Alexis y Pedro: la pelea para ser el 'tercer hombre'

• Chileno y tinerfeño pugnan por el único puesto que dejan libre Messi y Neymar
• Con 11 tantos cada uno, son los máximos goleadores del equipo en la Liga

Pedro y Alexis luchan por la titularidad antes del 'otro' derbi

El Elche dejó maniobrar a Iniesta y Cesc a su antojo en la línea de tres cuartos y los jugadores del FC Barcelona encontraron un filón en los desmarques de Pedro y Alexis. El tinerfeño y el chileno, dos balas que se disparan como nadie al espacio, son oro puro para centrocampistas de tanta calidad y firmaron la goleada ante el conjunto ilicitano (4-0).

Alexis y Pedro acabaron ovacionados por el público del Camp Nou cuando fueron sustituidos en la recta final del partido. La estampa no es nada habitual porque son de esa clase de jugadores que enamoran mucho antes a compañeros y técnicos que al aficionado al fútbol.

Ambos tiene unas cuantas cosas en común -la verticalidad, el desmarque, la velocidad y el trabajo defensivo-, pero otras muchas que les diferencian. Alexis tiene menos pólvora que Pedro, pero es un futbolista más completo.

Por eso, no es nada sencillo determinar quién de los dos debe convertirse en el 'tercer hombre' de la tripleta atacante del Barcelona, donde Leo Messi, el mejor jugador del planeta, y Neymar Jr., el que está llamado a ser su heredero, tienen una plaza fija.

Bendito problema para Martino

El joven Cristian Tello ha quedado relegado a un papel secundario y el rol de delantero de Cesc Fàbregas, que entra en las rotaciones del centro del campo junto a Xavi e Iniesta, parece acotado al de sustituto de Messi cuando no está el argentino.

La pelea por la titularidad alimenta la competencia entre Pedro y Alexis, eleva el nivel del equipo y abre un nuevo debate en el barcelonismo, históricamente tan dado a crear enfrentamientos duales -donde los detractores de uno son los defensores del otro- entre sus protagonistas.

El Tata Martino, gran conocedor del fútbol sudamericano, sigue a Alexis desde hace tiempo y mantiene con el 'jugadoraso' una complicidad especial. "Martino me ha dado la confianza que necesitaba", reconoció el chileno a la conclusión del partido contra el Elche.

En cualquier caso, Pedro no se lo piensa poner fácil ni a Alexis ni al técnico de Rosario. El propio Gerardo Martino lo reconoció tras el triplete del canario en Getafe: "Pedro tiene una gran capacidad de gol y el mérito de que nunca baja los brazos. Si juega, está bien; si le toca estar en el banquillo, sale igual de bien. Ante un jugador así un entrenador se acaba rindiendo".

Números cantan

Alexis ha disputado 21 partidos (17 como titular y 4 como suplente) y Pedro, 25 (16 saliendo de inicio y 9 con el partido empezado). Sin embargo, el internacional chileno acumula más minutos sobre el terreno de juego (1.505 por 1.448 del español).

Con el triplete ante el Elche, el de Tocopilla (Chile) suma ya 11 goles esta campaña -todos ellos en Liga- mientras que el punta tinerfeño es el máximo realizador del equipo con 15 tantos (11 en Liga, 1 en Liga de Campeones y 3 en Copa del Rey).

El olfato goleador es la característica que quizá más distinga a ambos. Pedro Rodríguez, pese a no ser un '9' al uso, vive de las rachas de los delantero puros. Y, cuando se encuentra en estado de gracia, como el año de los 6 títulos con Guardiola o esta misma temporada, casi todo lo que toca va adentro.

Alexis, en cambio, nunca ha tenido una relación especial con el gol, más allá de que le guste regalarlos. El Barça lo fichó del Udinese hace tres temporadas, después de hacer a su compañero Antonio di Natale el máximo artillero del 'calcio' dos años seguidos con sus asistencias.

Este año, el tocopillano ya lleva seis (3 en Liga, 2 en 'Champions' y 1 en Copa del Rey), mientras que Pedro suma 4 pases de gol, todos ellos en el torneo de la regularidad.

Trabajadores incansables en la presión (Alexis lleva 54 balones recuperados y Pedro 48), el chileno es un futbolista con menos pólvora pero más completo. Su imponente físico le permite jugar no solo en banda, sino como ariete, fijar los centrales contrarios, fajarse con la zaga rival y aguantar el balón de espaldas.