Martino desdibuja al Barça que pierde el rumbo en Anoeta

• Seis titulares ante el City no se vistieron de corto, entre ellos Xavi y Cesc
• Sin control en mediocampo, un Barça discontinuo no conectó con los delanteros
• Martino reaccionó tarde y mal. Los cambios se produjeron ya con el 3-1
• Crónica del R. Sociedad 3 - Barça 1 | Datos y estadísticas del encuentro

Sergio Busquets cae después de una falta de Antoine Griezmann.

La derrota del Barcelona en Anoeta (3-1) era algo presumible. Ya desde la previa, los azulgranas se encargaban de recordar que la salida a San Sebastián era una de las más difíciles. No obstante, el Barça no había logrado la victoria en ese campo en sus últimas cuatro visitas (ahora cinco).

Pero aunque esto fuera previsible, lo peor fue la mala imagen de los culés, algo que reconoció el propio Martino al afirmar que no leyó bien el partido.

No parecía el mejor encuentro para realizar experimentos, pero a pesar de eso el técnico argentino sorprendió con una alineación novedosa, en la que seis titulares ante el City en Champions no se vistieron de corto. 

El caso de Jordi Alba, baja por precaución, era comprensible. No tanto las ausencias de Alves, Mascherano, Alexis, Cesc y Xavi, especialmente estos dos últimos, cuando el Barça no tiene que afrontar ningún partido entre semana.

Sin Xavi y Fábregas en el centro de la creación se vio a un Barça discontinuo, jugando solo a rachas y que no sabía parar a una Real con ganas, revolucionada y plantando cara a los catalanes.

En ausencia de los ‘jugones’, Iniesta tomó la batuta ofensiva, pero Álex Song y Busquets no lograban dar al Barça la profundidad necesaria para conectar con los delanteros. Messi estuvo en todo momento muy vigilado por la zaga ‘txurri-urdin’ y Neymar, quizá afectado por tantas noticias sobre su polémico fichaje, ni siquiera apareció en Anoeta.

A este mal planteamiento se unió el error de Song, que fue incapaz de marcar a Elustondo y además colaboró para anotar el primer tanto de la Real tras un gran pase de Sergio Canales (0-1).

Por debajo en el marcador, un único destello de Messi fue suficiente para que el Barça se fuera con el empate al descanso. Sin embargo los azulgranas necesitaban un lavado de cara si querían mejorar su imagen en la segunda mitad, algo que no llegó.

El 'Tata' se aferró a su planteamiento

En el túnel de vestuarios el ‘Tata’ fue expulsado por llamar ‘pelotudo’ al segundo entrenador de la Real, por lo que tuvo que ver el segundo tiempo desde la grada.

Desde este nuevo punto de vista, Martino siguió confiando en su planteamiento y no realizó ningún cambio en la reanudación. Segundo error, después de una alineación arriesgada.

Los de Arrasate, por el contrario, espoleados por Vela, Griezmann y Canales, se mostraron aún más incisivos y asestaron dos ‘puñaladas’ a los azulgranas en solo cinco minutos.

Primero Griezmann y después Zurutuza perforaron la meta de Valdés y pusieron el 3-1. Un resultado que hacía justicia a la ambición mostrada por cada equipo.

Ya con esta desventaja tan clara, llegaron los cambios. Fábregas por Song (min. 60) y Alexis por Montoya (min. 72) en un intento desesperado de dar la vuelta al encuentro.

Pero salvo una jugada aislada de Messi, que despejó Bravo, el argentino y Neymar siguieron desaparecidos y estuvo más cerca el 4-1 que el segundo gol azulgrana.

El Barcelona careció de garra, de carácter y de ambición en el momento más inoportuno. En Anoeta fue un espejismo de sí mismo y con sus dudas y errores pone emoción a una Liga que ya no lideran.

El Madrid, que ganó su choque ante el Elche, es el nuevo líder y el Barcelona tiene que conformarse con estar a tres puntos de su eterno rival (60 frente a los 63 de los blancos).

Y todo esto a la espera de saber que hace el Atlético frente a Osasuna este domingo. Una victoria, o un empate de los rojiblancos en el Sadar, relegaría al Barça al tercer puesto.