El tiburón Nibali asesta una dentellada mortal al Tour de Francia

Movistar prueba la épica sin éxito

Llegaba el Tourmalet, o lo que era lo mismo, el último tren para conseguir la gloria en la ronda gala. De ahí que se formara una fuga de muchos kilates con nombres como el de Voeckler, Bakelants o Mikel Nieve. Precisamente el corredor vasco fue el más fuerte de la fuga. En las rampas del mítico coloso consiguió quedarse solo junto al francés Kadri (AG2R) y coronar en segunda posición su cima. La diferencia del dúo con el pelotón era en esos momentos de 4'30''.

En el descenso, el aficionado español saltó de su sofá cuando Alejandro Valverde lanzó su ataque lanzándose a tumba abierta. Por delante tenía a sus compañeros Herrada e Izaguirre para rodar en el llano por lo que la estrategia tenía tintes de inolvidable.

Sin embargo la aventura no duró más que unos kilómetros. El error que había cometido el equipo español era el no haber limpiado al grupo de gregarios. Con uno de cada equipo metido en la pelea del podio (Astana, BMC y FDJ), el pelotón logró arruinar la aventura antes de arrancar la subida de Hautacam.

Ese puerto lo encaraba Mikel Nieve en cabeza con una ventaja de menos de dos minutos debido al empujón de los Astana. El equipo kazajo sabía que su líder quería la victoria y, además, el asegurarse los maillot amarillo y de lunares.

Nibali y Horner juntos de nuevo tras el Angliru

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El italiano Vincenzo Nibali se impuso este jueves en la etapa mítica de Hautacam, la última cita con la alta montaña, y dejó sentenciado su triunfo en el Tour de Francia, mientras que el español Alejandro Valverde se cayó del podio por dos segundos.

A falta de diez kilómetros Chris Horner fue el que atacó y se llevó a rueda al italiano. Una imagen muy contraria a la que se vivió durante la pasada Vuelta ciclista a España en la que el italiano se llevaba a rueda al veterano estadounidense.

Esta vez Nibali se mantuvo detrás menos de medio kilómetro y cuando se lo propuso se fue en solitario como el que deja atrás a un niño. Las opciones de Nieve en esos momentos estaban vistas para sentencia.

Por detrás el que encendió la mecha fue primero Van Garderen y luego Pinot. Al ataque del francés solo pudo responder el BMC y Pèraud. Valverde tenía que regularse y buscar su ritmo para no dejarse una minutada en los más de cinco kilómetros que restaban hasta la meta.

Finalmente, el murciano supo sobrevivir a la ambición de Pinot, que llegó a 1'10'' de Nibali. El de la FDJ le arrebató la segunda plaza de la general, mientras que Péraud acertó a no descolgarse para encontrarse el premio de la tercera posición. A pesar de todo, ambos sentirán el aliento de un Valverde que deberá recuperar su mejor versión en la crono para conseguir un buen premio.

Otro que el sábado tiene una gran cita ante sí será Haimar Zubeldia que ha conseguido meterse en el 'top ten' de la carrera. En la crono tratará de confirmar su puesto final.

Antes, este viernes se disputa la decimonovena etapa, de 208 kilómetros entre Maubourguet Pays du Val d'Adour y Bergerac, penúltima oportunidad para los 'cazadores' de gloria.