La FIFA denuncia ante la justicia a "algunos miembros" por la elección de mundiales
- Piden que se investigue la designación de Rusia 2018 y Catar 2022
- Llevan ante la fiscalía suiza varios movimientos de capitales
- El organismo rector del fútbol matiza un informe de la Comisión de Ética
La FIFA confirmó que ha presentado este martes ante la fiscalía federal suiza en Berna una denuncia por posible comportamiento irregular de algunas personas en relación a los procesos de adjudicación de los mundiales de 2018 y 2022, asignados a Rusia y Catar, respectivamente.
Según un comunicado, la FIFA explicó que pondrá a disposición de la citada fiscalía los informes elaborados sobre la materia por el presidente del órgano de instrucción de la Comisión de Ética de la FIFA, el exfiscal estadounidense Michael J. García, y el vicepresidente, Cornel Borbély.
"Aparentemente, se sospecha en particular que en determinados casos se realizaron transferencias de capitales relacionados con Suiza, lo cual precisa una investigación por parte de las autoridades judiciales suizas", añadió la FIFA.
La federación que preside Joseph Blatter indicó que "en contraposición a los órganos de la FIFA, los órganos judiciales del Estado tienen la posibilidad de llevar a cabo pesquisas con la ayuda de medidas coercitivas de orden penal".
Igualmente explicó que los informes de Michael J. Garcia y Cornel Borbély se pondrán a disposición de la fiscalía federal suiza por intermedio de Hans-Joachim Eckert, presidente del órgano de instrucción de la comisión Ética de la FIFA, que es quien ha recomendado al presidente Blatter la presentación de esta denuncia, al amparo del Código Ético de la FIFA.
Hans-Joachim Eckert dio por cerrada el pasado día 14 la investigación iniciada sobre la concesión de los mencionados mundiales el 2 de diciembre de 2010 y consideró que no se produjo "ninguna violación o incumplimiento de las normas y reglamentos correspondientes" en los procesos de candidatura.
Contradicción con el 'informe Eckert'
Eckert se pronunció así tras analizar el informe de 350 páginas elaborado previamente por el órgano de instrucción que preside Michael J. García, que, según el primero, "tiene total independencia para iniciar procedimientos contra individuos concretos" si lo estima pertinente.
El informe de Michael J. García refleja actividades de los equipos que defendían las candidaturas a 2018 y 2022 para captar el voto, como la entrega de regalos a personas vinculadas a la FIFA, algunas de ellas ya sancionadas por esta por incumplir el código ético.
El propio García discrepó de las conclusiones de Eckert, por entender que contienen "numerosas, incompletas y erróneas reproducciones de los hechos", y anunció su intención de presentar un recurso.
Michael J. García empleó más de un año para elaborar los 350 folios de su investigación, después de entrevistar a más de 75 testigos y recopilar un registro que, además de grabaciones con los entrevistados, comprende más de 200.000 páginas sobre el caso.
Antes de pronunciarse sobre el mismo hace cuatro días, Hans Joackim-Eckert dijo que era imposible publicar el documento de su colega en su totalidad y a la vez que su resolución hizo público un extracto de 42 páginas.
Tras el dictamen de Eckert, la FIFA dijo "sentirse satisfecha por el hecho de que hasta cierto punto se ha llegado a una conclusión con el cierre del caso" y aseguró que "proseguirá con los preparativos de Rusia 2018 y Catar 2022, los cuales comenzaron ya hace tiempo".