país que presume de un partido con el que, según el gobierno de Guinea Ecuatorial, "se reflejan las excelentes relaciones culturales, de amistad y de colaboración" con España, desde donde las declaraciones se ciñen al fútbol. La RFEF prefiere no mezclar el deporte con la política en un partido que enfrenta a dos paises con profundos lazos históricos y enmarca el amistoso en una gira de agradecimiento al público africano que continuará en Sudáfrica, sede del mayor éxito de la historia de la selección.

Vicente del Bosque, seleccionador español, preguntado en la última rueda de prensa por la elección de Guinea Ecuatorial como sede del partido, optó por centrarse en sus labores, "en la faceta deportiva", y recordó que la selección guineana la entrena, precisamente, un español, el exseleccionador sub-21, Andoni Goikoetxea.

El seleccionador de fútbol de Guinea Ecuatorial, Andoni Goikoetxea, ha asegurado en RNE que la Roja, que disputará este sábado un amistoso en Malabo, encontrará "comodidad, un campo en buenas condiciones y seguridad". El entrenador español, que dirige a la selección africana desde marzo, ha indicado que tiene "un equipo competitivo nutrido de jugadores, sobre todo, de Segunda y Segunda B de España". Entre sus figuras, ha destacado a Nsue y Balboa, y ha explicado que una de sus principales funciones es ayudar al desarrollo "del fútbol base y formar las selecciones inferiores".

Es ahí, en la faceta deportiva, donde nos reencontramos con los muchos vínculos que siguen uniendo a España y la que fuera su provincia, Guinea Ecuatorial. El actual seleccionador se ha sumado a la larga lista de entrenadores españoles que han dirigido a la 'Roja' de África, como Quique Setién, Vicente Engonga o Manuel Sanchís padre. Además, la plantilla está formada, en buena parte, por jugadores españoles con raíces ecuatoguineanas.

Lluvia de críticas

Es la cara amable de un partido que ha levantado polvareda entre la oposición ecuatoguineana, varios partidos políticos españoles y los defensores de los derechos humanos. La Asociación Pro Derechos Humanos ha denunciado la celebración del amistoso acusando a Ángel María Villar, presidente de la RFEF, de "compartir mesa, mantel y palco con las autoridades que cometen crímenes aberrantes".

En términos similares se han pronunciado los opositores en el exilio de Guinea Ecuatorial. La Coalición de los Pueblos y Ciudadanos de Guinea Ecuatorial (CEIBA) ha expresado su "repulsa" por la celebración de un partido que, a su juicio, "servirá para refrendar, validar, legitimar y lavar el rostro de la dictadura brutal, cruel y sanguinaria de Teodoro Obiang Nguema".

Mientras, el Gobierno en el Exilio de Guinea Ecuatorial cree que "no tiene sentido que España, la campeona del mundo, juegue gratis en Guinea Ecuatorial". El líder del Partido del Progreso, Severo Moto, ha indicado a RTVE.es que Obiang "ha pujado fuerte por un partido que no pudo pagar Gabón y se habla de un desembolso de 15 millones de dólares".

Moto, además, ha declarado que ojalá Vicente del Bosque "le negara el saludo a Obiang", consciente del poder que puede tener un gesto para la población ecuatoguineana. Además, ha apuntado que "al menos servirá para que los jugadores conozcan algo de la realidad que vive el pueblo ecuatoguineano".

Por su parte, diversos grupos políticos españoles, como La Izquierda Plural, UPyD, PNV y ERC han pedido que el Gobierno de Mariano Rajoy realice un boicot institucional al partido para no avalar la dictadura de Obiang. Desde IU-ICV-CHA, su portavoz de Justicia, Gaspar Llamazares, ha emplazado al Gobierno a que tome medidas para evitar que Obiang venda ese partido como un aval a su régimen y ha criticado la "falta de sensibilidad" de la RFEF al organizar ese enfrentamiento, que no es un compromiso "de carácter deportivo, sino claramente político".