Futre asegura que Gil les pidió perder ante el Espanyol en la temporada 90-91
- El exjugador lo ha desvelado en una entrevista al diario portugués Record
- "No podemos ganar. Dile a tus compañeros que no corran", habría dicho Gil
- Ante esta propuesta, Futre se opuso a desempeñar el papel al que le requería
- Aquel partido se lo llevaron los catalanes por 3-1 y Futre no jugó
El expresidente del Atlético de Madrid Jesús Gil pidió al portugués Paulo Futre que su equipo no ganase al Espanyol en un partido de la temporada 1990-91, según publica el diario Record.
En una entrevista concedida al diario deportivo luso Record, que publica un amplio reportaje titulado "Las mafias en las apuestas", Futre revela que Jesús Gil y Gil solicitó a sus propios jugadores que no ganasen al conjunto catalán, que se jugaba el descenso.
"Cuando estábamos en el hotel de Barcelona, el presidente Jesús Gil me dijo: 'No podemos ganar hoy. Dile a tus compañeros que no corran'. Fue la única vez que me pasó algo parecido", señaló en declaraciones a Record.
“No podemos ganar hoy“
El Atlético de Madrid perdió aquel partido en Sarriá por 3-1, aunque Paulo Futre no participó en el encuentro y emplazó al mandatario a que fuese él el que trasladase la propuesta a los jugadores Atlético, ante el enojo del mandatario.
Gil habría llegado a un acuerdo con Juli Pardo
Según la versión de Futre, Gil habría llegado a un acuerdo con el presidente por entonces del Espanyol, Juli Pardo, por el que si los rojiblancos no vencían a los "pericos", recibirían un jugador a cambio la campaña siguiente.
Ante esta propuesta, Futre se opuso a desempeñar el papel al que le requería Gil y Gil y no jugó ni un minuto.
“Así no quiero jugar“
"Así no quiero jugar. Ve tú y se lo dices (al resto de jugadores)", dijo Futre, quien añadió que el presidente bajó al vestuario y emplazó a sus jugadores a que no ganasen el partido bajo la amenaza de despidos si no seguían sus instrucciones.
Con aquel triunfo del Espanyol por 3-1 y la derrota del Zaragoza en Cádiz, el equipo barcelonés se salvó en detrimento del aragonés.