Barça- Madrid: final de Copa en el mismo escenario, con distintos artistas

• Ambos clubes han cambiado sus entrenadores desde la final de 2011
• Messi está en horas bajas y Cristiano Ronaldo será el gran ausente
• El FC Barcelona llega en un mar de dudas de juego y resultados
• El Real Madrid presenta medio equipo distinto al de hace tres años
• FC Barcelona - Real Madrid en directo, miércoles 16 de abril a las 21:30h. en La 1, HD, RNE y RTVE.es

Las horas previas a la final de Copa se viven con intensidad

FC Barcelona y Real Madrid vuelven a verse las caras en la final de la Copa del Rey por séptima vez en los 111 años de historia de la competición. El valenciano Mestalla es de nuevo el escenario sobre el que disputarán el título después de tres años, menos cuatro días, periodo en el que son variadas e importantes las cosas que han cambiado en ambos clubes. La más llamativa, la ausencia de Cristiano Ronaldo, el hombre que marcó el gol del triunfo madridista en 201. [FC Barcelona - Real Madrid en directo, miércoles 16 de abril a las 21:30h. en La 1, HD, RNE y RTVE.es]

El campo y que sea Miércoles Santo son de las pocas cosas que no cambian, aunque entonces fue el día 20 de abril. Tal vez la alteración más profunda de estos tres años está en la convulsa situación institucional que atraviesa el FC Barcelona, contraria a la estabilidad que se vive en el Real Madrid.

Sancionado por la FIFA por su política de fichajes de los menores de edad; acusado por Hacienda a cuenta del fichaje de Neymar; eliminado de la Champions antes de semifinales por primera vez en seis años; a punto de decir adiós a la Liga... Muy lejos este Barça de aquel de 2011, que llegaba en plena época dorada.

Los azulgranas habían ganado siete títulos y en Mestalla perdieron por primera vez una final con Guardiola, con quien ganaron 14 de 18 títulos disputados. El Real Madrid rompió entonces una sequía copera de 18 años y se convenció de que podía batir a su eterno rival.

Otra variación de importancia es que este año ya no volverán a cruzar sus caminos después de la final copera, como ocurrió en 2011, en las semifinales de una Liga de Campeones de la que ya están eliminados los azulgranas en esta ocasión.

Martino y el Barça, en el ojo del huracán

Las diferencias continuan en los banquillos, donde Gerardo Martino y Carlo Ancelotti tomaron el relevo de Guardiola y Mourinho, dos de los grandes protagonistas. Ambos han dejado su impronta en las plantillas que dirigen y tienen un curriculum acreditado, lo cual no les evita la crítica, al frente de unos clubes obligados a ganar todo.

En especial el 'Tata' Martino, que está en el ojo del huracán a cuenta de la crisis de juego y resultados de su equipo. Hasta el punto de que ya se cuestiona abiertamente su continuidad tras la pasada derrota en Granada. La Copa puede ser el último recurso para el Barça y para Martino, quien no tiene el predicamento que tenía Guardiola entre la plantilla.

El Barça, cuyo 'nuevo' estilo de juego lleva toda la temporada en debate, toca menos pero lo hace más lento y no encuentra un fútbol directo. El caso es que este Barça de Martino parece prisionero de la forma de jugar que tenían con Guardiola.

Ancelotti sí que parece tener mejor relación con su plantilla, o al menos más tranquila, que la que tenía Mourinho. El Madrid usa menos el contragolpe, toca algo más y es algo más compacto y menos defensivo, pero se ha mostrado temeroso e inseguro en los grandes compromisos de la campaña, salvo la eliminatoria contra el Schalke.

Estrellas en horas bajas

Con todo, lo que más llama la atención es el estado de las máximas figuras de Madrid y Barcelona. Cristiano Ronaldo no jugará y Messi llega en horas bajas. Ambos acabaron empatados como máximos goleadores del torneo de 2011, con siete dianas cada uno. En la presente edición, Messi es el 'pichichi' copero, con 5 dianas, y Cristiano está cuarto, superado por Cesc y Raúl García, que llevan cuatro goles, uno más que el portugués.

CR7 no ha superado su lesión en el bíceps femoral de la pierna izquierda, un contratiempo que se decía leve, pero que se ha demostrado lo suficientemente grave como para dejar al Real Madrid sin el hombre que ha marcado el 32,3 por ciento de los goles del equipo esta temporada.

Pichichi de la Liga, con 28 dianas, y de la Liga de Campeones, con 14, además de los tres goles logrados en la Copa, la baja de Cristiano es una pérdida muy sensible para el Madrid; tanto que hasta cambiará la forma de jugar del equipo, que deberá ser más colectiva.

Messi está muy lejos del espectacular nivel exhibido en campañas anteriores, tal vez igual de goleador, pero menos efectivo y mucho menos participativo. El mejor jugador del mundo, al menos en las últimas temporadas, atraviesa el peor momento de su carrera.

En esta final de Copa, Messi tiene una asignatura pendiente, ya que en los cinco partidos de Copa jugados contra el Real Madrid, el argentino no le ha marcado un gol a los blancos. Contrasta ello con el hecho de ser el máximo goleador histórico del 'clásico' (21 goles).

Continuidad versus renovación

Las estrellas del 'clásico', ausentes o no, seguirán siendo Messi y Cristiano, pero en los equipos hay variaciones. Menos en el Barça, y esa puede ser otra explicación de los que les está pasando este año. Respecto al 'once' inicial de la final de 2011, solo Villa está fuera del club azulgrana y Piqué no estará, por lesión.

Aunque para más de uno tres años no pasen en balde, los Pinto, Adriano, Mascherano, Alves, Xavi, Busquets, Iniesta, Messi y Pedro, siguen, y vuelve el 'eterno' Puyol. Cesc y Alexis llegaron en el verano de esa temporada.

En el Real Madrid, por lesiones o salidas, cambia medio equipo: Cristiano, Arbeloa, Marcelo, Khedira, Carvalho y Özil. Se mantienen: Benzema, aunque no participó en 2011, Casillas, Sergio Ramos, Pepe, Xabi Alonso y Di María. El argentino está en su temporada más goleadora con la camiseta blanca y es también el mayor asistente del equipo que ha incorporado a hombres como Bale, Modric, Isco o Varane.

Una de las pocas cosas que no varía es la presencia de Pinto y Casillas en las porterías. Gaditano y madrileño tuvieron actuaciones estelares en la final de 2011 y fueron, en gran parte, responsables de que el partido llegase a la prórroga. En Mestalla 2014 también tendrán en sus manos parte del destino de una final que se presume apasionante.