Benzema y su oportunidad para la reconciliación
- El delantero del Real Madrid no acaba de ser querido del todo en su selección
- Ha vivido momentos en los que se pedía su expulsión de la selección gala
- Más información: Especial Mundial de Fútbol de Brasil 2014
Después de la irregular temporada que ha cosechado Ribery, unido a que la edad no perdona, las aspiraciones de Francia pasan por un jugador, por un killer, por Karim Benzema. [Especial Mundial de Fútbol de Brasil 2014
El delantero del Real Madrid es hoy por hoy la estrella que necesita Francia, especialmente después de proclamarse con su equipo campeón de Europa en la final de Lisboa. Se trata del sucesor natural de los Trezeguet, Anelka o Henry.
Nacido el 19 de diciembre de 1987, se formó en las categorías inferiores del Olympique de Lyon, conocidas popularmente como "Gones". Los orígenes de Karim, de ascendencia argelina, son de los más humildes del barrio de Bron, donde sigue viviendo con sus padres a pesar de ser ya una estrella mundial.
Debutó con el primer equipo de Lyon en 2005, con tan sólo 18 años, y celebró con el Olympique cuatro ligas galas. Además, conquistó tres Supercopas del país (2005-2007) y una Copa de Francia (2008), siendo máximo goleador del campeonato liguero el mismo año.
De ahí dio el salto al Real Madrid como uno de los fichajes predilectos de Florentino Pérez. El mandatario madridista desembolsó en el verano de 2008 alrededor de 30 millones de euros y desechó otras opciones como la de David Villa.
El delantero cumplía así su sueño de jugar en el Real Madrid: "Todo mi entorno sabía que con 16, 17 o 18 años no había otro equipo que me hiciera soñar que no fuera el Real Madrid".
En el equipo blanco no ha vivido un camino de rosas. Siempre ha sido exigido por la parroquia merengue y hasta la salida de Higuaín, nunca ha tenido asegurada la titularidad al cien por cien.
Puesto en tela de juicio por la afición gala por no cantar el himno
Con la selección francesa empezó también pronto a deslumbrar y se proclamó campeón de Europa sub-17, firmando 14 goles en 18 partidos. Con esos números no debía tardar el debut con la absoluta, que se produjo ante Austria en el Stade de France en 2008.
Benzema no acudió al Mundial de Sudáfrica porque el ex seleccionador, Raymond Domenech, decidió que no era uno de los 23 mejores futbolistas de Francia. Pero las razones verdaderas eran las rencillas que uno y otro se traían desde que el entrenador decidió frenar su llegada al primer equipo.
La peor época de Benzema como internacional la vivió el año pasado cuando desde el sector de la ultraderecha francesa se pedía que el delantero fuera excluido de la selección nacional por no cantar 'La Marsellesa', el himno nacional de Francia que suena al inicio de cada partido de los 'bleus'.
El madridista reconoció que nunca había cantado el himno pero aseguraba que eso no afectaba a su compromiso con el combinado nacional, algo parecido a lo que hacían otros ídolos del fútbol francés, como Zinedine Zidane.
Demasiado amigo de los líos extradeportivos
El lado oscuro de Karim Benzema es ese que aparece cuando se encuentra lejos del terreno de juego.
Desde que llegara al Real Madrid se le han conocido al menos un par de accidentes de tráfico (uno en Madrid y otro en Madagascar) y otras tantas multas por exceso de velocidad.
A estos episodios habría que añadir el más grave, en el que se vio envuelto junto a su compañero de selección Franck Ribery. Ambos fueron acusados de haber recurrido a los servicios sexuales de una joven, conocida como Zahia, cuando esta todavía no había cumplido 18 años.
Finalmente, los futbolistas se vieron absueltos de la acusación de prostitución de menores de edad. La prostituta, de origen marroquí, afirmó durante la fase de instrucción que los dos futbolistas tuvieron relaciones con ella cuando era menor, pero que ignoraban su edad.
La cita mundialista de Brasil 2014 es la oportunidad de oro para que este delantero de 26 años se reconcilie para siempre con su afición.